Con el propósito de promover y resaltar iniciativas contra la discriminación y los prejuicios, el Comisionado para el Monitoreo y la Lucha contra el Antisemitismo de la Organización de los Estados Americanos (OEA), a cargo de Fernando Lottenberg, llevó adelante un evento para reconocer al proyecto “Puentes Institucionales”, una propuesta ideada para poner en diálogo a diferentes entidades con el fin de fomentar talleres de capacitación y concientización dentro del sistema de justicia.
La cita en la calle Lavalle 1334 de la Ciudad de Buenos Aires, sede de la Asociación de Magistrados y Funcionarios de la Justicia de la Nación (AMFJN), congregó a jueces, fiscales, abogados, embajadores, funcionarios, dirigentes y representantes de distintas instituciones. Con el salón del primer piso lleno, la jornada tuvo inicio a las 15.
El acto del Comisionado buscó homenajear a la Asociación de Abogados Judíos de la República Argentina (AAJRA), presidida por Hernán Najenson y al Museo del Holocausto de Buenos Aires, encabezado por Marcelo Mindlin, por impulsar la iniciativa “Puentes Institucionales” como un modelo de sensibilización frente al fenómeno del antisemitismo. También apuntó a distinguir a las primeras instituciones que se sumaron al proyecto educativo a través de la firma e implementación de convenios.
Allí fueron destacadas la Cámara Federal de Casación Penal, presidida por el juez Mariano Borinsky, la AMFJN, a cargo del juez Andrés Basso, y la Defensoría General de la Nación, en cabeza de Stella Maris Martínez.
La apertura del evento estuvo en manos del comisionado Lottenberg, quien luego de agradecer a los asistentes calificó a la propuesta interinstitucional de “Puentes” como un “hito en nuestra lucha conjunta contra el antisemitismo y a favor de los derechos humanos”. En esa línea, definió al antisemitismo como “una de las formas más persistentes y peligrosas de discriminación, que sigue siendo un problema global y regional que requiere de atención constante”.
“Los hechos ocurridos el 7 de octubre de 2023 nos recuerdan que los discursos de odio pueden derivar en violencia física”, señaló en referencia al ataque del grupo terrorista Hamas a Israel.
A continuación, se proyectó un video pensado para transmitir “la esencia” de la propuesta diseñada y liderada por Flora Acselrad, Mariana Kohan y Laura Kvitko, quienes también fueron homenajeadas por el organismo de la OEA.
En rigor, el programa promueve talleres, visitas y capacitaciones para los integrantes del Poder Judicial en su conjunto. El objetivo es fomentar el diálogo, reflexionar sobre la memoria histórica, resaltar la importancia de los derechos humanos y concientizar en materia de prejuicios y discriminación antisemita.
“La idea surge de un compromiso genuino por el respeto y la diversidad. De la necesidad de construir puentes que inviten a la reflexión sobre los peligros de los prejuicios, y sobre cómo se propagan a través de la indiferencia. Puentes sólidos que pervivan a quienes lo construimos, para que puedan atravesarlos también las generaciones futuras”, explicó Flora Acselrad al recibir su mención.
Por su parte, tanto Mariana Kohan como Laura Kvitko agradecieron la intención de la Corte Suprema de Justicia, en cabeza de Horacio Rosatti, junto a la de otros organismos, para suscribir convenios para sumarse al proyecto en cuestión. “Les extendemos a todos nuestra invitación para ser parte de esta construcción, porque en el camino no solo nos transformamos en mejores personas, sino también forjamos una justicia más empática y más diversa. Quien salva una vida, salva el mundo entero”, aseveró Kvitko con una cita del Talmud.
La jornada a sala llena contó con la participación del presidente de la Cámara Federal porteña, Mariano Llorens, y sus colegas Leopoldo Bruglia y Pablo Bertuzzi. Estuvieron también los jueces Marcelo Gallo Tagle, Marcelo Peluzzi y Gustavo Meirovich; el expresidente de la DAIA, Jorge Knoblovits y el titular del Centro Simón Wiesenthal, Ariel Geblung; el fiscal Pablo Turano y los embajadores Julio Bitelli y Fabiana Loguzzo, entre otras autoridades.
A modo de “celebrar la alianza en la lucha contra el antisemitismo”, la presentadora del evento convocó al presidente de la Asociación de Abogados Judíos de la República Argentina, Hernán Najenson, y a la secretaria general del Museo del Holocausto de Buenos Aires, Fabiana Mindlin, para pasar al frente a recibir una placa. Ambos agradecieron el reconocimiento y se comprometieron a seguir trabajando para llevar el mensaje a toda la sociedad.
“Nuestra misión es mantener viva la memoria de la Shoá y combatir la discriminación”, dijo Mindlin. Luego, el titular de la AAJRA expresó: “Nuestra asociación tiene 20 años y se forma de un grupo de jóvenes que decidió que valía la pena encolumnarse atrás de una idea como la de los derechos humanos y la lucha constante contra el antisemitismo, entendiéndolo como aquello que pone de manifiesto que la sociedad está en entrando en deterioro”.
A su término, el camarista Mariano Borinsky pasó al frente para recibir una mención en representación de la Casación Federal. Allí, al agradecer el reconocimiento, contó una anécdota de su padre, que falleció cuando el magistrado tenía 19 años.
“Él era secretario de la justicia penal económica y siempre soñó con ser juez, incluso con ser juez de la Cámara de Casación Penal. Antes de irse, estaba muy preocupado, porque había tanto antisemitismo que no podía llegar a ser magistrado por el hecho de ser judío; eran otros tiempos. Yo estudiaba economía, pero cuando falleció mi padré, dije ‘voy a ser el primer juez judío de la Cámara, por eso para mí es un acto muy especial, que conjuga todo’”, expresó el camarista.
Poco después, al ponderar la propuesta de “Puentes Institucionales”, el juez dijo: “Me parece que es una actividad vinculada con la memoria; es una afirmación de los principios de justicia, de convivencia armoniosa. Con esto buscamos que todos los jueces comprendan la importancia de los derechos humanos, de la memoria histórica. Y además, cuando hablamos del antisemitismo, no solo hablamos de judaísmo sino de todo tipo de discriminación: por ser judío, mujer, musulmán, es decir, por cualquier condición”.
Y concluyó: “Esa es la máxima del principio de igualdad ante la ley, de inclusión de la comunidad judía en todo tipo de actuación. Lo que hemos trabajado desde la Cámara tiene que ver con esto”.
Por su parte, el titular de la AMFJN, el juez Andrés Basso, agradeció por el “altísimo honor de recibir esta distinción internacional” por ser una de las entidades pioneras en sumarse a la iniciativa, a través de la cual envía desde su institución visitas continuas de magistrados al Museo del Holocausto para generar conciencia. “Todos los que ocupamos lugares importantes de representación tenemos un imperativo moral de concientizar”, aseveró.
Además, señaló: “Lo mas importante para luchar contra el flagelo de la discriminación es la educación, la concientización de la ciudadanía. Tenemos la obligación de comunicar a las nuevas generaciones estos flagelos, en este caso, el del holocausto”.
La titular de la Defensoría General de la Nación, Stella Maris Martínez, cerró el evento con un recuerdo a la jueza Carmen Argibay y una reflexión vinculada al tema: “Es importante hacer talleres, hacer sensibilización, entrar codo a codo, sentarse y hacer hablar a la gente. No idealizar. Porque realmente la discriminación sigue vigente”.
Y concluyó: “Estoy convencida de que contra todo esto se puede luchar concientizando. No hay que pontificar, hay que sentarse de igual a igual y empezar a deconstruir esas ideas que en el fondo subyacen y que muchos argentinos todavía conservan. Por eso este proyecto es importantísimo. La Defensoria ha estado y va seguir estando comprometida”.
Fotos: Gustavo Gavotti