La justicia federal de Mendoza autorizó al ex juez federal Walter Bento a tener una salida extraordinaria de prisión hasta el jueves para asesorar y conocer a los ayudantes terapéuticos de su hijo Facundo, quien sufre sufre encefalopatía crónica no evolutiva que le presenta dificultades para valerse por si mismo
“El objetivo primordial de esta medida es que Walter Bento coadyude a vincular a su hijo Facundo con los acompañantes terapéuticos, los pueda conocer, explicar las necesidades de su hijo y las modalidades de atención a las que está acostumbrado Facundo”, sostuvieron en su resolución las juezas del Tribunal Oral Federal 2 de Mendoza, Gretel Diamante, María Carolina Pereira y Eliana Ratta Rivas, quienes juzgan a Bento por actos de corrupción.
La salida extraordinaria rige entre ayer y el jueves a la mañana. El tribunal dispuso que “a fin de asegurar que el imputado permanezca en el domicilio tal como se indica, se ordenarán visitas aleatorias por Gendarmería Nacional con el correspondiente aviso a la administración del barrio privado en el se domicilia Facundo Bento”.
El tribunal también dispuso que “durante la permanencia de Walter Bento en el domicilio, el ingreso de terceras personas se limitarán al núcleo familiar primario y a sus abogados. Asimismo, así como también aquellas personas que se ocupen de la salud y atención de Facundo, como también servicios de asistencia de salud que ingresen para la familia en general”.
Las juezas volvieron a rechazar el pedido de prisión domiciliaria de Bento, que ya había sido denegado en junio pasado y ratificado por la Cámara Federal de Casación Penal.
El planteo fue hecho por la defensa de Bento y la de sus hijos Luciano y Nahuel, también juzgados en la causa de corrupción. Explicaron que Facundo por su condición no puede valerse por si mismo. Explicaron que el padre está detenido, la madre en internación y los otros dos hijos no están en condiciones de hacerse cargo.
Las juezas del tribunal rechazaron los planteos. Explicaron por un lado que la atención que requiere Facundo no es de todo el día porque asiste de lunes a viernes a un instituto terapéutico desde las 8.30 a las 12.30 horas. También que los hermanos Luciano y Nahuel pueden atender a Facundo.
“El Tribunal reitera los argumentos ya vertidos en la resolución aludida en párrafos precedentes respecto de las obligaciones que les asisten a los hermanos y que pueden brindar organizándose mancomunadamente, ajustando sus horarios y trabajando la voluntad para hacerlo; aún con las dificultades anímicas, laborales o las que fueran, como ocurre en cualquier concierto familiar en la que suceden acontecimientos que disrumpen en la dinámica regular de una familia como el que se presenta en el caso”, sostuvieron las magistradas y agregaron que “tanto Luciano Bento como Nahuel Bento de 30 y 32 años respectivamente, son dos personas adultas que bien pudieron tomar las riendas en la coyuntura que les toca y en ausencia de su madre haberse encargado de materializar la asistencia de los profesionales de la salud cuidadores domiciliarios”.
Tras la resolución, el propio Bento presentó una nota en el tribunal oral en la que calificó la decisión como “autoritaria” e “inhumana”. “Las juezas creen que de ese modo evitarán que suceda una tragedia, cuando lo único que hacen es coadyuvar al peor desenlace posible que -sin lugar a dudas- hará responsables a todas las funcionarias que generaron esta tan innecesaria como cruel situación de peligro para una persona sumamente vulnerable”, dijo sobre las salidas extraordinarias y el cuidado de Facundo.
“Diversos estudios científicos y médicos invocados en el marco de la solicitud y acreditados con las declaraciones recibidas en el juicio, coinciden en que la separación de un joven con discapacidad de sus progenitores tendrá consecuencias devastadoras para su desarrollo emocional y psicológico”, agregó.
Bento se desempeñaba como juez federal de Mendoza y tenía a su cargo la investigación de causas de crimen organizado, además de la competencia electoral que recae sobre ese juzgado. En 2023, fue enviado a juicio político y suspendido por unanimidad por el Consejo de la Magistratura acusado de mal desempeño de sus funciones y en noviembre fue destituido por mayoría, lo que Bento apeló a la Corte Suprema de Justicia de la Nación.
Con la destitución fue detenido en la causa de corrupción que tiene en etapa de juicio oral en Mendoza. Junto a una treintena de personas está acusado por una serie de delitos como asociación ilícita, cohecho pasivo, omisión y retardo de justicia, enriquecimiento ilícito, lavado de activos de origen delictivo, prevaricato y falsedad ideológica. Allí está acusado de valerse de diferentes abogados para cobrar coimas a imputados para beneficiarlos y manipular procesos judiciales.