La defensa del ex presidente de la Nación Alberto Fernández propuso hoy a su quinto testigo en la causa en la que está siendo investigado por violencia de género contra su ex pareja y ex primera dama, Fabiola Yañez. Como en los casos anteriores el testigo fue presentado con la reserva de sus datos de identidad, en un sobre cerrado ante el fiscal federal Ramiro González e identificado con una letra. En este caso es el “Testigo B”.
La defensa, a cargo de la abogada Silvina Carreira, ya presentó los “Testigo A”, “Testigo G”, “Testigo F” y “Testigo D”. Los identifica con letras porque solicitó el resguardo de su identidad porque trabajaron en la quinta de Olivos durante su presidencia. ”No puedo dejar de destacar que los testimonios de personal de la Quinta de Olivos deben tener recaudos especiales dado que su exposición pública podría comprometer la seguridad nacional”, planteó la abogada en su presentación a la que accedió Infobae.
En el sobre con los datos, la defensa también acompañó las declaraciones que los testigos hicieron ante escribano público y en las que dieron cuenta que no hubo violencia de género y que los moretones que exhibió Yañez fueron producto de caídas por el consumo de alcohol o por secuelas de tratamientos estéticos.
Los sobres de los primeros cuatro testigos ya fueron abiertos y el fiscal González tiene que decidir si los convoca a declarar ante la justicia. Por el momento ninguno de los testigos de la defensa fue citado. La defensa plantea que deben ser convocados cuanto antes para resguardar las garantías del acusado.
Las fuentes consultadas señalaron que esa decisión llegará una vez que finalice la primera ronda que convocó el fiscal. Ya declararon siete personas y restan que lo hagan dos más: Miriam Verdugo, la madre de Yañez que vive con ella en España, y Sofía Pacchi, amiga de la ex primera dama, ex funcionaria del gobierno de Fernández y que participó del festejo de cumpleaños de Fabiola Yañez en la quinta de Olivos en plenas restricciones de la pandemia del coronavirus.
En la causa ayer declaró como testigo Tamara Yañez, una de las hermanas de Fabiola. La mujer dijo que vio como Fernández “agarró del brazo fuerte” después de que haya entrado a los gritos a la habitación. Dijo que el hecho ocurrió en la quinta de Olivos en 2021, en una fecha que no pudo precisar.
“Yo estaba con mi hija de 7 u 8 años. Nosotras ya estábamos en la habitación que después fue de Francisco. Yo tenia la puerta de la habitación cerrada y empecé a escuchar gritos de Alberto, subo el volumen de la televisión porque estaba mi hija y no estaba dormida; me puso nerviosa la situación que no paraba, me fui al baño y empecé a cepillarme los dientes con la puerta abierta del baño y mi hermana abre la puerta de ingreso a la habitación, yo la miro y él viene, la agarra del brazo y se la lleva a su habitación. La agarró del brazo fuerte y le dijo ´vení´”, declaró Tamara Yañez.
La hermana relató que la violencia verbal era permanente. “Verbales siempre, eran comunes y podía haber terceros. La hacía callar en la mesa, en una cena. Eso pasaba siempre, de callarla, de dejarla atrás en una caminata o cuando llegaban a un lugar”, contó y recordó una sesión de fotos en la residencia de Chapadmalal en la que le gritó.
La mujer también contó que vio el moretón en el ojo derecho de Fabiola Yañez. Fue en el viaje oficial que en junio de 2021 la entonces primera dama hizo a Misiones, donde Tamara contó que vive desde 2017,vprovincia de la que son oriundas. Tamara relató que una mañana le llevó el desayuno a su hermana y que le vio el ojo rojo y que le preguntó qué le había pasado.
“Me dice que había discutido con Alberto, era de noche y estaban en la cama y que Alberto le pegó un manotazo. Yo le pregunté por qué estaban discutiendo, y me dice que por lo mismo de siempre, yo deduje en ese momento que tenia que ver con otra mujer. Yo sabía que las discusiones entre ellos eran por infidelidades de parte de Alberto con otras mujeres. Esa charla quedó ahí. Ella se empezó a maquillar para salir de la habitación y salió sin que se le noté el ojo morado. Es más, cuando llegó la noche anterior no se le notaba”, recordó.