El presidente de la Asociación de Magistrados y Funcionarios de la Justicia Nacional (AMFJN), Andrés Basso, se reunió el sábado con el Papa Francisco en una audiencia privada que se realizó en el Vaticano. A través de un comunicado, la AMFJN señaló que Basso y Francisco “pudieron dialogar en un clima muy cordial y ameno sobre los desafíos y diversas cuestiones vinculadas al servicio de justicia en nuestro país y en la región”.
El encuentro se realizó en la biblioteca papal y luego Basso mantuvo una reunión con el embajador argentino en el Vaticano, Luis Pablo María Beltramino.
“El presidente de la AMFJN llevó el saludo de todos los integrantes del Poder Judicial y los ministerios públicos de la Argentina y destacó la tarea institucional de la Asociación, a la vez que el Santo Padre resaltó la función esencial que los magistrados cumplen para asegurar el respeto de los derechos y las garantías de los ciudadanos. Compartieron, además, pareces sobre el funcionamiento de la justicia y la importancia de una justicia con mirada humanitaria”, agregó la AMFJN.
Basso le regaló a Francisco una escultura que simboliza la imagen de la justicia y de una placa que hicieron los presos de la unidad federal 22 de Jujuy. “El pontífice bendijo una Cruz para la AMFJN y obsequió distintas publicaciones para la entidad. En nombre de los magistrados y funcionarios que representa, Basso agradeció la audiencia concedida por Francisco, un hito significativo para la Asociación”, cerró el comunicado.
La Asociación de Magistrados es la entidad política y gremial de los jueces y fiscales federales. Basso ganó las elecciones al frente de la entidad el año pasado con la “Lista Bordó” que se impuso 46,10 por ciento de los votos, mientras que las listas Celeste y Compromiso Judicial consiguieron 36,04 por ciento y 17,86 por ciento respectivamente.
Basso hizo su carrera en la Justicia Federal de la provincia de Buenos Aires, primero en La Plata y después en Lomas de Zamora. En 2015 fue nombrado juez del Tribunal Oral Federal 3 de Comodoro Py donde le tocó intervenir en casos de alto impacto político y público. El más importante fue el juicio oral por la obra pública en el que el año pasado el TOF 2 condenó a la vicepresidenta de la Nación, Cristina Kirchner. El voto de Basso fue el más duro porque se inclinó por condenar por asociación ilícita, aunque quedó en minoría con sus colegas.
También juzgó el caso Oil Combustibles, al reducidor de autos Carlos Telleldín por el atentado a la AMIA, condenó a los testigos que mintieron por decir que el juez Sebastián Casanello había estado con Cristina Kirchner en la quinta de Olivos. Además intervino en juicios de lesa humanidad (condenó a Miguel Etchecolatz) y de narcotráfico, como el del líder peruano Marcos Estrada González, condenado a 24 años de prisión.