Fue una audiencia “a zoom cerrado”. Tal como lo había adelantado esta mañana Infobae, la Cámara Federal de Casación Penal citó a los acusados en la causa por el encubrimiento en la investigación por el atentado a la AMIA para tener una entrevista personal con cada uno. No se trataba de analizar la prueba. Eso ya se escuchó en la audiencia de apelación. Esta vez era un encuentro como paso previo a resolver si se confirma, se revoca o se modifica alguna de las penas y absoluciones que dictó el Tribunal Oral Federal 2 en febrero de 2019. Allí la pena más alta la recibió el ex juez Juan José Galeano, a seis años de prisión. La fiscalía y Memoria Activa reclamaron una condena más alta; la defensa, su absolución.
Aunque el tribunal instó a que no trascendieran pormenores de la audiencia, fuentes que pudieron estar presente dieron detalles de lo que había pasado allí. El tribunal aclaró que buscaba conocer en términos personales a cada imputado. En la audiencia estuvieron presentes también los querellantes: Rodrigo Borda y Adriana Reisfeld por Memoria Activa y Analia Fangano, por la agrupación Familiares y Victimas. También estuvieron representantes del CELS y el ex policia y abogado Juan José Ribelli, junto a su abogado José Manuel Ubeira. En nombre del Ministerio de Justicia asistió el abogado Roberto Churba. El fiscal Raúl Plée y los abogados de la DAIA no participaron.
Galeano contó que ayer había cumplido 66 años. “La mitad de mi vida fue la causa AMIA”, dijo. Contó que a los 35 años se convirtió en juez y al año siguiente explotó la bomba en la sede de la mutual judía. “No sabía nada de terrorismo, no había reglas, nadie sabía nada... Hice mi trabajo lo mejor que podía hacerlo. Solo busqué la verdad”. Galeano fue destituido por su actuación en la causa AMIA. Habló de su familia y de cómo transitó un cáncer. Hubo algunas lágrimas en sus palabras.
“¿Revisa su actuación?”, le preguntó el juez Carlos Mahiques, a cargo de la audiencia. “Nunca me imaginé encontrar tantas miserias”, respondió. Habló de llamados, peleas, discusiones y boicots que vinieron de la política y no desde el Poder Judicial. “Actué con ingenuidad”, confesó. En ningún momento habló del pago de 400 mil dólares que la SIDE le entregó al detenido Carlos Telelldín en 1996, a punto de cumplirse los dos años de la tragedia, uno de los ejes de los delitos por los que fue condenado por el Tribunal Oral Federal 2, a seis años de prisión.
Cuando había declarado en el juicio oral, antes del veredicto, Galeano les había dicho a los magistrados del Tribunal: “Si ustedes hubieran estado en mi lugar, ¿qué hubieran hecho? No sólo les pido empatía ya que todos son jueces y están juzgando a un abogado por su actuación como Juez”. Y agregó ”aún con escasez de medios, nuestra inexperiencia en el tratamiento del terrorismo, la falta de investigadores adecuados y confiables, sin legislación apropiada, pudimos hacer una enorme investigación que desenmascaró a los responsables”, agregó. El tribunal lo condenó a seis años de cárcel.
Hoy, ante los jueces Carlos Mahiques, Diego Barroetaveña y Angela Ledesma que revisarán esa condena, Galeano recordó que Irán no solamente pidió su extradición sino que dictó dos “fatwas” (condenas religiosas a muerte) en su contra. Y recordó además lo difícil que era en ese momento investigar. “El Ejército de Israel no daba cuenta de nada. No podíamos hacerles entender que el juez era el que manejaba la investigación”, dijo.
Galeano reveló además intimidaciones que sufrió siendo juez y que hasta ahora no habían trascendido. Aunque tenía custodia permanente, recibió dos advertencias en su casa. La primera fue en un cumpleaños: entraron a su casa y se llevaron solo los regalos que le habían hecho. La segunda fue usando su sueldo como herramienta: irrumpieron en su casa, fueron a buscar el sobre en donde les pagaban el salario (no estaba bancarizado) y usaron los billetes como camino hacia los portarretratos de sus hijos, revelaron a Infobae fuentes consultadas. “La custodia no veía nada”, señaló. Habló de los “momentos de desesperación y de presión” que vivió mientras estuvo al frente de la causa.
El ex jefe de la SIDE Hugo Anzorreguy también se conectó por zoom. Fue condenado a cuatro años y medio. Contó que tiene 85 años, siete hijos y muchos problemas de salud. Los ex fiscales Eamon Mullen y José Barbaccia, sentenciados a dos años, también hablaron de cómo fue impulsar esa investigación en su juventud y el juez les preguntó con qué recursos contaban. El ex titular de la DAIA, Rubén Beraja, absuelto en el juicio, recordó que desde Israel les preguntaban “si Argentina estaba dispuesta a investigar el atentado”.
Carlos Telledín, el ex reducidor de autos que fue condenado a tres años y medio de prisión, contó cómo fueron los años en que estuvo preso por la causa AMIA y cómo se convirtió en abogado en prisión. “Tengo 340 causas y hasta ahora no hemos tenido denuncias ante el Colegio de Abogados. Hemos tratado de ser lo más serios posible”, dijo. Su última defendida famosa fue Brenda Uliarte, acusada por el intento de homicidio de Cristina Kirchner.
En la audiencia también estuvo presente Ana Boragni, su ex esposa condena a dos años de prisión porque participó del cobro de los 400 mil dólares. Ahora, a casi 30 años del atentado y 28 de aquel pago, Boragni involucró al ex ministro del Interior Carlos Corach en esa operación, como lo había hecho en el juicio oral. El abogado de Telleldín en ese momento era Víctor Stinfale, quien también fue a juicio. Lo absolvieron.
Stinfale se encargó de recordar que su abogado era Mariano Cúneo Libarona, hoy ministro de Justicia. En su intervención, el abogado que supo estar cerca de Diego Maradona contó sus problemas de salud y que ya no se hace tantos problemas como en su juventud porque prioriza su bienestar. Fue entonces cuando uno de los jueces le preguntó si no lo afectaba la suerte de Deportivo Riestra, el club de futbol del Bajo Flores que se encargó de manejar.
Cada uno de los acusados respondió esas preguntas personales en el marco de la audiencia visu, una entrevista que busca hablar directamente con los imputados antes de dictar el fallo. No siempre ocurre: se hizo en la causa por “la ruta del dinero k”, en donde la Casación terminó reduciendo el monto de la pena dictada contra Lázaro Báez e incluso absolviendo a sus dos hijas, recordaron ante Infobae fuentes judiciales. Terminado el desfile de imputados, Mahiques dio por cerrada la audiencia: “En breve vamos a resolver”, avisó.
El juicio por el encubrimiento comenzó en 2015. El veredicto se dictó el 28 de febrero de 2019. Fue después de casi cuatro años de debate oral y público que disparó, incluso, internas y denuncias en el oficialismo de ese período, expuestas por la entonces diputada Elisa Carrió y el ex jefe de la Unidad AMIA Mario Cimadevilla. De los 13 acusados sentados en el banquillo, cinco fueron absueltos. Allí encabezó la lista el ex presidente Carlos Menem, fallecido el 14 de febrero del 2020.
Después de la audiencia, Memoria Activa publicó en sus redes un duro comunicado en donde advirtieron su temor de estar ante un intento de “salvar a la corporación judicial”.