A un año y medio del atentado contra la vicepresidenta Cristina Kirchner y cuando está a punto de definirse cuándo comenzará el juicio oral por ese ataque, una de las principales acusadas volvió a cambiar de abogado. Ayer, Infobae reveló que Brenda Uliarte, procesada como coautora del intento de homicidio, había echado al abogado Carlos Telleldín, que la representaba desde junio pasado. Dijo que se sentía “abandonada” por la justicia y la defensa. Cuando todo hacía preveer que le designarían un defensor oficial, apareció en la causa su nuevo abogado: Alejandro Cipolla, representante de varios escándalos mediáticos.
Cipolla era el abogado de Natacha Jaitt, la conductora que apareció muerta y semidesnuda tendida sobre una cama en un salón de fiestas en Villa La Ñata, partido de Tigre. También es el representante legal de Morena Rial, la hija del periodista. Y del cantante L-Gante, el youtuber uruguayo Yao Cabrera o el médico tratante de Diego Maradona. Leopoldo Luque. Cumple, además, todas las condiciones de un abogado mediático. Le gusta generar polémica y dar pelea en algún panel televisivo.
“Incorpórense los manuscritos remitidos por el C.P.F. N° VII de Ezeiza y atento a lo allí manifestado por la imputada Brenda Elizabeth Uliarte, revóquese la designación del Dr. Carlos Alberto Telleldín y de la Dra. Sabrina Burrueco Mansilla como letrados particulares de la nombrada, y desígnese en su reemplazo al Dr. Alejandro Marcial Cipolla, quien deberá aceptar el cargo conferido dentro del tercer día de notificado, bajo apercibimiento de tenerlo por no designado. Notifíquese”, dice el escrito dispuesto hoy por el Tribunal Oral Federal 6, a cargo de la jueza Sabrina Namer.
Cipolla aparece ahora en la causa en donde se juzgará a los acusados de haber intentado matar a la entonces vicepresidenta. El atentado ocurrió la noche del 1° de septiembre de 2022. Cristina Kirchner llegaba a su casa, en la esquina de Montevideo y Juncal en el barrio porteño de Recoleta. Allí la esperaban, como desde el día en que el fiscal Diego Luciani pidió su condena a 12 años de prisión por asociación ilícita y defraudación al Estado en la causa Vialidad, un nutrido grupo de militantes para saludarla. Fernando Sabag Montiel también estaba allí. Se acercó y le apuntó en la cara con una Bersa calibre .32, que gatilló al menos una vez. La bala no salió porque no estaba cargada en la recámara. Terminó atrapado por militantes, sin que la custodia de Cristina Kirchner ni ella misma se dieran cuenta de lo que había pasado.
Brenda Uliarte fue detenida el 4 de septiembre. En las horas previas había aparecido por televisión junto al jefe de los copitos, Nicolás Gabriel Carrizo, también detenido, para decir que no tenían nada que ver. Según se desprende del análisis de su celular, la joven tenía un plan para matar a CFK desde hacía varios meses. “Hoy me convierto en San Martín, voy a mandar a matar a Cristina”, le había dicho a su amiga Agustina Díaz.
Durante la primera parte de la causa fue representada por el defensor oficial Gustavo Kollman. En ese momento no declaró. Sin embargo, tras una crisis de nervios en la cárcel y después de que los psicólogos informaran un leve retraso madurativo, Brenda decidió nombrar como defensor a Carlos Telleldín, el ex acusado de la causa AMIA que ya había sido sondeado por el padre de la detenida desde el principio del caso para asesorarla. Telleldín la representó en el juicio oral que se hizo en julio contra ella y Sabag Montiel por la tenencia de un DNI que les encontraron en la casa en la que compartían, durante el allanamiento por este atentado. Allí terminaron condenados los dos a un año de prisión en suspenso.
En la causa por el atentado, Telleldín entregó un escrito, que buscó ser una ampliación indagatoria aunque la causa ya había sido elevado al tribunal oral. Allí la joven aseguró que nunca creyó que su novio iba a atentar contra CFK, que ella lo quiso evitar pero no pudo, que era víctima de violencia de género. También intentó abonar a la llamada “pista Casablanca” contra el diputado del PRO Gerardo Milman al que la querella apunta como un posible organizador político del atentado. Esa pista todavía está en instrucción. Hace unas semanas, tal como reveló Infobae, todas las partes le presentaron al tribunal las pruebas que querían llevar al juicio oral. Eso está por definirse.