El regreso en febrero de la actividad judicial genera expectativa por el futuro de varias causas de alto impacto político. Una de ellas es “Los Sauces-Hotesur” donde la principal acusada es la ex presidenta de la Nación Cristina Kirchner. Allí se espera la definición de cómo continuará el expediente después de que se ordenara ir a juicio oral. Mientras que las miradas también están puestas en la Corte Suprema de Justicia de la Nación que tendrán la palabra final: el sobreseimiento o el juicio oral.
El escenario se plantea así. En noviembre de 2021 en Tribunal Oral Federal (TOF) 5 sobreseyó a Cristina Kirchner y al resto de los acusados, entre ellos sus hijo, el diputado nacional Máximo Kirchner y Florencia Kichner. Pero en septiembre del año pasado, la Cámara Federal de Casación Penal revocó esa decisión y ordenó que se haga el juicio oral. El caso escaló a la última instancia, la Corte Suprema. La única imputada que ya quedó afuera del proceso es Florencia: la Casación sí confirmó su sobreseimiento y la Fiscalía no apeló.
Las defensas, entre ellas la de la ex presidenta, apelaron para que intervenga el máximo tribunal al que le pidieron que sobresea a los acusados. La Corte Suprema no tiene plazos para resolver.
El TOF 5 ya había determinado qué prueba se iba a analizar y tratar en el juicio. Pero con el sobreseimiento todo quedó suspendido. Con el fallo de Casación, el fiscal Diego Velasco pidió reactivar el expediente con el análisis de nueva prueba para incorporar a la causa.
Así llegó el expediente a fines de 2023: con los pedidos del fiscal pendientes de resolución y con la apelación en la Corte Suprema.
En las causas “Los Sauces-Hotesur” se investiga un presunto lavado de dinero y asociación ilícita de parte de esas sociedades, propiedad de la familia Kirchner, en el alquiler de sus hoteles y propiedades a los empresarios Lázaro Báez, Cristóbal López y Fabián De Sousa. La imputación es que los alquileres se hicieron como contraprestación a las obras públicas que sus empresas recibieron durante los gobiernos de Néstor y Cristina Kirchner.
Para cuando el 1 de febrero retome la actividad en tribunales se espera que el TOF decida cómo avanzar en el caso. Primero deberá determinar si se continúa con la prueba que solicitó la Fiscalía para llegar con el caso a punto para comenzar el juicio. Allí aparece una pregunta: ¿se puede avanzar cuando está pendiente una decisión de la Corte?
“Muchos juicios comienzan con planteos que están en la Corte”, explica una fuente judicial consultada por Infobae y pone de ejemplo otro caso que involucró a Cristina Kichner. Es el de obra pública en Santa Cruz, en el que la ex presidenta fue condenada a seis años de prisión e inhabilitación perpetua para ejercer cargos públicos. El proceso se inició con varias apelaciones en el máximo tribunal que se rechazaron con el juicio en su etapa final.
Sin embargo, la misma fuente aclara. “Pero ahí no estaba apelado un sobreseimiento. En el caso Los Sauces-Hotesur la situación es distinta porque la Corte tendrá para analizar un fallo que sobresee y otro que ordena hacer el juicio y no planteos por otro tipo de cuestiones”, explica.
Una mirada general indicaría que el TOF 5 podría avanzar con la prueba y postergar una definición del comienzo del juicio oral hasta tanto la Corte Suprema resuelva. Todo indica también que la Corte Suprema rechazaría la apelación de la ex presidenta. La jurisprudencia del máximo tribunal marca que el fallo de Casación que reabrió el caso no es una sentencia definitiva para que la Corte intervenga.
El fiscal Velasco pidió distintas medidas de prueba nuevas. Una de ellas es que se incorpore a la causa un informe que concluyó que hubo 370 comunicaciones entre Báez y Cristina Kirchner y sus allegados. Se trata de prueba que se obtuvo en la causa por llamada “ruta del dinero k”.
La Fiscalía también solicitó que se incorpore el celular del ex secretario de Obras Públicas, José López, que se le secuestró cuando fue detenido en junio de 2016 en el convento de General Rodríguez con los bolsos con nueve millones de dólares. El contenido del celular fue prueba del juicio por la obra pública en Santa Cruz y en lo que el fiscal Diego Luciani llamó el “plan limpiar todo”. Se trata de comunicaciones entre López y Báez y allegados al empresario que daban cuenta que al final del segundo mandato de Cristina Kirchner se buscaba que a las compañías se le pague todo lo que se le adeudaba para después cerrarlas. Los mensajes dan cuenta de reuniones de López con Cristina Kirchner y de Báez con la entonces presidenta.
Velasco también quiere que se reactiven una serie de pedidos a la municipalidad de Río Gallegos en busca de información de propiedades.
La decisión sobre el pedido del fiscal la tendrán Adriana Palliotti, José Michilini y Nicolás Toselli, los jueces que integran el TOF 5 para este caso.
Cada uno tiene un status distinto en la causa. Palliotti es jueza titular del TOF 5 y cuando el tribunal sobreseyó a los acusados ella votó en disidencia al marcar que los planteos que las defensas hacían debían analizarse en el juicio oral. Michilini fue sorteado en reemplazo de Daniel Obligado, también titular del TOF 5, pero que fue apartado del caso “Los Sauces-Hotesur” porque votó por el sobreseimiento y así ya dio opinión del caso. Y Toselli fue sorteado como magistrado subrogante del tribunal oral.