El viaje de Martín Insaurralde y Sofía Clerici a Marbella costó más 55 mil dólares, según documentación oficial que acaba de recibir la Justicia argentina y a la que tuvo acceso Infobae. Eso incluye la estadía en el hotel Marbella Club (26.311,48 mil euros), el alquiler del yate “Bandido” (13.176,17 euros), y los dos pasajeros aéreos desde Buenos Aires (USD8139 + USD7469). A eso se deberían sumar, si efectivamente se comprueba que se compraron en ese viaje, las carteras, los relojes y las joyas que exhibió la modelo en sus redes sociales. En ese caso, la cuenta total podría ascender a unos 150 mil dólares.
Según un informe elaborado por la Comisaría Provincial de Málaga y la Fiscalía Provincial de esa ciudad, donde figuran las facturas de cada gasto, el alquiler del yate “Bandido” costó 13.176,17 euros por una jornada de 8 horas. Ese valor incluye tres botellas de champagne Moët Brut y toda la comida. Lo más llamativo es que fue facturado a nombre de Clerici, que figura inscripta ante la AFIP como monotributista categoría A.
El documento está fechado el 27 de octubre pero llegó a la Justicia argentina esta semana a través de una gestión del Ministerio del Interior de España.
Todavía no hay datos sobre el misterioso dueño del barco, que se puso a la venta en James Edition, un sitio web que se dedica a la compra y venta de bienes de lujo. El que quiera comprarlo deberá pagar USD 4.950.000.
Además del alquiler del yate, la Policía de España detalló que la estadía en el Hotel Marbella Club, que aparece en las fotos publicadas por Clerici en su cuenta de Instagram, costó 26.311,48 euros. Dentro de ese complejo, la pareja eligió la villa “Casabel”, una casa exclusiva, de 550 m2, con capacidad limitada para seis personas.
Otra vez, el consumo aparece facturado a nombre de Clerici, pero el pago se hizo a través de una tarjeta American Express de una agencia de turismo de Miami. Esa misma tarjeta se había utilizado para abonar el pasaje de Insaurralde a España, emitido apenas un día antes de su salida, el 14 de septiembre. Ahora los investigadores posaron la lupa sobre esa misteriosa empresa. Se sospecha que los gastos se habrían abonado en efectivo en Estados Unidos para esconder al verdadero pagador.
La Justicia ya había chequeado que el vuelo de Insaurralde costó USD 8.139,30. En el caso del pasaje de Clerici, la empresa Air Europa reveló que se pagó al contado, en pesos, y se emitió el 17 de agosto, casi tres semanas antes del viaje. Tomando en cuenta el valor del dólar tarjeta de esa fecha, eran unos USD 7.469.
Otro dato nuevo que se sumó a la causa tiene que ver con la estadía de Clerici en Marbella en los días previos a su encuentro con Insaurralde. La modelo viajó a España el 7 de septiembre, una semana antes que el ex jefe de Gabinete de la Provincia. Ahora se supo que esa primera semana se alojó en la habitación 3174 del Nobu Hotel, ubicado en la Milla de Oro de Marbella.
La estadía en ese hotel costó 7677,50 euros (más un extra de 726), según el informe al que tuvo acceso este medio. En ese caso, la factura figura a nombre de Clerici pero el pago se hizo a través de MTC Group SA, una empresa de turismo con sede en Friburgo (Suiza) que hasta ahora no figuraba en el radar de los investigadores.
“Tenemos más de 30.000 hoteles contratados directamente en más de 130 países”, asegura la firma en su página web. La empresa también ofrece traslados, alquiler de vehículos o propiedades, entretenimiento y servicio de conserjería.
La investigación judicial, que tiene como imputados a Insaurralde, su ex mujer Jesica Cirio, y a Clerici, acumula todos los días decenas de fojas con informes sobre inmuebles, autos y otros bienes.
Esta semana, el juez Ernesto Kreplak ordenó que sean peritados todos los dispositivos secuestrados en los allanamientos del 23 de octubre.
En la casa de Clerici, en el lote 236 del barrio Los Lagos, en Nordelta, la Policía secuestró dos Iphone, una Macbook, dos Ipad, un Ipod con cámara, y una notebook marca Samsung. Todos esos dispositivos serán analizados. Los investigadores sospechan que podrían contener conversaciones valiosas para la investigación. De hecho, Insaurralde dejó trascender que está más preocupado por los teléfonos que por el dinero secuestrado en esa vivienda.
Los investigadores se sorprendieron con los modelos de los teléfonos: un Iphone 11 y un Iphone 13 Pro Max. “¿Gasta miles de dólares en carteras y no tiene un Iphone 14 o un 15?”, ironizó una fuente de la investigación. No es un tema menor. Los que se entusiasman con que podría haber otro celular oculto advierten que la modelo no se ocupó de esconder los casi 600 mil dólares que había en su casa, pese a que su propio abogado estaba al tanto del allanamiento.
Un peritaje sobre los teléfonos de Clerici podría demostrar, entre otras cosas, si hubo una “negociación” entre los protagonistas del escándalo antes de la publicación de la fotos en Marbella.
En el allanamiento realizado en el country “Fincas de San Vicente”, donde Insaurralde es dueño de los lotes 242 y 243, la Policía Federal se llevó una computadora, una tablet y un pendrive, que también serán analizados, aunque se sospecha que no tendrían información valiosa.
El juez también mandó exhortos a Estados Unidos, para saber quién es el dueño de un departamento ubicado en Miami, y a Uruguay, donde se habrían canalizado fondos derivados de la separación de Insaurralde y Cirio, según denunció la ex titular de la UIF María Eugenia Talerico. La empresa apuntada, Pro Capital, lo desmintió a través de un comunicado. “Pro Capital/Global Wealth Management cuentan con un informe impecable de la auditoría externa de Cumplimiento y Lavado y nunca, pero nunca en la vida se abriría una cuenta sin “origen de fondos”…. menos una cuenta millonaria y muchísimo menos que involucre a PEPs”, dice el mensaje firmado por el dueño de esa empresa, Diego Pozzi.
En los próximos días habrá definiciones importantes. En primer lugar, el juez debe decidir sobre la recusación que plantearon los abogados de Insaurralde contra el fiscal Sergio Mola. Además, la Cámara Federal de La Plata tiene que resolver un pedido de inhibición general de los bienes de los tres imputados.