La elección nacional pone en juego tres bancas en el Consejo de la Magistratura de la Nación, el organismo encargado de la selección y acusación de los jueces nacionales y federales y de la administración del Poder Judicial. El organismo más político de la Justicia. Son los lugares que hoy tienen los diputados nacionales Álvaro González (del PRO) y Rodolfo Tailhade (de Unión por la Patria) y el representante del Poder Ejecutivo, Gerónimo Ustarroz.
Los mandatos como legisladores nacionales de González y Tailhade vencen el próximo 10 de diciembre y fueron designados en el Consejo por esa representación, por lo que si la pierden deben dejar el organismo. Pero los dos hoy van en listas para renovar sus diputaciones. González ocupa el séptimo lugar en la lista de diputados nacionales por la ciudad de Buenos Aires -con la boleta de Patricia Bullrich presidenta- y Tailhade está en el mismo lugar pero en la provincia de Buenos Aires por Unión por la Patria en la boleta que encabeza Máximo Kichner y que lleva a Sergio Massa como presidente.
Los resultados de las elecciones de las PASO del 13 de agosto y las expectativas con las que llegan marcan que los dos continuarían como diputados y por lo tanto en el Consejo.
Si el oficialismo repite el resultado de las PASO en suelo bonaerense estaría llevando a la cámara 12 o 13 diputados, por lo que Tailhade continuaría. “No vemos problema con que Rodolfo siga”, le dijo a Infobae un hombre del oficialismo.
Lo mismo ocurre con González pero más ajustado. Si se repite el número de las primarias, Juntos por el Cambio llevará siete diputados. González es el séptimo de la lista. “Si tomás como base las últimas cuatro elecciones en la ciudad en todas metimos siete diputados de piso”, le dijo a este medio un referente judicial de Juntos por el Cambio para marcar que de mantenerse ese historial, el PRO mantendría a González en el Consejo.
Las elecciones nacionales de diputados y senadores (estos últimos se eligen en ocho provincias) se definen hoy, por lo que se sabrá la composición del Congreso a partir del 10 de diciembre. La incógnita está en si lo mismo ocurrirá con la presidencia de la Nación o si habrá una segunda vuelta con los dos más votados. De eso depende el tercer lugar en el Consejo que puede definirse hoy o no.
Es el que ocupa Ustarroz, hombre de Cristian Kirchner y hermano de crianza del ministro del Interior y candidato a senador nacional, Eduardo “Wado” de Pedro. Si Bullrich o Javier Milei son electos presidente el representante será otro. La incógnita está en que ocurrirá si gana Massa ya que Ustarroz es un hombre de su espacio.
El resto de los integrantes del Consejo en representación del Congreso Nacional no ponen en juego sus bancas. Las diputadas Roxana Reyes (UCR) y Vanesa Siley (Unión por la Patria) tienen mandato legislativo hasta diciembre de 2025. Lo mismo ocurre con los senadores que integran el Consejo: Mariano Recalde e Inés Pilatti Vergara (ambos del kirchnerismo) son legisladores hasta diciembre de 2025 y Eduardo Vischi (UCR) hasta diciembre de 2027. Y como consejeros tienen mandato por los próximos tres años.
Al Senado le falta un representante en el Consejo. El lugar fue disputado entre el oficialista Martín Doñate y Luis Juez del PRO. La vicepresidenta Cristina Kirchner hizo partir el bloque para quedarse con un lugar más y designó a Doñate. El PRO lo reclamaba para sí y designó a Juez. La Corte Suprema de Justicia de la Nación dijo que la movida del oficialismo había sido un “ardid” y apartó a Doñate. Pero nunca resolvió si Juez debía ocupar ese lugar. Así, de los 20 consejeros que debe haber por ley hoy hay 19.
En el organismo las fuentes consultadas por este medio especularon que con la llegaba del nuevo gobierno nacional destrabará esa situación y se completará el organismo. La pregunta es con el senador de qué bloque y también dependiendo de quien esté al frente de la cámara alta porque su titular debe firmar el pedido a la Corte de la designación de los consejeros.
A partir del 10 de diciembre, el resto de los consejeros -jueces, abogados y representantes de las universidades- seguirán en el organismo ya que fueron elegidos el año pasado y tienen mandato por cuatro años. Lo mismo ocurre con Horacio Rosatti, presidente del Consejo y de la Corte. Por ley, el titular del máximo tribunal conduce el Consejo y Rosatti tiene ese cargo hasta septiembre del año que viene.
El resultado de la elección de hoy será trascendente para el Consejo. Lo que ocurra -principalmente si hay segunda vuelta quiénes pasan y quien se queda afuera- reacomodará muchos tableros políticos, entre ellos el de la justicia. “Todo va a depender del domingo. El domingo empieza una nueva vida”, le contestó un consejero a Infobae sobre el día después de las elecciones en el organismo. Y rápidamente agrega: “Veremos qué tipo de vida”.
En la política nacional se especula que una derrota de Juntos por el Cambio o de Unión por la Patria puede derivar en la ruptura de las alianzas y eso puede impactar en el Consejo porque en el organismo hay representantes del kirchnerismo, del PRO y de la UCR.
La primera prueba cómo la elección puede impactar en el Consejo será el miércoles. Rosatti convocó para ese día al resto de los consejeros para una reunión de la comisión de Labor. Es el ámbito donde a puertas cerradas los consejeros solos planifican los temas a tratar en el próximo plenario, que todavía no tiene fecha. “Los temas en carpeta no presentan grandes problemas ni son políticos pero en la reunión se van a ver los ánimos de la post elección”, analizó un consejero.
Lo que pueda dejar la elección también influirá en los temas pendientes que tiene el Consejo. Uno de ellos son los concursos para cubrir vacantes en los tribunales de Comodoro Py, los que más mira la política. Ya están terminados los concursos para cubrir cargos en primera instancia, en la Cámara Federal y en los Tribunales Orales Federales. Sin embargo, no hay acuerdo político para su aprobación. Nadie cree que el resultado de hoy puede destrabarlos.
El Consejo también tiene que definir si abre o no un concurso para cubrir el cargo en la Cámara Federal de Casacón Penal de Ana María Figueroa. Así lo pidió la oposición en el Consejo. Figueroa cumplió 75 años -la edad máxima que fija la Constitución Nacional- y la Corte Suprema la cesanteó porque no tenía un nuevo acuerdo del Senado para continuar. Lo consiguió semanas después. Así la situación quedó trabada, sin definiciones de cómo continuará- Por ahora Figueroa no se presentó. Las elecciones podrían influir en una resolución.