El policía preso por el espionaje a jueces denunció que su vida corre peligro por las condiciones de detención

La defensa de Ariel Zanchetta presentó un habeas corpus correctivo y reclamó un urgente tratamiento médico

Guardar

Nuevo

El edificio de Comodoro Py (Maximiliano Luna)
El edificio de Comodoro Py (Maximiliano Luna)

Ariel Zanchetta, el ex policía detenido y acusado por el espionaje a jueces de la Corte Suprema y de Comodoro Py, denunció que las condiciones en las que cumple detención en la cárcel de Marcos Paz “han sido sustancial e ilegítimamente agravadas”, reportó que su cuadro de diabetes no recibe la debida atención y reclamó un “habeas corpus correctivo” para obtener el tratamiento adecuado, indicaron a Infobae fuentes judiciales. Expresamente pidió “en carácter de urgente las medidas tendientes a trasladar al centro hospitalario pùblico que cuente con los recursos necesarios para su tratamiento médico”.

La semana pasada, La Cámara Federal porteña ratificó este jueves el procesamiento con prisión preventiva de Ezequiel Núñes Pinheiro, el llamado “hacker” misionero; y del ex policía Ariel Zanchetta, en el marco de la investigación que los sindica como parte de las maniobras que se llevaron adelante para espiar a jueces de la Corte Suprema y de Comodoro Py 2002 —que tuvieron como epicentro la provincia de Misiones y que incluyeron la creación de líneas telefónicas truchas a nombre de los ministros—. El fallo no sólo reforzó la gravedad institucional de las maniobras: también apuntó a profundizar qué motivaciones tuvieron los autores intelectuales. El misterio rodea a Zanchetta, un ex policía que dijo que los datos los buscó porque trabajaba de periodista. La Justicia no le cree, pero hasta ahora no encontró lazos directos que lo unan con Nuñes Pinheiro.

La causa tiene dos ramas: una, la intrusión a los celulares de un grupo de jueces; la otra, la creación de líneas de teléfono que fueron denunciadas por el presidente de la Corte Horacio Rosatti y que develó que el suyo no fue el único afectado. A fines de junio, Martínez de Giorgi ordenó cuatro detenciones. Para esa altura, Nuñes Pinheiro ya había desfilado en indagatoria y en testimonial en otras causas admitiendo que había sido contratado por un usuario de Telegram al que desconoce para acceder, con los datos de las tarjeta sim, a los celulares de jueces y funcionarios porteños. Él sostiene que no fue el que entró a esos teléfonos. Y que no conoce a quién está detrás de esto.

Te puede interesar: Espionaje a jueces: el hacker misionero junto al ex policía seguirán presos y la causa busca a los autores intelectuales

Elias Ezequiel Nuñes Pinheiro
Elias Ezequiel Nuñes Pinheiro

Al ex policía Ariel Pedro Zanchetta las pruebas lo vinculan con haber pedido informes en la base SudamericanaData de los jueces Gustavo Hornos y Mariano Borinsky el 8 de septiembre de 2022, el mismo día en que Borinsky perdió el control de su línea. Y que también entraron al teléfono del juez Rodrigo Giménez Uriburu, uno de los magistrados que llevó adelante el juicio oral contra Cristina Kirchner. Pero también hizo más de dos mil búsquedas en 2022 en esa base de datos de personas públicas sin justificación. Entre esa lista estaban los miembros de la Corte Suprema de Justicia de la Nación Horacio Rosatti y Ricardo Lorenzetti, Juan Carlos Maqueda, los miembros de la Cámara Federal Leopoldo Bruglia, Pablo Bertuzzi, el entonces juez de Córdoba Ricardo Bustos Fierro, el juez de La Plata Ernesto Kreplak y del director de la vocalía de Rosatti, Silvio Robles.

Este martes, el abogado Marcelo Peña, defensor de Zanchetta, presentó una acción de “Hábeas Corpus en su modalidad correctiva” para su cliente, en el marco de un incidente de salud que tramita dentro de la causa principal, a cargo del juez federal Marcelo Martínez De Giorgi. El defensor explicó que “el Habeas Corpus Correctivo no busca la libertad del procesado sino corregir la agravación ilegítima de las condiciones de encierro de los reclusos”.

Te puede interesar: Qué declaró el ex policía acusado por el espionaje a jueces de Comodoro Py y la Corte Suprema

“Desde que mi asistido técnico Ariel Zanchetta ingresó con la respectiva medida de coerción personal en la Unidad Penitenciaria Federal de Marcos Paz, no ha tenido una debida y pormenorizada atención médica en referencia a la Diabetes grado II -afirmó-. De ésta manera me informa su esposa que el día de ayer padeció de taquicardia, brotes e infección por no suministrarle desde las autoridades la debida medicación, por lo que su integridad física y su vida sin el debido resguardo previo en un correspondiente seguimiento médico podría ser fatal en su vida”, dice la presentación a la que accedió Infobae.

“Para evitar ese trágico desenlace peticiono tenga a bien que el Sr Zanchetta pueda ser debidamente atendido en el nosocomio público policial Churruca , o en su defecto un hospital público que sea atendido por un clínico médico a lo que deba ser informado Vuestra Señoría de la real situación física y médica de mi asistido , como además se ordene al Sr .Titular del Servicio Penitenciario Federal cumplimente las necesidades básicas que resguarda allí su historia clínica”, detalló.

La defensa subrayó que “la acción de Hábeas Corpus Correctivo está prevista en el art. 43 último párrafo de la Constitución Nacional que en su parte pertinente establece: “Caso de agravamiento ilegítimo en la forma o condiciones de detención”, y subrayó una flagrante violación al art. 18 de la Constitución Nacional que sostiene que “las cárceles de la Nación serán sanas y limpias, para seguridad y no para castigo de los reos detenidos en ellas”.

Seguir leyendo:

Guardar

Nuevo

Últimas Noticias