La política nacional siempre derrama sus efectos. Se calcula, se planifica, se piensa en función del pulso que marca un gobierno. El triunfo de Javier Milei hace una semana en las PASO genera la pregunta de cómo será ese pulso, por ahora incierto. Y en ese escenario los jueces preparan sus campañas para competir en las elecciones por la presidencia de la Asociación de Magistrados y Funcionarios de la Justicia de Nacional (AMFJN), la entidad gremial y política que los nuclea.
Serán el 19 de octubre, tres días antes de las elecciones generales por la Presidencia de la Nación en las que competirán Milei, Patricia Bullrich y Sergio Massa, como principales candidatos, y el día que cierran sus campañas. El microclima político del mundo judicial no podrá estar ajeno a ese contexto. “Pero no sabemos cómo puede impactar”, coincidieron referentes de las tres listas judiciales que se presentarán. “Todos quedamos desacomodados con el triunfo de Milei”, reconoce uno de ellos.
Las tres listas que competirán son la Bordó -que conduce la AMFJN hace 20 años-, la Celeste -principal oposición- y Compromiso Judicial -la más nueva que nació para desmarcarse de las otras dos-. Y todas tienen algún alineamiento con la política nacional.
La Bordó es más cercana a Juntos por el Cambio y muy crítica del oficialismo nacional. La Celeste se referencia más en el peronismo/kirchnerismo y Compromiso se presenta, en la voz de uno de sus integrantes, como “anti k no PRO”. Pero todos marcan que cada espacio tiene componentes ideológicos y políticos variados.
Lo que está claro, y así lo reconocen, es que no hay una lista que represente a La Libertad Avanza. Por lo tanto, el efecto del avance de Milei en la política nacional genera un signo de interrogación. “Una elección nacional siempre de alguna manera influye y al judicial le gusta jugar a ganador. Tal vez todos nos vamos a correr un poco más a la derecha”, dice un armador judicial con despacho en el Palacio de Justicia.
La mirada de la política judicial en un gobierno está puesta en la cercanía que se pueda tener para influir en la designación de jueces. La rosca busca tener una mejor llegada para poder entrar en la discusión de los nombramientos. Y parte de la campaña de las listas judiciales se basa en prometer esa cercanía a quienes se postulan para ser jueces. “No hay forma de poder garantizar o comprometer alguna línea con un gobierno de Milei”, analiza un camarista federal.
Infobae consultó a referentes de las tres listas y a otros jueces y fiscales si desde La Libertad Avanza se presentaron de manera formal o informal para explicar sus proyectos, generar reuniones o al menos decir quién es el referente de Milei en materia judicial. “Nadie”, fue la respuesta unánime. “Si hoy tuviese que llamar a alguien de ese espacio no sabría a quién”, grafica otro juez. Eso también genera incertidumbre en la Justicia. Con los otros partidos nacionales tienen vínculo y conocen lo bueno y lo malo. En tribunales las apuestas y lo que mayor certidumbre daba para ellos era Massa u Horacio Rodríguez Larreta, quien perdió la interna con Bullrich.
“En nuestra elección van a ganar los nombres propios del Poder Judicial, lo que ocurrió estos años en la asociación”, especula otro magistrado.
La elección nacional comenzó a influir en la AMFJN antes de las PASO. Los jueces hacen sus elecciones a presidente en años pares para que no coincidan con los comicios nacionales. Pero la pandemia modificó el cronograma. En 2020 se debía votar pero la Inspección General de Justicia prorrogó por un año todos los mandatos en asociaciones civiles. Así que el calendario se corrió un año para adelante.
Las elecciones de la AMFJN son en noviembre. Pero en este año las listas Celestes y Compromiso plantearon adelantarlas para que el resultado de las presidenciales nacionales no pudiera influir. Y también para evitar que un eventual triunfo de Juntos por el Cambio pudiera tener un efecto arrastre de la Bordó. “Y de Massa a favor de la Celeste”, agregan en Compromiso. Si los comicios eran en noviembre se iban a realizar la semana siguiente de un eventual balotaje.
La propuesta se trató el 7 de agosto -una semana antes de las PASO- en el Consejo Directivo de la asociación y ganó el adelantamiento de los comicios con los votos de los representantes de la Celeste y Compromiso Judicial. Se fijó que serán el jueves 19 de octubre. La Bordó se opuso porque consideró que se podía complicar la organización en muchos lugares del interior porque se vota de manera anticipada por correo.
Con esa diferencia resuelta, las listas comenzaron su armado electoral. Se espera que esta semana quedan definidas las candidaturas a presidente. Todas manejan con cautela los nombres de los postulantes que prefieren no darlos. Aunque hay muchos que suenan. La Celeste parece tener definido el postulante. La Bordó y Compromiso todavía no.
El actual presidente de la AMFJN es el juez civil Marcelo Gallo Tagle, de la Bordó. En esa lista se debate si se volverá a presentar. Allegados a ese espacio señalaron que después de cinco años Gallo Tagle prefiere dar un paso al costado pero un sector de la lista le pide que se postule. Si no lo hace, ya hay otros nombres en carpeta. Entre ellos, un juez de Comodoro Py.
Sobre la posible postulación de Gallo Tagle hay un debate legal. El estatuto de la AMFJ permite una sola reelección. Gallo Tagle asumió la presidente en 2019 ante la renuncia de Hernán Moncla que estuvo un día en el cargo. Luego Gallo Tagle ganó la última elección. La discusión es si el primer período se cuenta o no porque en la boleta no fue como candidato a presidente. Muchos auguran posibles impugnaciones si se presenta.
Para estas elecciones hubo un intento de alianza entre la Celeste y Compromiso Judicial para ir juntos e intentar desbancar a la Bordó. Dependiendo quién lo cuente, se trató de un ofrecimiento concreto de la Celeste o de charlas informales. Lo cierto es que desde los dos espacios confirmaron la intención. Compromiso rechazó la propuesta porque entendieron que de aceptarla implicaría perder la identidad del espacio que nació para diferenciarse de las otras listas y como un desprendimiento de la Celeste. Y además porque no iba a poder imponer al candidato a presidente.
Cada una de las tres listas tiene un objetivo para esta elección. La de la Bordó es mantenerse en la presidencia de la entidad con la renovación de caras que se inició en los últimos años como una manera de oxigenar al espacio.
La opuesta de la Celeste es logar la conducción de la AMFJN. El optimismo de que ese objetivo se puede lograr son los resultados de las últimas elecciones. En 2021, la Bordó le ganó por 39 votos y en 2018 entre la Celeste y Compromiso le quitaron al oficialismo la mayoría en el Consejo Directivo.
Por su parte, Compromiso se sabe como la tercera fuerza y buscará mantener el caudal de votos de las últimas elecciones que le permitió, por ejemplo, tener representantes en el Consejo de la Magistratura.
El padrón para este año es cerca de 2.700 personas. Votan jueces, fiscales, defensores oficiales y secretarios nacionales y federales de todo el país. El mes que viene cada lista activará su campaña con un ojo en la política nacional y los dos sobre Milei.
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