La Justicia Federal resolverá en los próximos días la situación procesal de cinco hombres, entre ellos, dos empleados de maestranza del Consejo de la Magistratura de la Nación, que están detenidos acusados de integrar una organización que cometió al menos dos secuestros extorsivos en mayo en el partido bonaerense de La Matanza. Una de las víctimas fue un adolescente de 15 años, indicaron a Infobae fuentes del caso.
Los acusados son Lucas Gastón Coppola, Ezequiel Gustavo y Juan Maximiliano Stelter, y los hermanos Matías Nahuel y Juan Jesus Más. Se sospecha que hay más implicados de la banda que, “con infraestructura y organización suficiente”, se dedicaban a los secuestros extorsivos, robo, acopio de armas y municiones, comercialización de estupefacientes y utilización de chapas patentes falsas. La zona en la que actuaban era el territorio del partido de La Matanza.
“A raíz de las tareas investigativas y escuchas telefónicas practicadas, se supo que las personas que participan observan con detenimiento los movimientos de sus víctimas con varios días de antelación, conocen sus casas, sus actividades, con quienes viven, sus vehículos y también realizan un relevamiento de la zona ante la posible existencia de cámaras de seguridad. También organizan su fuga y cómo desechar los elementos que puedan incriminarlos”, sostuvo la acusación del fiscal de Morón Sebastián Basso ante el juez federal Jorge Rodríguez.
Los hermanos Mas, que eran empleados del Consejo de la Magistratura, fueron detenidos el 11 de julio y están acusado de “aportan tanto vehículos, datos, como así también ‘mano de obra’”, en los hechos que se investigan.
En una resolución firmada el 14 de julio, la vicepresidenta del cuerpo, Agustina Díaz Cordero, dispuso el inicio de una investigación sumaria sobre los dos empleados de la Magistratura. “Toda vez que de la información recabada resulta que entre las personas detenidas involucradas en los hechos objeto de investigación se encuentran dos agentes de este Cuerpo, y dado que se desconoce el alcance de las imputaciones o si éstas guardan relación con las funciones que desempeñan, razones de elemental prudencia, que se sostienen en la urgencia y excepcionalidad del caso, demandan la inmediata apertura de una investigación sumaria”, dice el escrito
Es que, según la investigación judicial, una de las camionetas que se usó para llevar adelante un secuestro extorsivo es una Amarok blanca del Consejo de la Magistratura. El día del secuestro del 12 de mayo, Matías Nahuel Más figura como “ausente” en su trabajo y Juan Más era la persona autorizada a conducir dicho rodado (todo ello conforme lo informara el Consejo de la Magistratura)”, consta en el expediente.
En sus respectivas indagatorias a la que accedió Infobae, Matías Nahuel Mas afirmó que estuvo trabajando el día del hecho y aportó la SUBE que indicaba viaje hasta Balvanera, pero las pruebas del organismo no lo corroboran. En su versión conocía a otro de los otros acusados de “jugar a la pelota” o “salir a comer” y buscó despegarse de la acusación, pero para la fiscalía las pruebas los sindican a él y a su hermano como integrantes de la banda. No se les pudo atribuir sin embargo una acusación de todos los hechos.
La investigación sostiene que la banda secuestró a un hombre y a un adolescente, en dos hechos ocurridos en mayo. Se cree que se trata de una disputa entre bandas de ladrones, ya que una de las víctimas fue un hombre que estaba acusado de un robo cometido en el barrio porteño de Villa Devoto, y la otra (el adolescente) es el hijo de otro delincuente que ya estaba preso por ese mismo asalto. La primera víctima fue Sergio Daniel Pérez quien fue liberado luego que se pagaran 40 mil dólares y 1.100.000 pesos por su rescate. El menor fue secuestrado el 22 de mayo en Ciudad Evita hasta que se pagó un secuestro en dos partes por casi más de 700 mil pesos y 34 mil dólares. En los diálogos, los secuestradores exigían a los familiares el dinero que un familiar había robado meses antes.
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Infobae dio cuenta en mayo pasado de los operativos que hizo personal de la DDI de La Matanza para detener a los sospechosos y el secuestro de cinco armas de fuego y una ametralladora, centenares de municiones de distintos calibres, al menos 20 teléfonos celulares, droga lista para la venta y hasta automóviles que estaban denunciados como robados. También los detalles de los secuestros que generaron las detenciones.
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