Uberti declaró en el juicio por Antonini Wilson: “Renuncié y pasé a ser el leproso, me quedé sin trabajo y sin amigos”

El ex titular del Órgano de Control de Concesiones Viales (OCCOVI) aseguró que lo conoció al empresario en un almuerzo previo al viaje a Buenos Aires. Y confirmó que lo vio en un acto en la Casa Rosada

Guardar

Apenas unas horas después del hallazgo de una valija repleta de dólares en Aeroparque, Claudio Uberti se dirigió a la quinta de Olivos y habló en persona con el entonces presidente Néstor Kirchner. Era sábado, muy temprano. Uberti esperó unos minutos hasta que llegó el presidente. “Te caiste de la cama, ¿qué haces a esta hora?”, lo recibió. Uberti hizo un relato del incidente que había protagonizado el empresario Guido Antonini Wilson y comenzó a recibir una batería de preguntas de Kirchner. “Me preguntó si lo conocía, por qué se había subido al avión, quién era, a qué se dedicaba. No me dio ninguna instrucción precisa”, relató Uberti esta mañana durante su declaración en el juicio oral.

Todo ocurrió el 4 de agosto de 2007, cuando Antonini Wilson intentó ingresar una valija con USD 790.550. En el avión viajaban ocho pasajeros. Uberti es el único que ahora está siendo juzgado.

En su relato, el ex funcionario aseguró que vio tres veces al venezolano. La primera fue en un almuerzo, en Caracas, durante ese mismo viaje. “En un almuerzo en el restorán Urrutia (Diego Uzcátegui) me presentó a varias personas, entre ellas Antonini Wilson y su hijo Daniel (Uzcátegui). Me comentó que ellos dos iban a viajar en el avión y que iban otras tres personas más”, contó Uberti.

Para ese momento, Diego Uzcategui ya le había pedido a Uberti si en el avión contratado por ENARSA podían viajar algunos pasajeros venezolanos como parte de la amplia comitiva que iba a acompañar al entonces presidente de Venezuela Hugo Chávez a Buenos Aires. Uberti averiguó con su secretaria y respondió que tenían lugar para un máximo de cinco personas. En el viaje de ida, el avión había transportado a tres pasajeros: Uberti, su secretaria Victoria Bereziuk, y el ex titular de ENARSA Ezequiel Espinosa.

Te puede interesar: Julio de Vido se desligó de Antonini Wilson y del vuelo que lo trajo a la Argentina

El avión aterrizó en Aeroparque a las 2:38 de la madrugada. Según consta en el expediente, los recibieron el aduanero Jorge Félix Lamastra y la entonces agente de la PSA, María de Luján Telpuk. Ante la primera pregunta, Antonini Wilson respondió que llevaba libros. Telpuk insistió y el venezolano aseguró que transportaba “papeles o papelitos”. En ese momento, la agente de la PSA decidió abrir la valija y descubrió el dinero. “¿Cuánto dinero lleva?”, fue la pregunta obligada. “Unos USD 60.000″, habría respondido el venezolano.

Antonini Wilson
Antonini Wilson

Uberti fue testigo directo de esa situación. “Empezaron a pasar el equipaje por la cinta hasta que se detuvo. Ahí escuche que Telpuk preguntaba por una valija, pedia identificar esa valija. En ese momento se acercó Antonini Wilson y reconoció que era suya. Telpuk le pidió que la acerque al mostrador de trabajo, le hizo algunas preguntas, yo estaba escuchando. La abrió sin resistencia. Yo pude ver la valija repleta de dólares y me imaginé el escándalo que se iba a armar”, contó esta mañana.

El ex titular del OCCOVI se retiró del aeropuerto unos minutos después junto a su secretaria y su chofer. “Le pedí a uno de los choferes que se quede y me informe cómo terminaba todo. Era mi obligación informar que había ocurrido. Lo llamé varias veces durante la madrugada. En el último llamado me dijo que los había llevado al hotel Sofitel”, relató Uberti.

Te puede interesar: Telpuk declaró por la valija de Antonini Wilson: “Me cambió la vida, la pasé muy mal, estuve casi dos años con amenazas”

Apenas unas horas después, Uberti decidió darle un reporte en persona al entonces presidente Néstor Kirchner. “Esperé un rato porque era temprano, tomé coraje y fui a la quinta de Olivos a informarle al presidente de la Nación lo que había ocurrido”, dijo. Luego de esa reunión, también se comunicó con Echegaray. “Ya sé por qué me llamas”, le habría contestado el entonces titular de la AFIP. Según Uberti, Echegaray le aseguró que “era una infracción aduanera” y que “era un problema” de Antonini Wilson.

Aunque era su superior directo, Uberti recién habló con De Vido el lunes posterior al escándalo.

Luego del episodio, Uberti volvió a ver a Antonini Wilson en el Salón Blanco de la Casa Rosada, durante el acto oficial con Chávez. Se sorprendió con su presencia.

Antes y después del acto, el gobierno de Néstor Kirchner intentó a través de varios emisarios que el venezolano fuera a retirar el dinero y pagara la multa. Pero no lo convencieron y se fue a Miami. Desde entonces, la justicia argentina reclamó, sin éxito, su extradición ante las autoridades de Estados Unidos.

Cuando el escándalo se filtró en los medios, Uberti decidió renunciar. “A mí no me echaron, yo renuncié. Pensé que iba a colaborar para aminorar el escándalo. Yo renuncié y no hablé con ningún funcionario. Pasé a ser el leproso. Mi teléfono dejó de sonar, nunca jamás hablé con nadie, no hice ningún tipo de gestión ... Me quedé sin trabajo, sin amigos, sin contactos”, lamentó.

Durante su relato, Uberti se encargó de aclarar cómo era el sistema de ingresos a su despacho a raíz de una anotación en una agenda oficial que daría cuenta de una supuesta reunión, el 30 de mayo de 2007, con una persona identificada con “Guillermo Antonini”. “Nunca jamás autoricé a nadie a obviar el control, me llamó la atención que se dijeron algunas cosas que se alejaron de la realidad, debo pensar que los años pueden llevar a confusiones”, dijo Uberti en alusión al relato de algunas de sus ex secretarias.

Además de Uberti, en el juicio están siendo juzgados el ex ministro de Planificación Julio De Vido, el ex titular de la AFIP Ricardo Echegaray, y cuatro ex funcionarios aduaneros: Rosa Nélida García, Guillermo David Lucangeli, María Cristina Gallini y Jorge Félix Lamastra.

La investigación duró trece años y estuvo a punto de prescribir. Ocurre que Uberti tuvo falta de mérito durante diez años. Cuando el caso iba a quedar en la nada, el juez Pablo Yadarola procesó a De Vido y Echegaray, que por su condición de ex funcionarios pudieron extender los plazos de prescripción. En ese momento también fueron procesados Victoria Bereziuk (luego sobreseída por la Cámara), Ezequiel Espinosa, y los funcionarios aduaneros.

Seguir leyendo:

Guardar