Elías Ezequiel Nuñes Pinheiro, el joven hacker misionero que confesó haber espiado al ex ministro de Seguridad de la Ciudad de Buenos Aires Marcelo D’Alessandro, y a varios jueces, reclamó hoy ante la Justicia que todavía no tiene la custodia que la jueza María Araceli Martínez había ordenado hace diez días y pidió convertirse en arrepentido.
“Ha quedado demostrado a lo largo del proceso evidenciado a través de su amplia colaboración a través de ambas declaraciones indagatorias, entendemos que corresponde dar tratamiento en forma especial teniendo en cuenta sus condiciones personales a fin de que pueda ser tratado como arrepentido, teniendo en cuenta el artículo 43 ter del Código Penal, y la Ley del Arrepentido (Ley 27.304)”, reclamaron los abogados del hacker, Sebastián Noguera y Marcos Kapko, a través de un escrito al que tuvo acceso Infobae.
Según esa presentación, el joven hacker “está dispuesto a seguir colaborando y a realizar cualquier tarea tendiente a esclarecer los hechos y llegar a los autores intelectuales que lo han utilizado”.
Hace días días, Nuñes Pinheiro declaró durante tres horas en el marco de una ampliación de su indagatoria. Contó que prendió fuego su teléfono y lo arrojó al río Paraná luego de que la jueza federal María Servini lo citara a declarar como testigo en otra causa. Dijo que lo hizo porque “se asustó”, aunque ya había comprobado que se habían borrado las conversaciones con la persona que lo había contratado.
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El joven aseguró además que la persona que lo contactó para hacker varias líneas siempre le pagaba por anticipado. Y reconoció un pago de $46 mil por “tres objetivos”. Ese pago figura en un listado de transferencias que aportó la empresa Lemon. Se concretó el 17 de octubre, el mismo día que el sitio El Destape reveló el viaje a Lago Escondido de un grupo de personas entre las cuales estaba D’Alessandro. Dos días después, se concretó el hackeo en su teléfono.
Luego de esa declaración, la fiscal Daniela Dupuy pidió que se tomen medidas para proteger al hacker, tal como habían pedido sus abogados. Horas después, la jueza Araceli Martínez mandó un exhorto al juez de instrucción de ElDorado para que el joven reciba una custodia “mientras dure el proceso” porque “ha brindado información relevante para la continuación de la pesquisa”.
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Hasta ahora, llamativamente, esa medida no se instrumentó. “Solicitamos se insista con las autoridades provinciales de Misiones que las medidas ordenadas se pongan en práctica”, reclamaron los abogados.
D’Alessandro no fue la única víctima del hacker. La Justicia determinó que desde el mismo IMEI, y desde la localidad de Eldorado, ingresaron a las líneas de los jueces Rodrigo Giménez Uriburu y Andrés Basso (ambos integrantes del Tribunal Oral que condenó a la vicepresidenta Cristina Kirchner en el caso Vialidad), y del juez de la Cámara de Casación Gustavo Hornos, entre otros. Varios de ellos se presentaron en el juzgado de Marcelo Martínez De Giorgi, donde también hay causas impulsadas por el presidente de la Corte Horacio Rosatti y el camarista Mariano Borinsky.
La investigación que tramita en la justicia de la Ciudad está avanzando bajo secreto de sumario para que no haya filtraciones. Mientras tanto, el abogado de D’Alessandro pidió que se investigue si hubo una consulta desde la Municipalidad de General Roca al sitio Nosis para obtener los datos personales del ex ministro, tal como informó esa misma empresa.
En esa causa, además de Nuñes Pinheiro hay otros cuatro imputados: el padre de hacker, Elías Nuñes Pinheiro, Julio César Escobar, Cecilia Mercado y Antonio Aquino. Todos viven en la localidad Eldorado (Misiones). Los abogados del joven aseguran que estuvieron al margen de toda la maniobra.
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