Apenas 24 horas antes del operativo de vacunación VIP, montado en las oficinas del Ministerio de Salud, que terminó con la gestión de Ginés González García, el diputado Santiago Igon recibió la primera dosis de la Sputnik V.
El legislador camporista tenía apenas 43 años y quedó registrado, según reveló Infobae en ese momento, como “personal de salud”, al igual que el procurador del Tesoro, Carlos Zannini. El año pasado, el juez federal Guido Otranto lo procesó por el delito de dádivas (coimas) y ahora la Cámara de Comodoro Rivadavia confirmó esa decisión.
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Igon se vacunó por primera vez el 17 de febrero de 2021, cuando estaba vigente el Plan Estratégico de Vacunación Nacional, que determinaba el orden de prioridades. Apenas trascendió que se había inmunizado de manera irregular, el diputado fue denunciado por Fernando Urbano, un médico que supo militar en política y ahora preside la Fundación FUSSO.
La vacunación de Igon fue autorizada por el Jefe de Programas Sanitarios del Área Programática Esquel, Emiliano Biondo, quien se defendió argumentando que el concepto de “personal estratégico”, previsto en la normativa vigente en ese momento, era demasiado amplio.
Para la Justicia, en cambio, el diputado no ingresaba en esa categoría. “La referencia a funcionarios del Estado, debía circunscribirse a aquéllos que cumplían actividades de gestión, esenciales para asegurar los servicios imprescindibles”, sostuvo la Cámara de Comodoro Rivadavia al confirmar el procesamiento.
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De hecho, una semana antes de vacunarse, Igon participó de una sesión en la Cámara de Diputados de manera remota. “No desconocemos que la actividad de un Diputado no se limita a las sesiones pero, si tal acto, el de mayor trascendencia en esa función, ofrecía la alternativa remota, el resto de las tareas era posible instrumentarla de igual modo, máxime si el congresal presentaba patologías de riesgo para COVID”, agregaron los jueces Javier Leal de Ibarra y Aldo Suarez.
La Justicia también tuvo en cuenta que Igon quedó registrado en el Registro Federal de Vacunación como “personal de salud”. “Esta referencia se amalgama con el cuadro probatorio ya que, justamente, para ese momento, sólo podían acceder a la vacuna quienes presentaban esa condición”, dice el fallo de la Cámara al que tuvo acceso Infobae.
Igon es oriundo de la ciudad de Mercedes, al igual que el ministro del Interior Eduardo “Wado” De Pedro, y se fue a vivir al sur hace poco más de una década. En 2015 encabezó la lista de diputados en su provincia y en 2019 volvió a repetir ese lugar.
En primera instancia, el juez federal Guido Otranto procesó al diputado autor del delito de admisión de dádivas, que tiene una pena de un mes a dos años de prisión. En tanto, Carlos Emiliano Biondo, el médico que autorizó la vacunación, fue procesado como autor del delito de presentación de dádivas.
“En su caso, el reproche se funda en que tuvo el dominio del hecho y se valió para su ejecución de la conducta de Pellejeros (una enfermera) quien, como se explicó, vacunó a Igón desconociendo el motivo por el que fue priorizado. A diferencia de ella, Biondo dispuso la inmunización con pleno conocimiento de que no correspondía, en consideración al cargo de Diputado Nacional que el funcionario ejercía, para lo cual se sirvió de la intervención instrumentalizada de otro, que actuó sin dolo”, destacó el juez.
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Una de las pruebas determinantes en la causa fue un peritaje sobre los chats entre los implicados. De esas conversaciones surge que Igon le pidió la vacuna a Biondo el 12 de febrero: “Necesito viajar a Bs. As. en los próximos días y me quiero vacunar por mi diabetes. Empiezo una etapa de estar muy expuesto”. La respuesta del médico reveló que las dosis eran escasas: “Ya pregunto si quedo alguna dosis disponible de las 60 que destinamos a Esquel la semana pasada”. Una hora después, Biondi le volvió a escribir: “Te pusimos en lista de espera por si alguien no concurre de los que faltan vacunar. Porque están todas asignadas con nombre y apellido”. La vacunación finalmente se concretó el 17 de febrero.
El juez, al dictar el procesamiento, destacó: “Como surge de estos mensajes, el proceder de Igon distó, por mucho, de sólo anotarse en el sitio web y esperar a que lo llamen: solicitó varias veces su vacunación e incluso, paralelamente, se ofreció para interceder en gestiones ante el intendente de esta ciudad”.
Igon no fue el único diputado nacional que se vacunó de manera irregular. En el caso del diputado Juan Benedicto Vázquez recibió la vacuna rusa el 6 de febrero de 2021, cuando todavía no se había inmunizado al personal de salud de Santa Cruz. Fue inscripto en el sistema como parte del grupo de “18 a 59 años con factores de riesgo”.
En tanto, la causa por el “vacunatorio vip” que tuvo lugar en el Ministerio de Salud sigue abierta, pero sin consecuencias para los involucrados. En julio de 2021, la jueza María Eugenia Capuchetti decidió archivar parcialmente el caso al afirmar que en el Código Penal “no existe un tipo penal que criminalice la conducta de un funcionario público que otorgue tratos especiales como el que es objeto en esta investigación”. La investigación fue reabierta por la Cámara Federal. En ese fallo, el tribunal dispuso que la jueza debía apuntar a la responsabilidad de los funcionarios e investigar penalmente a todos los que recibieron esas vacunas. Desde ese momento, la jueza delegó la investigación en el fiscal Eduardo Taiano.
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