Inteligencia artificial: qué impacto tiene la tecnología en la percepción de la belleza

Dove presentó una disruptiva propuesta en pos de combatir los estándares irreales impuestos por la IA y las redes sociales

Melina Masnatta, Cande Yatche y Diana Zurco dieron su visión sobre el impacto de la inteligencia artificial en la percepción de la belleza

Hace 20 años, Dove revolucionó el concepto de beauty al lanzar su icónica campaña “Belleza Real”. Esta iniciativa logró desafiar los estereotipos impuestos por la sociedad y la industria, al promover una imagen más inclusiva y genuina.

Ahora, al celebrar el vigésimo aniversario de esta campaña, la marca de cuidado personal organizó un panel para conversar sobre el impacto de las redes sociales, la vida digital y la inteligencia artificial en cómo se percibe este tema.

“Hemos realizado el estudio global más grande en la historia de una marca de belleza, al encuestar a más de 33.000 personas en 20 países, entre ellos Argentina. Los resultados son alarmantes: 9 de cada 10 mujeres y niñas han estado expuestas a contenido de belleza perjudicial en internet, y 2 de cada 5 sienten la presión de someterse a procedimientos estéticos influenciadas por las redes sociales y personas influyentes”, explicó Pía Fittipaldi Brand Manager de Dove.

La conductora de radio y televisión, Diana Zurco fue la host del evento (Natalia Fernández)

El encuentro que organizó Dove abarcó la temática de la inteligencia artificial (IA) como una de las mayores amenazas para la representación de la belleza real. En este contexto, la marca explicó que las imágenes generadas por IA estarían marcando estándares de belleza poco realistas y no representativos.

“A pesar de saber que estas imágenes son falsas, 1 de cada 3 mujeres y niñas sienten presión para alterar su apariencia. Este fenómeno afecta la autoestima y distorsiona la imagen real de las mujeres”, agregó Fittipaldi.

En la Argentina, el panorama no es diferente. “Casi 2 de cada 5 mujeres y niñas consideran que la creación de versiones idealizadas de sí mismas mediante IA puede impactar negativamente en su autoimagen. La presión para cumplir con estándares de belleza inalcanzables sigue siendo alta, con 6 de cada 10 mujeres sintiendo esta carga diariamente”, detalló sobre el estudio la brand Manager de la marca.

Cande Yatche de la Fundación Bellamente es una de las embajadoras de la marca en el trabajo sobre "belleza real" (Natalia Fernández)

Frente a esta realidad, la compañía de productos de cuidado personal lanzó “El código Dove”, una campaña que propone usar la inteligencia artificial para devolver una imagen de belleza real, en lugar de una ficticia. Este código compara los resultados generados por IA con imágenes reales, buscando promover una representación auténtica.

“En Dove, buscamos un futuro en el que las mujeres decidan y declaren cómo se ve la verdadera belleza, no los algoritmos. No nos detendremos hasta que la belleza sea una fuente de felicidad, no de ansiedad, para cada mujer y niña”, expresó Fittipaldi.

El impacto de la IA en la percepción de la belleza es un tema de creciente preocupación. “Es súper importante que hoy estemos alerta del impacto negativo que tiene la salud mental. Todas las imágenes que están creando de cuerpos que no son reales, pero que encima siguen acentuando que la belleza es de una manera. Hay que abrir el abanico. Creo que es el paso para poder garantizar que todas las personas se sientan representadas”, explicó Cande Yatche de la Fundación Bellamente, como parte del panel.

Melina Masnatta -especialista en educación y tecnología- abordó la importancia de entender la diferencia de lo digital y lo virtual (Natalia Fernández)

La conductora de radio y televisión y host del evento, Diana Zurco, también expresó su opinión sobre el futuro de la IA en las redes sociales. “Creo que el compromiso nos lleva a pensar en dónde queda la humanidad. Me parece que tenemos que dimensionar que detrás de la inteligencia artificial también hay gente que la maneja”.

Melina Masnatta -especialista en educación y tecnología- se encargó de explicar algunos de los peligros que pueden afectar la salud mental. “El cerebro no identifica que es digital y que es virtual, por lo tanto, lo que vemos, lo autopercibimos y la autopercepción tiene un impacto muy fuerte en entender quiénes somos en el mundo. Si no hay representatividad o hay una representatividad manipulada como es con la inteligencia artificial, la percepción de la belleza se distorsiona peligrosamente”.

Asimismo, y como parte de esta iniciativa, Dove se comprometió a no utilizar IA ni distorsión digital en sus anuncios en pos de dar un paso significativo hacia la representación auténtica. “Todas las imágenes generadas para esta campaña, son resultados reales de una herramienta de inteligencia artificial, con el único propósito de mostrar el sesgo de belleza en las herramientas de IA generativa”, explicó Fittipaldi.

De esta forma, la marca se mantiene firme en su misión de desafiar los estándares impuestos y continuar promoviendo la belleza real.