En el municipio de Valle de Bravo, Estado de México, se reportó la contención exitosa de tres incendios forestales gracias a la cooperación entre el Gobierno del Estado de México y el Gobierno Federal.
La intervención contó con la participación de más de 200 brigadistas, además del apoyo aéreo del Grupo de Rescate Aéreo “Relámpagos”, que efectuó 46 descargas de agua, sumando un total de 27,600 litros para mitigar las llamas.
Los esfuerzos se concentraron en tres principales focos: El Cerrillo, Velo de Novia y Cualtenco, logrando un progreso significativo en su control, con porcentajes de liquidación del 85, 80 y 70 por ciento, respectivamente. El trabajo conjunto entre fuerzas federales, estatales y brigadas comunitarias ha permitido importantes avances en la extinción de incendios, protegiendo así la flora y fauna local, así como a los habitantes de la región.
Hasta el momento siguen activos otros dos incendios situados en La Carreta, en la frontera con el municipio de Ixtapan del Oro, y en Monte Alto, este último iniciado la tarde del lunes 6 de mayo. Las brigadas trabajan en la extinción de ambos siniestros, los cuales permanecen bajo intensa vigilancia y combate por parte de las autoridades.
La colaboración multisectorial entre entidades como la Protectora de Bosques (Probosque), la Comisión Nacional Forestal (Conafor), la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp), la Comisión Estatal de Parques Naturales y de la Fauna (Cepanaf), además de las brigadas comunitarias, el Ejército Mexicano, la Guardia Nacional (GN), y personal de Protección Civil estatal y municipal, ha sido fundamental en las labores de control y extinción de estos incendios.
Además, el Puesto del Sistema de Comando de Incidentes se mantiene activo en la zona con el objetivo de coordinar todas las operaciones y asegurar que tanto la población local como los turistas enfrenten riesgos a causa de los incendios.
Adicionalmente, se informó sobre la conclusión de las labores para sofocar tres incidencias previas en los municipios de Santo Tomás y Otzoloapan. Dichos esfuerzos han quedado en manos de brigadas locales, quienes actualmente monitorean y supervisan las áreas afectadas para prevenir reinicios o la propagación de las llamas a sectores colindantes.