Cambio cultural: los desafíos de promover la igualdad de oportunidades en las empresas

La igualdad de oportunidades y la participación femenina en roles de liderazgo son dos de los temas que se encuentran en el centro de la escena en el ámbito empresarial. Acerca de esto se habló en la última edición de Infobae Talks Mujeres con Impacto: el ciclo de entrevistas que conduce Agostina Scioli.

Entre las participantes del programa estuvo Andrea Pastrana, quien se desempeña como socia de Auditoría y líder de Diversidad, Equidad e Inclusión de KPMG Argentina y co-chair de Women Corporate Directors (WCD) – Capítulo Argentina. La ejecutiva trabaja en esta firma global desde hace más de dos décadas.

En el comienzo de la charla, se hizo hincapié en la necesidad de pasar de las palabras a la acción porque si bien estos asuntos permanecen en la agenda de la mayoría de las organizaciones, los números que se registran aún son bajos. De hecho, un estudio que hizo esta compañía detectó que el porcentaje femenino en puestos de dirección y liderazgo en el país es de aproximadamente el 17%.

“El tema está instalado, pero la realidad dista de lo discursivo. Por ejemplo, en la Argentina más de la mitad de la población somos mujeres, pero esto no se ve reflejado en el mundo de los negocios”, afirmó Pastrana. De esta manera, reveló que aún queda mucho por hacer.

Particularmente, en KPMG existe un Comité de Diversidad, Equidad e Inclusión desde hace más de seis años, el cual es patrocinado y cuenta con la participación activa del CEO y presidente de la empresa. De allí han surgido iniciativas de género, así como otras dirigidas a la comunidad LGBT y las personas con discapacidad. Actualmente, el personal femenino representa el 59% de la organización en el país.

En la Argentina, en tanto, la compañía promueve el desarrollo laboral de las mujeres a través de un sistema de soft landing, que consiste en el acompañamiento a las colaboradoras madres (sean gestantes o no) para que tengan un retorno paulatino al ámbito laboral. Esto es acompañado por la ampliación de licencias por paternidad y maternidad.

En la misma línea, KPMG Argentina, cuenta con una serie de programas de mentoreo para que las profesionales de su plantilla sean capaces de potenciar sus habilidades técnicas y de liderazgo. De esta manera, aumentan sus posibilidades de llegar a ocupar roles más altos en la escala jerárquica.

La compañía es global main sponsor de Women Corporate Directors, la organización que nuclea a la elite de mujeres ejecutivas en todo el mundo y de la que Pastrana es co-chair del Capítulo Argentina que se lanzó en 2017 y hoy posee más de 120 CEO, gerentes generales y miembros de directorio.

Adicionalmente, en 2021, KPMG creó la certificación Next Board junto a La Bolsa de Comercio de Buenos Aires, UCEMA y WCD. Con más de 100 egresados, esta capacitación permite a los participantes adquirir herramientas para poder acceder a su primer board local o dar el siguiente paso para en un cargo internacional.

“Todas las empresas deben entender que la diversidad suma a los negocios: genera iniciativas nuevas y diversas, además de aportar creatividad e innovación. Incluso, esto puede impactar en los resultados económicos por los distintos puntos de vista que intervienen en la toma de decisiones”, expresó Pastrana.

En ese sentido, la ejecutiva reveló que el principal desafío que existe tanto a nivel nacional como mundial consiste en llevar a cabo un cambio cultural, el cual debe contar con posibilidades para que más mujeres logren desarrollar sus carreras y llegar a posiciones de liderazgo.

Además, indicó que hay mecanismos que facilitan la igualdad de género, como los reguladores que en algunos países se denominan “cupos”. A su vez, también están los organismos que establecen que haya una paridad no a través de un número, pero sí que se vea reflejada en informes de responsabilidad social o las páginas web de las compañías.

De cara al futuro, Pastrana remarcó la dificultad de que el panorama se revierta en el corto plazo: “Hay estudios de las Naciones Unidas que dicen que la equidad va a tardar 132 años en lograrse, que es muchísimo. Sin embargo, quiero ser positiva porque tanto los inversores como los organismos reguladores de algunos países y las nuevas generaciones impulsan este cambio”.

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