Milagros se crió respirando el aire de Los Pumas. Su padre, Alejandro Cubelli, es un histórico hooker de la selección nacional de rugby de las décadas del 70 y 80. Hoy su hermano Tomás sigue su camino como medio scrum en la selección actual, que está disputando en el mundial de Francia.
Para la joven este año también es muy importante para su carrera: se trata de la tercera vez que trabaja para la Copa del Mundo de Rugby, como productora de Experiencia Pumas.
“Es un evento de relacionamiento que sucede pospartido, en donde el objetivo es acercar a los jugadores a todos los sponsors que hacen que todo sea posible, y al mismo tiempo darle la bienvenida a las familias”, explica Milagros (30). Con años de experiencia en marketing deportivo, produjo este “hospitality” en la Copa Mundial de Rugby de 2015, en Inglaterra, y 2019, en Japón.
“Obviamente que la experiencia general de este evento que sucede pospartido depende en gran medida del resultado del partido mismo. Por ejemplo, el primer hospitality de este Mundial en Francia, después de haber perdido contra Inglaterra fue muy duro, había un silencio fúnebre, a diferencia del triunfo contra Japón que nos dio el paso a la clasificación a cuartos de final. Ese evento terminó siendo una gran celebración en la playa, había música, comida, sponsors, famosos, muchos ex Pumas que se acercaron a saludar. Pero también había gente ajena al deporte y al ambiente del rugby en general, que quedaron gratamente sorprendidos de la buena predisposición y calidez de los jugadores para sacarse fotos, charlar, firmar camisetas”, agrega.
Pero no todo es deporte. Ese último año también estuvo a cargo de la dirección creativa de un evento glamoroso al otro lado del mundo: el prelanzamiento del hotel Nomad, Marruecos, en la casa de Franca Sozzani (histórica redactora jefe de la revista Vogue Italia). Cubelli recuerda que entre los invitados había miembros de la realeza marroquí.
“No suelo engancharme mucho en las grandes personalidades, por eso el hecho de contar con invitados reales o figuras muy reconocidas no es algo que me genere nervios o presión. Fue una experiencia llena de colores, sabores, texturas, todo era sensorial y al mismo tiempo muy elegante. Había invitados literalmente de todas partes del mundo. Era mágico”, cuenta.
Exjugadora de tenis profesional, en 2011 viajó a los Estados Unidos para estudiar Comunicación en la Universidad de Portland, Oregon. Luego terminó sus estudios en Argentina en la Universidad del Salvador.
A los 20 ya era la directora de Marketing de Play Patagonia, una agencia que realiza eventos para Unión Argentina de Rugby (UAR), SANZAAR, Asociación Argentina de Tenis y Asociación de Surf Argentina. En este rol tuvo que aprender a utilizar toda su creatividad para crear un diferencial.
Tres años después creó el Corporate Lounge, el “hospitality” oficial de los Rolling Stones, Coldplay, U2, Paul McCartney y Aerosmith, entre otras bandas. En este tipo de eventos las empresas se acercan a vivir “experiencias VIP” junto a clientes y figuras reconocidas: “Fue un privilegio poder estar tan cerca de bandas tan trascendentes y al mismo tiempo poder aportar un poco de creatividad en el contexto de sus recitales”.
Otro hito en su carrera fue participar en la creación de la identidad de marca de Jaguares, el primer equipo profesional de rugby en Argentina. En este puesto se encargó de generar experiencias y contenidos para los días de partido. Así, el equipo comenzó con una temporada de “muy bajos espectadores” y terminó con más de 20 mil asistentes.
Esto último le ocurrió también cuando se encargó de la estrategia creativa del rebranding de Hurlingham Polo Open & Market, en donde logró acercar a personas ajenas al deporte al torneo. Si normalmente asistían mil personas, pasaron a concurrir 10 mil.
“Creo que para poder diseñar experiencias es necesario saber conectar con eso que sucede detrás de lo está pasando. Así como cada campaña o evento tiene un objetivo o propósito, creo que nosotros como humanos también tenemos uno. Y desde que empecé siempre supe que vine a crear, a generar momentos, instantes pequeños o largos, pero experiencias en fin transformadoras para el público. Y muchas veces la determinación o la certeza interna hace la diferencia”, concluye.