El fósforo es uno de los elementos clave para el desarrollo de las plantas: participa en procesos como la fotosíntesis, la transferencia de energía y la síntesis de los carbohidratos. Se puede encontrar, además, tanto en compuestos orgánicos como minerales.
“Es un nutriente esencial que aumenta la productividad de los cultivos al estimular el desarrollo radicular temprano, incrementando la absorción de agua y nutrientes”, explican desde COMPO EXPERT, una firma especializada en nutrición de cultivos que participará del Congreso Internacional del Maíz (12 y 13 de septiembre) en Paraná, Entre Ríos.
“Generalmente, la cantidad de fósforo disponible en el suelo es muy baja en comparación con la cantidad total de fósforo presente. Por lo que habitualmente es necesario aplicar fertilizantes fosforados para satisfacer los requerimientos nutricionales de los cultivos precedentes”, agregan desde la compañía.
De acuerdo con COMPO EXPERT, la elección de la fuente de fertilización fosfatada es una de las decisiones más importantes a corto, mediano y largo plazo.
Además, algunos factores que afectan la eficiencia de los fertilizantes son la cantidad de fósforo aplicada, las características del suelo, así como su temperatura y humedad, el tipo de cultivo, el grado de deficiencia de fósforo en el suelo y el método de aplicación.
A través de un análisis del macronutriente en el suelo ya se pueden predecir los requerimientos de los fertilizantes fosfatados de los cultivos, mientras que, para determinar la dosis, se debe evaluar el nivel del nutriente en el suelo, la relación de precios grano/fertilizante y el criterio del ingeniero agrónomo.
“Debemos considerar que existen dos criterios de recomendación: el de suficiencia, y el de reconstrucción y mantenimiento. El criterio de suficiencia consiste en aplicar el nivel de nutriente estrictamente necesario para satisfacer las necesidades inmediatas solamente con niveles de nutrientes por debajo del umbral crítico, mientras que el de reconstrucción y mantenimiento consiste en aplicar la cantidad de nutriente extraída por el cultivo, más cierta cantidad para elevar el nivel de nutriente del suelo”, explican desde la compañía.
En cuanto a los tipos de fertilizantes, existen los orgánicos (residuos orgánicos que cuentan con fósforo) e inorgánicos (los fertilizantes fosfatados que derivan de la roca fosfórica). También los hay solubles, disponibles inmediatamente para que la planta los absorba, e insolubles, disponibles a través del tiempo.
Desde COMPO EXPERT ofrecen una gran variedad de soluciones para el campo. El producto EasyStart es un fertilizante microgranulado que cuenta con fósforo, nitrógeno amoniacal, azufre, zinc, hierro, manganeso y la cepa patentada “E4-CDX”, que protege el crecimiento de las raíces y aumenta la tolerancia de los cultivos a agentes patógenos y otras fuentes de estrés.
Este fertilizante puede usarse al momento de la siembra junto a la semilla, para proteger a la planta cuando es joven. Ideal para utilizarse como arrancador de cultivos, se recomienda utilizar entre 20 y 40 kg por hectárea.
“Según ensayos realizados en el INTA Pergamino, maíces fertilizados con EasyStart BS alcanzaron 13.375 kilogramos por hectárea, por encima de los 9.838 kilos del testigo sin tratamiento y de los 12.890 kilos logrados con una fertilización tradicional con 100 kilos de fosfato monoamónico”, aseguran desde la firma.
La inscripción para el congreso es libre y gratuita, con cupos limitados. Es posible gestionarlo a través del siguiente sitio web.