Viajar a Cuba, en los últimos años, se ha convertido en un must para todos los turistas que quieren vivir una experiencia caribeña distinta. Es la unión perfecta entre descanso, tradición y aventura.
La lista de personajes ilustres y celebridades que han visitado El Malecón de La Habana y se han sacado fotos en Cuba es interminable. Entre ellos se encuentran desde Madonna y Kim Kardashian, hasta el Papa Francisco.
Hoy miles de turistas eligen esta isla y sus paradisíacas playas para disfrutar de un confortable descanso. Poner un pie en Cuba adiciona también la sensación de que el tiempo se ha detenido.
Para conocer este país de una forma diferente y aprovechar sus múltiples escenarios se sugieren tres lugares bien definidos: La Habana, Varadero y Cayo Cruz, este último es un destino virgen que se encuentra en proceso de desarrollo y expansión.
Cayo Cruz, el secreto mejor guardado
Este cayo pertenece al archipiélago Jardines del Rey, ubicado en el municipio de Esmeralda, al norte de la provincia de Camagüey.
La primera gran aventura es llegar a Cayo Cruz. Aprovechando los vuelos directos que se realizan semanalmente a Cayo Coco, arribando al aeropuerto Internacional Jardines del Rey, se parte desde allí a Cayo Cruz, en un viaje que dura 50 minutos en autobús. Para llegar, es necesario recorrer una angosta carretera de 120 km asfaltada, construida recientemente en medio del mar. Una imagen que se puede disfrutar antes de aterrizar y catalogar de surrealista.
Se trata de es un cayo de 26 km² escondidos en un real paraíso de arenas blancas y playas vírgenes con 20 kilómetros para bucear y explorar. Todo eso lo hace el destino perfecto para desconectar.
Ya en Cayo Cruz, la oferta de hoteles no será un problema. Existen tres hoteles en pleno funcionamiento, de los cuales dos pertenecen a la cadena Iberostar, ambos de categoría 5 estrellas, que brindan conceptos distintos servicios dependiendo del plan del viaje.
Como si tanto hotel no alcanzara, se pueden utilizar todas las instalaciones y servicios del hotel Iberostar Selection Esmeralda, es decir, dos hoteles en uno.
¿Por qué el Iberostar Selection Esmeralda? Este hotel, también 5 estrellas y all inclusive, posee un precioso spa con jacuzzi, sauna y cabinas de masajes, y el Day Pool Garden. Tiene 4 restaurantes a la carta, el buffet de gastronomía local y el muy concurrido y demandado sector infantil, la estrella del lugar, ya que es exclusivo para niños menores de 12 años, y posee atención personalizada, permitiendo así un relax real para toda la familia.
Luego de Cayo Cruz, visitar La Habana es la opción que devuelve un poco el ruido de la ciudad y asombra en cada esquina con girones de historia y una cruda realidad.
La Habana, un viaje en el tiempo
A La Habana se puede llegar por tierra desde Cayo Cruz, en ómnibus son 9 horas de carretera, o en avión un vuelo de 40 minutos.
Ya en la capital de Cuba habrá que elegir en qué Habana será el alojamiento: en la vieja o en la nueva. Ambas con su encanto y las fachadas más pintorescas.
La oferta hotelera en esta ocasión es de mayor variedad. Todos los hoteles satisfacen las exigencias de un turismo internacional cada vez más sofisticado.
Recientemente remodelado, se encuentra en uno de los edificios históricos que aspira a convertirse en un ícono de confort de esa ciudad, el hotel Iberostar Grand Packard, una de las opciones más demandada.
La Habana invita a pasear durante horas. En sus avenidas kilométricas habrá que sortear baches, charcos y cubanos que ofrecen todo tipo de souvenir. Ser turista también se convierte en una odisea.
Durante el recorrido por las calles es de lectura casi obligatoria las frases más célebres del Che Guevara o de Camilo Cienfuegos, y además es posible encontrar banderas del país flameando en cada rincón.
La vida nocturna y musical es una atracción aparte. Cuenta con una amplia oferta de conciertos y recitales de artistas locales que van desde la música callejera hasta el mítico cabaret.
Una ciudad llena de paradojas y contradicciones, cuyos principales atractivos para visitar son su casco histórico, El Malecón y la Plaza de la Revolución. Un destino emocionalmente modificador.
Ya con La Habana y Cayo Cruz impregnados en la piel, Varadero es la mejor opción para despedirse de Cuba.
Varadero, la joya del Caribe
Con unos 30 kilómetros de largo, de los cuales 22 son playas paradisíacas, es considerado uno de los principales destinos elegidos por los viajeros del mundo.
Su zona turística, a diferencia del estilo cubano en general, se asemeja más a las zonas de veraneo californianas y a la de Las Canarias.
También en este destino las principales cadenas han construido lujosos hoteles con el concepto all inclusive. El Iberostar Selección Varadero es uno de los que se destaca. Una verdadera fortaleza en medio de un mar de arena blanca y aguas cristalinas. Es un resort de 5 estrellas ubicado entre jardines tropicales y la reserva natural de Varahicacos.
De amplias y cómodas instalaciones, incluye un conjunto increíble de piscinas, variedad en el área de la gastronomía y distintas actividades, con la frutilla del postre, el spa Sensations, lo más premium de ese paraíso.
Diversión y descanso en su punto justo
Cuba es, definitivamente, un universo de experiencias para unas vacaciones soñadas. Desde sus ciudades cargadas de historia y arquitectura única hasta sus playas de arenas doradas y aguas turquesas que invitan al descanso, el país caribeño ofrece una gama infinita de posibilidades para los viajeros.
Sumergirse en la cultura local a través de la música, la danza y la gastronomía es un placer sensorial que solo se puede experimentar en este rincón del mundo. La diversidad de actividades, ya sea recorriendo los callejones adoquinados de ciudades coloniales, explorando la vibrante vida nocturna o disfrutando de aventuras naturales, garantiza que cada día en Cuba sea único.