Una de las zonas en las que YPF Agro registra un mayor crecimiento de sus servicios e insumos para la agricultura (como semillas, productos para nutrición y protección de los cultivos, bolsas de silo) es Mendoza, reconocida por concentrar el 72% de las bodegas elaboradoras argentinas y el 80% de la exportación de vino nacional.
“Los vinos de acá son muy demandados en el mundo”, asegura Domingo Fazzio, un productor mendocino que cuenta con una explotación en Tunuyán (cerca de 80 km de la capital provincial), una zona a 1100 metros sobre el nivel del mar reconocida por la producción de vinos de altura.
El productor tiene una estrecha relación desde hace mucho tiempo con PetroAndes, distribuidor de YPF Agro en la zona, al principio con la compra de combustibles y actualmente de fertilizantes: “Lo que más uso yo es el triple 19, que anda muy bien en la zona”, agrega.
Además de los viñedos, principales cultivos de la zona, también se destacan los frutales de durazno, ciruela, manzana y pera, y frutos secos como nogales y almendros. En cuanto a la horticultura, los principales son el ajo, papa, zanahoria y tomate para industria.
Esta diversidad de cultivos provoca que las necesidades de los productores sean muy variadas, ya que pueden precisar desde fertilizantes hasta combustibles. “Nosotros tratamos de brindarles un asesoramiento técnico lo más integral posible, acompañar tanto a productores como ingenieros agrónomos, resolviendo sus dudas con innovación y tecnología”, explica Bianca Del Popolo, ingeniera agrónoma y responsable técnica en PetroAndes.
En el caso del ciclo de la vid, una fase clave es el envero, cuando los racimos comienzan a madurar y adquirir sus tonos característicos rojos, azules o violetas. Es fundamental llegar a ese punto con un plan completo de nutrientes, principalmente nitrógeno, potasio y fósforo.
Luego de cada cosecha, el equipo de PetroAndes se reúne con los ingenieros de las fincas para disponer un plan de fertilización, aplicando la fórmula de granulado triple 19 de YPF Agro. “Ese fertilizante entra justamente en el concepto de Summa Mix, una mezcla que se arma a medida, según las necesidades del cultivo, y después se complementa con la fertilización que acá se llama fertirriego, porque se aplica a través de las mangueras de riego con fertilizantes líquidos”, agrega la ingenieria.
A este mix se suman otras combinaciones también muy utilizadas en la zona: el 18-46-0, el fertilizante triple 15 y la Urea N-Gradual, que garantiza una mayor disponibilidad de nitrógeno en el suelo.
“El plan de nutrición es clave para lograr el equilibrio entre la parte vegetativa y la productiva, alcanzando una armonía entre la concentración de azúcares y la acidez, lo que es determinante al momento de tener la calidad que demanda las bodegas de la cosecha”, explican desde YPF Agro.
La estrategia de fertilización debe adecuarse al suelo y a las variedades de vid, pero también es importante el riego: las plantas deben ser fuertes y tener un sistema inmunológico desarrollado para poder resistir potenciales plagas y enfermedades.
Por su parte, el gerente de PetroAndes Manuel Clop asegura que la empresa prioriza mantener un vínculo con los clientes: “Buscamos darles soluciones a sus necesidades, ofreciendo toda la integralidad de los productos y servicios de YPF Agro, para poder agregarle valor a sus diferentes producciones”.
“En PetroAndes estamos planificando una nueva base en el sur de Mendoza, para proveer de soluciones y productos a los diferentes clientes de los departamentos de esa zona”, agregó el gerente de la firma que tiene como clientes tanto a pequeñas como grandes bodegas, con un servicio a medida de cada una.
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