La tecnología blockchain significa una oportunidad para el desarrollo de diversas industrias en la actualidad. Incluso, su impacto a nivel global promete incrementarse en el futuro cercano mediante diversas iniciativas que surgen tanto de grandes organizaciones como de emprendedores.
Uno de los proyectos innovadores que se ha presentado recientemente en este país fue Andina NFT: una propuesta creada por la catamarqueña Florencia Sosa, junto a su socia y amiga Florencia Bovo, cuyo objetivo consiste en enaltecer y empoderar a trabajadoras que realizan tejidos de vicuña a más de 4000 metros sobre el nivel del mar y con técnicas de herencia ancestral.
La iniciativa se lanzó en un evento que se llevó a cabo en el Faena Art Center, donde también se dio a conocer el nombre de la primera colección: Mujeres Creando. La gala de presentación contó con la participación de diversas embajadoras como Connie Ansaldi, Guillermina Valdez, Zaira Nara, Carla Peterson y Valeria Mazza. Además, estuvieron representantes de organismos internacionales, embajadas, ONGs y gobiernos.
La idea consistió en reunir a un grupo de tejedoras de la Puna catamarqueña en cooperativas autogestionadas. Al no tener acceso a tecnología ni a posibilidades de mostrar al mundo su obra, fueron convocadas por Sosa para crear una comunidad de talento femenino y tecnología Web 3.0 que busca potenciarse en distintos encuentros de sororidad y apoyo mutuo.
Como CEO de Grupo ECA, una de las más jóvenes en ocupar ese rol en la Argentina, la empresaria decidió dar un giro de 360° a su carrera profesional mediante esta iniciativa que combina innovación tecnológica, empoderamiento y pasión por su provincia natal. El amor por la moda siempre fue su hobby y logró volcarlo a través de una propuesta que va más allá del estilo y la elegancia: está enfocada en el triple impacto.
La idea surgió con el objetivo de darles visibilidad a las trabajadoras del arte milenario de tejidos de lana de vicuña, los cuales requieren de un riguroso tratamiento con técnicas que se transmiten a través de las generaciones en el norte argentino. Especialmente, en la Puna de Catamarca, donde el poncho es parte del ADN de sus habitantes.
De esta forma, nació un espacio de contención para mujeres que viven de la confección de prendas elaboradas con la piel de un animal considerado sagrado en la localidad de Laguna Blanca, Belén, situada en la zona pre cordillerana de esta provincia. De ahí provino el nombre de Andina NFT.
Cabe mencionar que los tejidos de lana de vicuña se destacan por su suavidad y por su alto nivel de calidad, lo cual es valorado en distintas partes del mundo por las principales marcas de lujo.
Mediante la tecnología NFT, se logra que cada pieza contenga información acerca de la mujer que la diseñó. Como hoy se sabe quién realiza una obra de arte, se busca que cada prenda tenga identidad y transparencia. Por eso, cada una contiene un dibujo digital de la tejedora y su historia.
El comprador recibe un certificado de trazabilidad con información de la materia prima emitido por el Ministerio de Ambiente y Sustentabilidad de Catamarca, junto con un tejido físico y una cápsula audiovisual, en donde la autora cuenta su historia de superación y resiliencia, así como la pasión por su trabajo.
“Vamos a vincular tecnología con algo tan argentino como un poncho. Buscamos una forma diferente de contar historias a través de una propuesta hecha por mujeres para empoderar a mujeres”, afirma Sosa. Asimismo, menciona su objetivo de resaltar el rol femenino en el mundo tecnológico, donde solo el 7% de proyectos de este tipo es liderado por una mujer.
Los NFT de la colección Mujeres Creando ya están disponibles en el marketplace Carnaval Art. A su vez, quienes deseen conocer más información sobre Andina NFT pueden hacer clic acá para ingresar al sitio web del proyecto.