Cuál es la herramienta clave para el campo en su lucha contra las malezas

En una campaña de soja y maíz que no será simple desde el punto de vista climático, un herbicida con tecnología japonesa de micronizado se presenta como un aliado del productor ante las malezas cada vez más resistentes

De cara a la próxima campaña de soja, los productores se preparan para hacer frente a la problemática de malezas (REUTERS/Agustín Marcarian)

La campaña de granos gruesos, que recién comienza, se presenta desafiante para los productores por cuestiones climáticas, donde la falta de lluvias puede poner en jaque las plantaciones. Es por eso que maximizar la producción de los campos de soja y maíz se vuelve primordial ante un contexto “a priori” complejo. Para ello se requiere de nuevas soluciones y tecnologías.

En la actualidad, el campo argentino cuenta con productos fitosanitarios de excelencia, por lo cual el agricultor tiene a mano una paleta de opciones acorde a cada necesidad. Y entre ellas, con un lugar preponderante y en pleno crecimiento, se encuentra el herbicida Fierce RM, de la compañía Summit Agro, que apunta a ser una de las mejores herramientas para el control de malezas.

El producto estrella de Summit Agro -empresa perteneciente al Grupo japonés Sumitomo Corporation y que desde 2001 opera en la Argentina- es un herbicida que ataca directamente a la semilla de la maleza y es el resultado de una combinación de dos activos que funcionan de manera complementaria: flumioxazin, cuyo modo de acción es PPO y pyroxasulfone, que es un isoxazolinas. “Con el flumioxazin se está controlando desde el banco de semillas, preemergencia de malezas de todo lo que es hoja ancha y con el pyroxasulfone se controla amaranthus y gramíneas anuales de difícil control”, explicó a este medio el gerente de Marketing, Adrián Martínez.

Así, el Fierce RM “es una herramienta potente para el control de malezas difíciles en los cultivos de soja y maíz, cuya aplicación debe ser previa a la emergencia de la maleza, como así también a la siembra de los cultivos”, dijo Martínez e hizo hincapié sobre el “doble control” y la “colaboración” que ambos activos tienen en la lucha contra las malezas.

“Si bien cada molécula dentro del Fierce RM tiene un mayor control sobre malezas ‘target’, hay un doble control sobre el yuyo colorado y las gramíneas. Es una herramienta potente para el productor porque en lotes de alta infestación de malezas como el eleucine, capín, amaranthus, se presenta con un gran poder residual, que permite al cultivo establecerse libre de malezas, y reduce el nivel de competencia inicial, que le quita poder de establecimiento del canopeo y menor crecimiento vegetativo del cultivo. Entonces, en estos primeros estadíos, el herbicida ejerce un gran poder residual y el cultivo crece libre”.

El cultivo del maíz se prepara para un ciclo muy complejo desde lo climático, ante la ausencia de precipitaciones

Según detalló Martínez, este herbicida debe aplicarse previo a la siembra de los cultivos y de la emergencia de la maleza, por lo cual si el productor encuentra el suelo con cobertura verde (malezas) mayor al 30% en el lote, tiene que separar las aplicaciones, realizar primero una con herbicida quemante, dejar que el lote se seque y posteriormente hacer la del herbicida residual, en este caso el Fierce RM. En el caso de que tenga una cobertura de hasta el 30%, se puede hacer una mezcla de los herbicidas quemantes más el Fierce RM.

En ese sentido, la dosis que se recomienda en soja y maíz es entre 400 y 500 centímetros cúbicos por hectárea dependiendo de que los suelos sean livianos, pesados o intermedios. También se debe hacer en función de la presión de malezas en el lote. El producto se debe aplicar entre 7 y 10 días previos a la siembra de soja y en el caso del maíz, de 10 a 15 días previos.

La clave es el micronizado

El Fierce RM, a pesar de que es un producto virtualmente nuevo con solo cinco años en el mercado, supo ganar su lugar en la elección de los productores, por su eficiencia y por los buenos resultados que los agricultores han obtenido con su utilización. Por eso, no es casual que las ventas del herbicida hayan crecido un 50% este año y que desde la empresa proyecten un incremento igual para 2023.

Pero su éxito tiene correlación directa con la tecnología de punta que posee el Fierce RM: el micronizado. “Fierce RM tiene una característica importante que es el micronizado en la formulación que desarrolló Summit hace un par de años, que también lo implementó en otro herbicida de la empresa que se llama Gemmit Top”, comentó Martínez.

Esta tecnología disminuye el tamaño de la partícula para incrementar la superficie de contacto de la semilla de la maleza con el herbicida. Entonces, hay una mayor superficie específica, con una mayor probabilidad de contacto con la semilla y hay una distribución más homogénea del producto aplicado al campo. Eso da mayor efectividad en el control de malezas”, finalizó Martínez.