En Dubái casi no se pagan impuestos sobre los inmuebles, pero esto es solo uno de los elementos a evaluar a la hora de elegir dónde invertir en bienes raíces. Los inversores de origen argentino y latinoamericano miran con más interés Estados Unidos o Europa, aunque esto está comenzando a cambiar gracias a la situación actual del mercado.
“Por un lado, tenemos a Europa que siempre aconsejamos para el comprador final, porque es un mercado diferente, requiere más documentación y requisitos, y los retornos son más bajos por los impuestos y por el tipo de propiedades que uno compra habitualmente. Por lo tanto, es un mercado específicamente para el que va a darle uso a esa propiedad”, explica Fabián Parolari, broker internacional que opera en Estados Unidos, Dubái, París, Barcelona y Londres.
En tanto, el mercado de Estados Unidos es muy variable, allí se pueden adquirir propiedad para el propio uso, para su renta o como una inversión de capital que se desea hacer crecer. “En Estados Unidos tenemos dos unidades de negocios, lo que es comprar una propiedad o fondeando la tierra teniendo un excelente retorno, son inversiones aproximadamente a tres años, donde se termina la torre, uno cobra capital y mientras tanto cobra intereses. Pero allí estamos en una pequeña burbuja. A Miami ha bajado mucha gente del norte, más el rebote pospandemia ha hecho que los precios se hayan ido a valores ilógicos”, explica Parolari.
“Hace dos años o tres una unidad chiquita nueva valía 250 mil dólares y hoy está en los 500 mil. Son valores que superaron la media histórica lo cual va a traer dos problemas a corto plazo. Uno, que el comprador que pague cash no va a tener un problema directo, pero va a tardar muchos años en recuperar el valor de la propiedad. Dos, el que compra pensando que va a obtener un crédito el día de mañana: los bancos no le van a prestar estos valores porque están totalmente excedidos a los precios habituales”, evalúa el consultor internacional.
Por qué Dubái se volvió tan atractiva
El mercado de Dubái está más bien apuntado al inversor que busca obtener un retorno, ya que es poco común que el público latino elija ir a vivir a los Emiratos Árabes. “Hace un par de años cuando empecé a promocionarlo, para la gente era algo rarísimo, impensado. Hoy es uno de los mercados más atractivos, no solamente para Argentina y América Latina, sino para el resto del mundo porque la relación producto-precio es óptima”, sostiene Parolari.
A ello se suma que en el emirato se potencian los tres principales elementos que busca un inversor: educación, salud y seguridad. Hogar de unas 200 nacionalidades, Dubái ocupa el quinto puesto en la lista de expatriados como el mejor lugar para vivir y trabajar a nivel mundial y es una de las ciudades más seguras del mundo. La residencia de larga duración se puede obtener bajo el sistema Golden Visa.
En esa línea, la seguridad jurídica es óptima. “No tienen gastos de escritura ni de comisión, no hay impuesto a la herencia, a la renta ni a las ganancias. Para comprar no es necesario crear una sociedad, no hay que pagarle a un contador. Las expensas no son tan altas, como han subido en Estados Unidos, por lo que el retorno es mucho más alto”, enumera Fabián Parolari.
“Uno puede comprar un condohotel desde 220 mil dólares con un retorno estimado del 8% o una unidad residencial desde los 300 mil dólares con una renta cercana. Estamos hablando de valores de 5 o 6 mil dólares el m2 en propiedades de superlujo de la desarrollista Emaar, que es la compañía más grande del mundo. En el mundo no se consiguen propiedades a esos valores”, agrega el consultor en bienes raíces de lujo comparándolos con ciudades globales como Nueva York, Hong Kong, Londres, París, Singapur y Tokio.
Estos indicadores hacen que Dubái esté entre los ocho países más ricos del mundo y en el cuarto puesto a nivel turismo internacional. De las empresas Fortune 500, 196 empresas tienen una oficina en Dubái y Emiratos Árabes ocupa el puesto 16 entre 190 países en facilidad para hacer negocios, según datos de Fabián Parolari.
Desde Argentina parece estar lejos, pero Dubái está en el centro del mundo: con un vuelo de ocho horas se accede al 76 % de la población mundial con el 53 % del PIB mundial.
Para contactarse con Fabián Parolari se puede ingresar aquí, al teléfono +1 786 202 1231 o por mail.