Latinoamérica: cómo se transforma la región frente a los cambios globales

Las megatendencias son fuerzas globales de transformación paulatina, con un impacto dramático en las sociedades, las organizaciones y el medio ambiente. En el quinto capítulo del ciclo de charlas “Asegúrate de vivir”, de Seguros Sura, Juana Francisca Llano, presidente de Suramericana, y María Clara Gutiérrez, reconocida socióloga colombiana, hablaron sobre cómo se están transformando los jóvenes latinoamericanos frente a los cambios globales.

Con este espíritu, la primera pregunta que surgió es qué es lo que une a los latinoamericanos y les otorga características diferenciales, incluso cuando están fuera de su tierra. “Creo que los latinoamericanos somos, por esencia, alegres, tenemos músicas que son reconocidas en todo el mundo: la mexicana, el tango argentino, la samba brasilera, el vallenato colombiano, el merengue dominicano, el son cubano. También nos une una capacidad de reinventarnos cuando las cosas han sido difíciles. No nos damos fácilmente por vencidos, somos muy recursivos”, considera Gutiérrez.

Por su parte, Juana Francisca Llano se enfocó en resaltar la resiliencia y la capacidad de transformación que caracteriza a los latinos. “En la época que estamos viviendo, encontrar nuevos caminos es un requisito indispensable”, destacó.

De acuerdo con el informe de megatendencias de Suramericana, las condiciones de vida se vienen transformado profundamente debido a los avances exponenciales en ciencia y tecnología, el acelerado desarrollo de la movilidad internacional, la globalización cultural y económica, el impacto de las políticas públicas y los cambios en las expectativas de vida. Estas megatendencias se ven reflejadas en la composición, estructura, dinámica y características de la población mundial y se expresan más visiblemente en los jóvenes contemporáneos, en este caso, de la región latinoamericana.

“Cuando hablamos de megatendencias hablamos de, por ejemplo, la hiperconectividad que hoy se nos hace tan evidente, pero que realmente empezó hace muchos años, o la globalización, con los fenómenos antiglobalistas que vemos actualmente. También se encuentran los cambios demográficos, que se expresan en la longevidad y los cambios en las estructuras familiares, así como la variabilidad, el cambio climático y la escasez de recursos”, detalla Llano.

“Antes no existía el cambio climático y el temor colectivo que genera, hoy en día sí. Veo que los jóvenes ahora están más comprometidos con que exista un único planeta en el que vamos a vivir y que ese planeta pueda perdurar. Por otro lado, la cantidad de personas mayores ha aumentado en una proporción considerable y ellos van a tener que ser responsables de mucho de nuestro bienestar en el futuro”, ejemplificó, a su vez, María Clara Gutiérrez.

En esa línea, ambas coinciden en que los jóvenes de hoy son mucho más conscientes de los desafíos que deben asumir, si se compara con las generaciones anteriores, pero, además, de la necesidad de ir más allá de las palabras y pasar a los hechos. En este sentido, como respuesta a la crisis por el cambio climático aparecen, por ejemplo, comportamientos enfocados en evitar la contaminación y limitar el hiperconsumo, a través de decisiones más conscientes.

Por su parte, con relación a los cambios demográficos, una megatendencia indica que las personas van a vivir más tiempo. “Las tecnologías alrededor de la salud y los hábitos saludables han aumentado, lo que hace que la expectativa de vida también aumente, pero, al mismo tiempo, las familias empiezan a tener menos hijos”, describe Llano.

A esto se suma otro fenómeno: a quién las personas consideran su familia. “La nuclear es la que hoy en día se siente más como la familia, pero para nosotros era la familia extendida. Nuestras primeras interacciones sociales eran con esa familia que iba hasta los primos terceros, era algo muy importante para nosotros. Hoy en día no veo que exista tanto eso, hoy es el papá, la mamá y los hijos -los abuelos también tienen presencia-, y creo que se pierden cosas maravillosas, se pierden las historias de dónde vienes, cuál es tu linaje y tu herencia cultural, tu herencia de quiénes y qué hicieron tanto por este país”, reflexiona Gutiérrez.

En la misma línea, la construcción de las ciudades y el diseño urbano latinoamericano ha cambiado y aparece el fenómeno de la hiperconectividad, con su impacto en la hiperinformación y, a su vez, en la falta de relaciones cara a cara. “Creo que eso va a generar cambios también muy profundos en las propias estructuras sociales”, sostiene Llano.

De igual forma, en un mundo donde los fenómenos son pendulares, también se debe observar el traslado de los ejes de poder. “Esto tiene que ver con regresar a las personas, al poder que tenemos y a nuestra participación como ciudadanos, pero no solo al derecho y a la posibilidad de hacerlo, sino a la responsabilidad que implica; al poder que las mujeres hoy pueden tener, las posibilidades que hoy tenemos como mujeres”, agrega Llano.

“Por eso yo creo que es tan importante la responsabilidad personal con todo lo que se diga, porque lo que tú estás diciendo y por lo que tú estás alegando y por lo que tú estás defendiendo como persona, tienes que tener una responsabilidad muy grande porque no estás representando un partido político, no estás representando un género, estás representándote a ti mismo”, dice Gutiérrez.

“El conocimiento es libertad, nos permite formar nuestras propias opiniones, nuestro propio criterio y, nuestra forma de ver el mundo, nos permite habilitar el conectarnos con los demás”, concluyó Juana Francisca Llano.

La serie de charlas completa, la información sobre tendencias en el mundo y el documento que sustenta la serie “Asegúrate de vivir” de la compañía Seguros SURA, se puede ver aquí.