“Somos mejores cuando somos más diversos. Así de simple”, reflexionó el CEO de Cargill David MacLennan en 2016, cuando la empresa se unió al movimiento Paradigma por la Paridad con el compromiso de la paridad de género en todos los niveles de liderazgo corporativo para 2030. Esos esfuerzos fueron reconocidos por la organización Great Place To Work, que eligió a la sede argentina del gigante de la industria agrícola como uno de “Los mejores lugares para trabajar para mujeres”.
“Trabajamos en la creación de conciencia desde lo conceptual, desde lo simple, con la idea de romper sesgos inconscientes para la inclusión de mujeres en puestos que siempre habían sido ocupados por los hombres”, explicó Cecilia Fabris, gerente de Recursos Humanos y Sponsor del pilar de Género de Cargill Argentina, sobre el trayecto de la compañía para llegar a 2022 como una de las mejores para que las mujeres desarrollen su carrera profesional.
La empresa explica que se definieron cinco pilares para su transformación: minimizar o eliminar los sesgos inconscientes, incrementar el número de mujeres en posiciones de liderazgo, medir los objetivos en todos los niveles y comunicar los resultados, basar el progreso de la carrera en el rendimiento e identificar mujeres con potencial y darles la posibilidad de desarrollo.
De esa propuesta nació MOS (Mujeres Operando en Sudamérica) que, junto con la Red de Paridad de Género, marcaron el punto de partida. En paralelo, la empresa seguía creando conciencia en sus líderes, empleados y en las comunidades. “Implementamos medidas concretas con mucho orgullo y fue motivo de celebración cuando recibimos a nuestra primera mujer en la Plataforma Volcable de camiones, un ejemplo de cómo los cambios siguieron activos”, comentó Fabris.
Para alcanzar las metas de cara al 2030, la empresa hizo varios esfuerzos para garantizar que las instalaciones sean inclusivas, como adecuar más del 90% de las barreras físicas identificadas a través de análisis ergonómicos y sumar diferentes componentes específicos para mujeres: baños, elementos de protección personal, uniformes para mujeres en etapa de embarazos, área de lactancia, estacionamiento para embarazadas y vestuarios.
Además, Cargill incrementó entre 12 y 15% la contratación de mujeres desde el inicio de la red y llevó la participación de mujeres en tareas operativas de elevadores de granos de casi 0% en 2018 a alrededor de 30% en puestos eventuales y 48% en puertos y plantas actualmente. Todo esto sumado a la formación de una red de mujeres comerciales y agronegocios, evidencian el nivel de compromiso con la transformación que tuvo la empresa.
El Presidente de Cargill Argentina, Fernando Cozzi, señala que en empresas globales el posicionamiento, la dirección estratégica, las prioridades, son fijadas en la cabeza del liderazgo corporativo. “Sin dudas queda mucho por recorrer, pero también podemos sentir orgullo por los pasos que ya hemos dado”, declaró.
“En Cargill las personas están en primer lugar y nuestro principal objetivo es brindar a todos nuestros empleados un trato justo y equitativo donde tanto hombres como mujeres tengan acceso a las mismas oportunidades para desarrollar su máximo potencial. Hoy nos permitimos celebrar con mucho orgullo este reconocimiento”, comentó Fabris. “Sabemos que a partir de mañana seguiremos trabajando para que Cargill continúe siendo elegida por más mujeres como una de las mejores empresas para trabajar en Argentina”.