Cuáles son los mejores consejos para potenciar el bienestar financiero

Invitado como embajador por Zurich, Claudio Zuchovicki detalla los mejores consejos para administrar los ingresos y gastos, y así, lograr una planificación correcta

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(Crédito: prensa Zurich Argentina)
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La Organización Mundial de la Salud (OMS) define a la salud como un estado de completo bienestar físico, mental y social. Hoy, el concepto también se relaciona con el bienestar holístico, que refiere al ser humano en todos los aspectos de su entorno. En otras palabras, consiste en atender a la persona en su totalidad, satisfaciendo sus necesidades físicas, mentales, espirituales, financieras y sociales.

Entendiendo la importancia de la salud integral y su prevención, Zurich lanza “LiveWell”, una aplicación sin costo adicional que tiene como objetivo brindar un beneficio extra a sus clientes de seguros de vida (*), para acompañarlos en la toma de decisiones vinculadas a un estilo de vida positivo y saludable. Una propuesta que combina: innovación, tecnología y sustentabilidad.

(Crédito: prensa Zurich Argentina)
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Sumado a esto, la compañía de seguros invitó a un grupo de profesionales de distintas áreas para que puedan brindar diferentes recomendaciones y consejos sobre bienestar físico, mental, financiero y social. En ese sentido, Claudio Zuchovicki, analista financiero y director de Finanzas de la UADE, detalla las principales claves para potenciar el bienestar financiero.

Cómo mejorar la salud financiera

La preocupación por las finanzas personales puede ser un factor de estrés. Las deudas, los gastos no controlados o imprevistos y la poca capacidad de ahorro pueden influir en el bienestar financiero, según describe Zuchovicki. “Y como toda situación estresante, puede desencadenar ansiedad, angustia, incluso insomnio”, asegura el especialista.

Muchas personas pueden sentir que no conocen sobre finanzas, y moverse en un escenario desconocido, puede generar incertidumbre, más cuando se trata de planificar el futuro y la seguridad económica. Administrar bien los ingresos y los gastos, es decir, llevar una buena planificación financiera, puede ser una tarea difícil, pero no imposible de lograr.

“Educación financiera no es ir a la universidad, es observar dónde se están moviendo los negocios, y a partir de ahí, elegir la herramienta que me va a ayudar. Al adquirir conocimientos y habilidades financieras estaremos dando un gran paso para mantenernos lejos del estrés”, afirma Zuchovicki.

(Crédito: prensa Zurich Argentina)
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El primer consejo del analista es considerar el ahorro como un gasto fijo obligatorio. “Son muchas las personas que sostienen: ‘Ahora no puedo ahorrar, porque tengo muchos gastos. Cuando mejore mi situación financiera, lo haré’. Están convencidas de que ahorrarán algún día. Pero no lo hacen nunca. Esta estrategia no funciona”, explica Zuchovicki. Para cambiar dicha situación, resulta importante dar vuelta la premisa de “ahorrar lo que queda después de gastar” por la de “gastar lo que queda después de ahorrar”.

Para lograrlo, existen dos estrategias esenciales:

1) Adquirir el hábito de destinar a principio de mes un porcentaje de los ingresos -por ejemplo: un 10%- al ahorro, antes de gastarlo en otros conceptos. Este ahorro se puede considerar como una “cuota futuro”, como un gasto fijo obligatorio dentro del presupuesto, tal como ocupa la cuota del cable, el teléfono o el gimnasio.

2) Para que el ahorro se convierta en un hábito es importante que el dinero se debite automáticamente cada mes. “Es una buena medida para que no entre en juego la fuerza de voluntad, o los autoengaños: ‘Si no lo hago este mes, el próximo será el doble’. Debitando tu “cuota futuro” tendrás tu dinero ahorrado todos los meses”, asegura el especialista.

Recomendaciones para que los ahorros rindan

Uno de los interrogantes principales es qué hacer con el dinero ahorrado. Pese a que el ahorro y la inversión están fuertemente relacionados, se trata de conceptos muy diferentes. Si se tiene una determinada cantidad de dinero y se decide ahorrar, en vez de invertir, se está dejando de ganar dinero, pues se renuncia a una suma extra que tendría la inversión.

A largo plazo el interés es más importante que el capital. Cuando invertimos, aceptamos cierto riesgo a cambio de rentabilidad sobre ese dinero. Es decir, la posibilidad de sufrir pérdidas en el valor de los activos. El miedo a la inversión nace por el desconocimiento”, indica el analista.

(Crédito: prensa Zurich Argentina)
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Y señala: “Hay que tener en cuenta que el riesgo no está en lo que se compra (moneda, acciones, bonos, fondos de inversión, etcétera), sino en cuánto se compra. Por eso es importante diversificar e invertir en más de un instrumento financiero, con la intención de obtener los rendimientos que ofrece cada uno”.

Por ejemplo, si se ahorra 100 dólares por mes, en un año serán 1200 dólares; y en 20 años, 24 mil dólares. Si esos dólares se capitalizan en 4% anual -aproximadamente-, en 20 años serán 52 mil dólares.

infografia

Cómo conseguir un portafolio diversificado

Una opción a la hora de invertir es un fondo de inversión, un fondo mutuo o seguros de vida con ahorro y capitalización. Los primeros son herramientas de inversión colectiva, que consisten en reunir fondos de distintas personas para invertirlos en diferentes instrumentos financieros. Su responsabilidad se delega a una sociedad administradora que puede ser un banco, una compañía de seguros o una empresa de servicios de inversión.

Por otra parte, los seguros de vida con capitalización son instrumentos de ahorro a largo plazo. Al contratar el seguro, según el objetivo individual, se definen los aportes (primas), el plazo y la proyección del capital objetivo. Esto luego puede variar según las necesidades.

A continuación, cinco ventajas de los Fondos Comunes de Inversión (FCI):

1) Se accede a una cartera de valores muy amplia que, en muchos casos, no estaría al alcance si se invirtiera a título individual. No se requieren grandes sumas de dinero para formar parte de ellos.

2) Son altamente diversificados: permiten distribuir el riesgo entre diferentes productos financieros (acciones, bonos, índices, entre otros) de empresas y sectores económicos.

3) Poseen liquidez: el rescate de la inversión se puede hacer en cualquier momento, disponiendo del dinero en un breve plazo.

4) Están manejados por profesionales expertos en el tema, quienes se ocupan de tomar las decisiones de inversión buscando las mejores alternativas de rentabilidad de acuerdo al tipo de FCI.

5) Existen diferentes opciones de fondos, acorde al perfil de cada inversor. Los fondos más agresivos invierten en instrumentos de renta variable: acciones de empresas de primera línea, CEDEAR’s (instrumento que permite invertir en pesos en empresas del exterior), índices y activos de renta variable. Mientras tanto, los más conservadores pueden estar constituidos por títulos de deuda pública o privada, depósitos a la vista y plazos fijos y/o derivados.

“Aún en inversiones a largo plazo, es importante ser flexible. Nunca enamorarse de la herramienta. Periódicamente sentarse a analizar el portafolio, así como se ocupa una hora con un cliente, una hora con un proveedor. Leer las noticias. ¿Qué cambió en este tiempo? ¿Estoy seguro con mis activos? ¿Los volvería a comprar? Si la respuesta es “no”, es el momento de cambiar”, aclara Zuchovicki.

Y concluye: “Es importante saber perder, saber cuándo decir no. No caer en la testarudez y guardarse un activo que ya no sube más”.

Las distintas recomendaciones de Zuchovicki se encuentran disponibles en la cuenta oficial de Zurich en Instagram. Además, Daniel Tangona, Dafne Schilling, Mona Gallosi y Cynthia Martínez Wagner ofrecen consejos sobre salud física, mental y social.

(*) Se deja expresa constancia que podrán acceder a los beneficios de la aplicación LiveWell únicamente los tomadores y asegurados de pólizas de seguro de vida emitidas por Zurich International Life Limited Sucursal Argentina, siempre que las mismas se encuentren vigentes.

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