El ministro Iván Eskildsen habla sobre la recuperación del turismo en Panamá y sus miles de opciones

Más allá del Canal de Panamá, el país que une el Pacífico con el Caribe nuevamente puede ser recorrido a través de experiencias únicas en la naturaleza y para toda la familia

Guardar
Gamboa (Crédito: Prensa ATP)
Gamboa (Crédito: Prensa ATP)

La pandemia tuvo un impacto global y Panamá no fue la excepción, fue necesario el cierre de fronteras y la suspensión de servicios para disminuir el índice de contagios. No obstante, el turismo panameño se fortaleció gracias a un eficiente sistema de vacunación, a la aplicación de medidas de bioseguridad y al bajo índice de contagios. Paralelamente y en alianza con el sector privado, el Estado panameño ha ejecutado estrategias de reactivación económica que permitieron un cierre del 2021 positivo para el sector.

En esa línea, en el último trimestre se inauguró el Panama Convention Center en acuerdo con la Florida Caribbean Cruise Association, lo que favorece el turismo de convenciones. Asimismo, se realizaron las primeras pruebas de atraque en el puerto de Cruceros de Amador, ubicado en el sector Pacífico, posicionando al país como un destino con puertos tanto en el Caribe, como en el Pacífico.

(Crédito: Prensa ATP)
(Crédito: Prensa ATP)

“En diciembre hemos recibido un total de 10 vuelos chárter provenientes de Canadá, aerolíneas internacionales como Delta inauguraron tres nuevas rutas hacia el país y en febrero del 2022 Panamá será sede del Adventure Latin America que, por primera vez, se realizará en Centroamérica. Estas acciones dejan por sentado que somos un destino seguro y con un patrimonio natural y cultural donde el visitante puede vivir experiencias de turismo sostenible”, sostiene el ministro de Turismo de Panamá, Iván Eskildsen.

El impacto del turismo en la economía panameña fue y sigue siendo muy importante. “Antes de la pandemia el sector generaba alrededor de 5 mil millones de dólares en divisas, 40 mil empleos directos y 100 mil indirectos. Por eso, durante estos dos años de pandemia hemos realizado un acercamiento con las comunidades de alto valor cultural y natural para la creación de un turismo sostenible de modo que esta industria deje un impacto positivo cada vez mayor en más panameños, a la vez que se mejoran los servicios, productos y experiencias al turista”, agrega el ministro Eskildsen.

Cayo Coral (Crédito: Prensa ATP)
Cayo Coral (Crédito: Prensa ATP)

La primera referencia internacional del país centroamericano es, sin dudas, el famoso Canal de Panamá. No obstante, en el extenso puente entre el océano Pacífico y el mar Caribe que constituye Panamá, hay diez provincias donde se combinan la belleza natural con la organización urbana, garantizando así una diversidad casi infinita de vivencias placenteras durante todo el año, para cualquier edad y para cualquier gusto.

Si el punto de llegada es la capital del país, el turista se encuentra con lugares icónicos como el biomuseo diseñado por el mundialmente famoso arquitecto Frank Gehry. Es el sitio ideal para conocer Panamá desde sus orígenes geológicos, su evolución e importancia como istmo en la conectividad de América del Norte y América del Sur.

Isla Bolaños (Crédito: Prensa ATP)
Isla Bolaños (Crédito: Prensa ATP)

Por supuesto que allí también es imprescindible conocer el logro de la ingeniería mundial que es el Canal de Panamá, la primera ruta transcontinental de América que permite el tráfico de buques y conectividad marítima entre Europa y Asia. Los visitantes pueden experimentar el proceso de las esclusas igual que los barcos que transitan entre océanos.

En el centro histórico de la Ciudad de Panamá se debe pasar por el Casco Antiguo, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, que ofrece arquitectura, gastronomía, vida nocturna, plazas, iglesias coloniales y edificios públicos. En esa línea, también se puede visitar el conjunto monumental histórico de Panamá Viejo, con las ruinas del primer asentamiento europeo en la costa del Pacífico de las Américas, así como rastros de los primeros habitantes del istmo.

Playa Polo (Crédito: Prensa ATP)
Playa Polo (Crédito: Prensa ATP)

Allí mismo está la Calzada de Amador, un corredor marino que conecta las islas de Naos, Culebra, Perico y flamenco con el continente, con un extraordinario paisaje marino, ideal para caminar, andar en bicicleta y quitar el estrés. Y si de islas se trata, la de Barro Colorado contiene el bosque tropical más estudiado del mundo, ya que es la meca de los biólogos tropicales.

Colores, sabores y sonidos para disfrutar de un Panamá único

Una manera única en el mundo de unir dos océanos es hacerlo con el Ferrocarril de Panamá, que sigue una ruta similar a la del tren original que transportó a los buscadores de oro en el siglo XIX. Durante una hora, atraviesa la magnífica vía fluvial del famoso Canal flanqueado por los exuberantes bosques tropicales del Parque Nacional de Soberanía para unir el Pacífico con el Caribe.

Por su parte, el Panama Rainforest Discovery Center, un proyecto de ecoturismo y educación ambiental, permite a los visitantes caminar por los senderos y observar colibríes y otras especies. Asimismo, se podrá avistar ballenas jorobadas en la Bahía de Panamá y en el Archipiélago de las Perlas cuando migran hacia el norte.

Isla Bastimentos (Crédito: Prensa ATP)
Isla Bastimentos (Crédito: Prensa ATP)

Panamá es un país con múltiples actividades familiares en todos sus destinos. Las opciones de turismo de aventura y turismo ecológico son muy amplias, algunas de ellas se pueden enumerar así:

Reserva natural Cerro Ancón: subir hasta la cima disfrutando de los paisajes, la naturaleza y la fauna, y aprovechar los miradores hacia el Canal de Panamá y la ciudad de Panamá.

Parques nacionales Camino de Cruces, de Campana y Volcán Barú: hacer senderismo, observación de especies y miradores de paisajes.

Parque nacional Chagres: navegar por los rápidos y las cascadas, caminar por los senderos observando especies.

Parque nacional Santa Fe: además de las actividades que se pueden hacer en los otros parques, en este se puede atravesar la cordillera del Mariato, desde el océano Pacífico, hasta Calovebora, en el mar Caribe.

Parque Nacional Golfo de Chiriquí: lugar ideal para hacer snorkel y buceo de observación de especies, como ballenas y delfines.

Tradiciones de una cultura llena
Tradiciones de una cultura llena de matices (Crédito: Prensa ATP)

Finalmente, las alternativas para hacer turismo cultural o histórico son imperdibles en un país donde no sólo la naturaleza ha marcado su evolución. A ellos se suman las mejores opciones de turismo gastronómico con sus platos típicos que se nutren de lo autóctono y de las diversas costumbres que han traído los inmigrantes para hacer crecer este hermoso país centroamericano.

Guardar