La agricultura, especialmente la referida a la producción de granos, ha emprendido hace ya décadas un proceso de profesionalización, tecnificación y desarrollo de nuevas tecnologías que ha llevado a la actividad a un nivel de eficientización nunca antes visto. Es por eso que el diseño de una hoja de ruta para los cultivos y la adopción correcta de las herramientas se vuelve la gran diferencia entre tener una campaña exitosa o pagar las consecuencias de los errores en la producción.
Demasiadas son estas variables que se deben tener en cuenta: la genética, el paquete tecnológico utilizado, la planificación para hacerle frente al clima y la maquinaria empleada, entre otras. Este último punto es el principal a la hora de asegurarse la eficiencia en las labores y llevar al máximo la productividad de un campo. Así, la industria metalmecánica dedicada al agro se posiciona como una de las claves para el productor y el desarrollo tecnológico y la investigación para maximizar sus funciones lleva a las empresas a ofrecer maquinaria cada vez más innovadora.
Es por esto que desde Case IH llevaron estos conceptos más allá y lanzaron al mercado la serie de cosechadoras Axial-Flow 250, las primeras con inteligencia artificial que posee la capacidad de automatizar el 86% de sus procesos para encontrar el punto óptimo y entregar más productividad, mejor calidad de grano y menos pérdidas. De hecho, es tal el grado de eficiencia que alcanza esta nueva trilladora en sus cuatro opciones de recolección que otorga al agricultor un 15% más de productividad.
La flamante serie Axial-Flow 250, que cuenta con los modelos 7250, 8250 y 9250, los cuales son producidos en la fábrica de Case IH en la localidad cordobesa de Ferreira, tienen hasta 55 caballos de fuerza más que los modelos anteriores, nueva transmisión automática, una cabina más confortable y una mayor eficiencia con la tecnología Automation, aunque lo más importante y destacable de esta cosechadora es el sistema de inteligencia artificial que posee.
En diálogo con Infobae, el director de Marketing de Producto de Case IH para América Latina, Rodrigo Alandia, contó que esta innovación en la cosechadora “nace con el principal objetivo de aumentar la productividad de la máquina y, principalmente, que consiga entregar, a parte de la productividad, menor pérdida de granos y mayor calidad de los mismos”.
Según explicó Alandia, el proceso de cosecha en un mismo lote presenta una cantidad de variables que genera que “humanamente sea imposible” tener a punto todos los sistemas de regulados o adecuados de tal forma que consiga “perfección en la cosecha” y es por esto que el sistema de inteligencia artificial AFS Harvest Command Automation cuenta con 16 sensores distribuidos en los diferentes sistemas de la máquina que ajustan el desempeño de la cosechadora para que “pueda entregar todo el potencial posible”.
Así, “el 86% de las operaciones de la máquina están automatizadas y eso genera que pueda tener hasta un 15% más de productividad y hace que el operador se preocupe solo de que el tanque de granos esté lleno, dirigirse hacia la tolva y descargar. De todo lo demás se encarga la Axion-Flow 250. Además de la inteligencia artificial, está el concepto del ‘machine learning’ también incluido. Es una máquina que conforme va cosechando, va aprendiendo y esa infinidad de datos generados a cada minuto los utiliza para ir adecuándose cada vez mejor”, destacó Alianda.
Estrategias
Como se dijo anteriormente, la cosechadora de la estadounidense Case HI tiene la particularidad de contar con inteligencia artificial, dotando a la máquina del poder para adecuarse a las diferentes estrategias de cosecha que el productor quiera llevar a cabo. Además trabajan bajo el concepto de machine learning, por lo que básicamente aprenden para mejorar su trabajo.
Todos estos procesos de automatización se pueden dividir en cuatro estrategias de cosecha, según las necesidades del productor o las particularidades de los territorios a trabajar. Estas cuatros opciones son: calidad de granos, rendimiento máximo, rendimiento fijo o desempeño balanceado.
En el caso de la trilla con la modalidad de calidad de grano es una estrategia utilizada por los productores de semillas, por lo que la máquina adecúa su velocidad de cosecha, el ajuste de las arandas, la rotaciones del rotor y la velocidad del ventilador, entre otras cosas. O sea, “ajusta las variables del sistema industrial para conseguir el objetivo”, detalló Alianda.
Después viene la modalidad rendimiento máximo, la cual es ideal para aquellos productores que están con los tiempos cortos de cosecha y necesitan explorar el máximo rendimiento. A partir de esto, la cosechadora andará a la mayor velocidad posible, “manteniendo los parámetros de pérdida y calidades a un nivel a un aceptable”.
La tercera estrategia que tiene como opción esta cosechadora inteligente es la del rendimiento fijo, la cual trabaja con una capacidad de campo operacional estable produciendo un número equis de hectárea por hora de manera estable, mientras que la cuarta corresponde al desempeño balanceado, con todos los parámetros en valores promedio.