9 de cada 10 distracciones al volante tienen relación con el teléfono celular. El 81,2% de los argentinos conductores de automóviles reconocen que se distraen cuando manejan y el 94% de ellos apunta al celular como principal causa de distracción. Estas son algunas de las conclusiones del estudio “Argentinos al volante, distracciones y uso del celular”, elaborado por Gonvarri y Movistar.
El Smartphone se llama así por la amplitud de funciones que ofrece, muchas más que las de un clásico teléfono e incluso más que algunas computadoras portátiles. Sin embargo, nadie se imagina conducir mientras está usando una notebook. No obstante, la mayoría de los conductores tiene la percepción de que usar el móvil mientras maneja implica riesgos mínimos.
Las estadísticas de estudios de Estados Unidos revelan que un uso poco responsable del móvil al volante causa 1,6 millones de accidentes de coche al año. Uno de cada cuatro accidentes de tráfico tiene como protagonista a un conductor que viaja escribiendo mensajes en el teléfono. Esta cifra espeluznante demuestra que escribir un mensaje con el celular mientras se maneja es seis veces más peligroso que conducir alcoholizado.
Según estos especialistas, la ansiedad de leer y responder un mensaje en el momento de recibirlo hace que las personas pierdan la noción del tiempo. Desbloquear el teléfono y leer un mensaje corto insume el mismo tiempo que necesita un auto para cruzar una cancha de fútbol a 60 kilómetros por hora. El informe también indica que las principales víctimas de este hábito son los jóvenes. En Estados Unidos, 11 adolescentes mueren cada día por usar el teléfono mientras conducen.
Sin embargo, la tecnología también puede ayudar a disminuir la peligrosidad del uso de estos dispositivos mientras se maneja. Además de la prudencia y la responsabilidad, actualmente existen diversas herramientas que ofrecen alternativas a la manera tradicional y manual del uso del teléfono, permitiendo gestionarlo a través de la voz.
Una recomendación es utilizar alguna aplicación que impida atender las llamadas cuando se esté manejando. También se puede programar el celular para que envíe automáticamente un mensaje al que llama mientras se encuentre manejando.
Por otra parte, y teniendo en cuenta que el móvil se usa cada vez más como GPS y con aplicaciones que informan sobre el estado del tránsito, es muy importante verificar esta información con el vehículo estacionado o incluso antes de iniciar el recorrido. Aun así, si en caso de emergencia es necesario realizar una llamada o cambiar de ruta, se puede usar el comando de voz del celular. La mayoría de los aparatos ofrece la tecnología que permite accionar funciones sin necesitar teclear o digitar en la pantalla.
En la mayoría de los países, las multas por usar el Smartphone al conducir son cada vez más caras, lo que debería resultar una amenaza desalentadora para conductores imprudentes. Pero probablemente, tener paciencia sea la mejor recomendación ya que es muy probable que el mensaje que llegó mientras se está manejando no cambiará la vida de nadie, pero el chequearlo sí puede hacerlo, además de causar graves perjuicios a terceros.
El estudio “Argentinos al volante, distracciones y uso del celular” también indica que lo que motiva a los argentinos a manejar de forma más responsable es la responsabilidad de llevar acompañantes (83%), pensar en su familia (81%) y el miedo a tener un accidente (80%).
La compañía Movistar junto a las ONG Faro Digital y Creando Conciencia llevan adelante una iniciativa para que las personas tomen conciencia sobre el impacto que puede tener sus vidas y las de otros lo que se hace con el celular. La campaña “Conectemos con responsabilidad”, a través sus primeras piezas: “Choque” y “Dominó”, invitan a reflexionar que hasta algo tan cotidiano como contestar un mensaje o reenviar una foto, también involucra a los demás y sus consecuencias pueden ser irreversibles.
Además de la responsabilidad que recae en los usuarios, Movistar como empresa de telecomunicaciones entiende la incidencia que tiene sobre estas temáticas, y desde hace años trabaja en conjunto con diferentes ONG tanto en la capacitación a través de proyectos educativos, sociales y culturales adaptados al mundo digital, como en una comunicación que concientice y construya basada en los valores de época.