En los últimos meses, el uso de los test de antígenos se multiplicó en diferentes países del mundo. En Europa y Estados Unidos, por ejemplo, son utilizados como autotest y para referencia no sólo de los pacientes con síntomas de COVID-19, sino también para contactos estrechos, con el fin de mantener las “burbujas” en empresas, clubes y colegios. Es una manera efectiva para cuidarse y cuidar a los demás en los ámbitos personales y laborales.
Junto con la vacunación, el testeo masivo para la detección temprana del virus es fundamental para accionar en la lucha contra la enfermedad y evitar así, el contagio. En Argentina se encuentra disponible Immunobio, un test rápido -distribuido por Grimberg Dentales- aprobado para su venta en farmacias por la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (ANMAT). El test fue desarrollado por el laboratorio Hangzhou Immuno Biotech CO Ltd y permite conocer el resultado en aproximadamente 15 minutos.
El mismo está compuesto por una bolsa de aluminio con cassette de prueba y desecante, tampón de ensayo (buffer), hisopo estéril y tubo de recolección de muestras e instrucciones de uso. Estas consisten en pasar el hisopo por la mucosa (ya sea por la nariz o por la boca). Luego se coloca dentro de la pipeta y se debe mover un poco para que se impregne. Se tapa la pipeta con una pequeña tapa que es un gotero.
Finalmente, se debe tomar la placa -que tiene dos orificios- y colocar tres gotas del reactivo en el orificio redondo. Una vez concluido este proceso, es necesario esperar unos minutos para luego realizar la lectura del resultado en el orificio rectangular que contiene dos líneas: una con la letra “C” (Control) y la otra con letra “T” (Testing).
El testeo puede arrojar tres tipos de respuesta: positivo, negativo o que debe repetirse. “Todos los test (tanto PCR como tests rápidos de antígenos) tienen un porcentaje de posibilidad de falso negativo, teniendo síntomas o no. Este test en particular tiene una especificidad del 98% y sensibilidad del 96%. El protocolo establece que se deben realizar testeos siete días después del contacto para que esto se reduzca aún más. Igualmente, como con todos los tipos de testeo, es importante seguir los protocolos correspondientes. En caso de tener dudas o síntomas, pueden repetirse los testeos”, afirma Leticia Nolvi Fernández, Directora Técnica de farmacia La Sante (MN12085).
La farmacéutica aclara que el test puede ser realizado a cualquier persona que lo requiera por presentar síntomas, por precaución o haber tenido contacto estrecho. “Es totalmente seguro y no presenta ningún tipo de contraindicación. Siempre debe ser realizado por un profesional idóneo”, agrega.
Además aclara que no se necesita una receta médica para comprarlo ya que el test es de venta libre y se puede adquirir en farmacias y en las tiendas online y su precio público es de $ 2.200, aproximadamente.
Si bien el test está aprobado para la venta libre en todo el país, aún no fue habilitada su comercialización en Córdoba, Mendoza y provincia de Buenos Aires. “Lamentablemente en algunas provincias han prohibido su venta en farmacias a pesar de estar aprobado por la ANMAT. Esto obliga a sus habitantes a testearse en instituciones de salud que son privadas, siendo su costo mayor o a comprar el test en las tiendas online de las farmacias habilitadas”, explica.
“La gente está muy preocupada ante la alta cantidad de contagios y quiere cuidarse y cuidar a los suyos. Muchas veces lo adquieren en forma preventiva antes de ir a visitar a un familiar y la rapidez del resultado es una gran ventaja. Es mucho más económico que realizarse un test PCR y si consideramos que generalmente hablamos de un grupo familiar, este costo se incrementa notablemente”, concluye.