En los últimos años surgieron nuevos productos y procedimientos no invasivos que ayudan a devolver a la piel, la firmeza que esta pierde por el paso del tiempo. Algunos de ellos se focalizan en zonas faciales específicas en las que se busca la mayor o menor contracción muscular, la restauración del volumen y del contorno facial y la bioestimulación del colágeno. Estos procedimientos no quirúrgicos utilizan, entre otros, neuromoduladores, rellenos dérmicos de ácido hialurónico y bioestimuladores de hidroxiapatita de calcio.
“Se trata siempre de aplicaciones sencillas, que se realizan en consultorio, con una rápida reincorporación a la vida diaria. Así, vamos respondiendo a las necesidades de cada paciente en forma progresiva, buscando resultados armoniosos”, comenta la Dra. Romina Mijalenko, médica dermatóloga (MN 99.860).
Para el Dr. Esteban Morrone, especialista en cirugía plástica y reparadora (MN 121.556) la capacidad de reparación de la piel disminuye con la edad y, como consecuencia de esta circunstancia, se produce un envejecimiento cutáneo que está dado por diversos factores. Éstos son dañinos y contribuyen de modo decisivo en la calidad de la piel del rostro, como los rayos solares o el tabaquismo, entre otros El resultado es la aparición de líneas o pliegues, flacidez de la musculatura de la cara, así como una pérdida en el volumen y en la definición del contorno del rostro.
Por suerte, para solucionar estas imperfecciones existe el empleo de la toxina botulínica y rellenos (fillers) que brindan una importante y efectiva alternativa como tratamiento estético antiedad no quirúrgico.
“En el consultorio de medicina estética, en primer plano están los deseos del paciente por realizar una modificación en su persona, o bien en su imagen. Sabemos que la piel tiene una gran importancia desde el punto de vista social. Por eso, nuestro objetivo no es establecer el diagnóstico de una patología como en la consulta clásica, sino hacer coincidir el deseo del paciente con las posibilidades reales de la intervención profesional para lograr los resultados deseados”, aclara Morrone.
Diferentes tratamientos para mejorar la piel
La toxina botulínica es utilizada para el tratamiento o prevención de las arrugas y líneas de expresión, que al ser inyectada directamente en el músculo responsable de la formación de la arruga, actúa como un bloqueador neuromuscular. Esta toxina impide la transmisión de estímulos de las neuronas que producen el movimiento de los músculos faciales, inhibiendo la contracción muscular, lo que provoca su relajamiento temporario y brinda al rostro una apariencia más rejuvenecida y agradable.
Con el tiempo, el propio organismo restablece su natural vía de transmisión, por lo cual, el resultado es temporal. Hay diferentes nombres comerciales de la toxina botulínica, los cuales se aplican de igual manera y similar dilución. Sin embargo, Xeomin es una forma pura de neurotoxina sin aditivos y esto es lo que marca la gran diferencia con otros productos que tienen proteínas activas e inactivas.
“Con Xeomin se obtienen excelentes resultados por su fórmula química pura. Los efectos aparecen de 3-4 días luego de la aplicación y en aproximadamente dos semanas se observará el resultado completo, que puede durar de 4 a 6 meses, dependiendo de la fuerza muscular del área tratada y del grado de envejecimiento, entre otros factores”, agrega el doctor.
Otro tratamiento indicado para quienes desean retrasar el envejecimiento y restablecer el brillo y armonía de la piel, son los rellenos. “Dependiendo de la región a tratar, hay diversas gamas de productos con diferentes densidades; en la actualidad usamos el ácido hialurónico y la hidroxiapatita de calcio, que son los más seguros y modernos”.
El relleno a base de ácido hialurónico como el Belotero, ayuda a retrasar el envejecimiento, al reponer la pérdida de volumen del rostro, redefiniendo los contornos faciales y aumentando el volumen de los labios. Además, mejora la hidratación de la piel restaurando su elasticidad. El ácido hialurónico es una de las herramientas más eficientes contra las señales de la edad, por tratarse de una sustancia que ya es producida por el cuerpo humano. Los resultados en este caso permanecen hasta los 12 meses.
El Radiesse, a base de hidroxiapatita de calcio, es un relleno dérmico utilizado para todas las regiones tanto corporales como faciales. Las principales regiones de aplicación son el rostro, cuello, manos, brazos, abdomen, glúteos y muslos.
Cabe señalar que, además, es un bioestimulador dérmico que activa las células encargadas de producir el colágeno, el ácido hialurónico y la elastina. Este es un tratamiento de gran eficacia para la recuperación de la tonicidad, elasticidad y belleza natural de la piel. En este caso, los resultados permanecen de 18 a 24 meses.
Diversos tratamientos para revitalizar la piel y lograr ese aspecto tan deseado. Es por eso que la supervisión de un profesional es clave a la hora de elegir cuál será el mejor método que se adapte a cada necesidad.
“Tenemos muchos recursos disponibles para lograr los mejores resultados, pero eso sólo es posible con la ayuda de un profesional acreditado que utilice productos certificados y de alta calidad. Por eso es importante tratar la belleza con salud y responsabilidad”, concluye el Dr. Morrone.