Construir una vida fuera de tu país es un desafío enorme que implica -ente otras aptitudes- gran capacidad de adaptación, proactividad en la búsqueda de oportunidades, ajuste permanente de expectativas y sensibilidad para encontrar el lugar adecuado para establecer un hogar. Juan Pablo Pistorio e Ivana Palomino llegaron a EEUU luego de un arduo proceso de análisis de la realidad en la que vivían y del futuro en el que querían vivir.
Cuando se dieron cuenta de que deseaban ser parte de una sociedad respetuosa de la norma, con reglas de juego claras y estabilidad económica y jurídica, emprendieron la búsqueda de su lugar en el mundo. Estudiaron sus opciones más allá de los destinos habituales para los latinos como lo son Miami o Los Ángeles. Pusieron en valor su expertise profesional en el mundo del real estate, evaluaron las ciudades en pleno desarrollo y determinaron que era Michigan el estado con mejores perspectivas para instalarse. Los comienzos, como suele suceder en una ciudad nueva, no fueron fáciles. Pero conectar con las personas adecuadas que compartieran los mismos valores y sueños fue clave para avanzar.
En charla con Guillermo Andino, hoy Juan Pablo Pistorio cuenta su experiencia y abre la puerta para que, quienes buscan esa anhelada previsibilidad, puedan alcanzarla aún a la distancia. Él sabe que, para lograr un mayor desarrollo profesional, al trabajo duro se le debe sumar conectar con las personas honestas que tengan objetivos similares, es por eso que su empresa America Investment, cuenta con una serie de profesionales especializados en distintas áreas que garantizan la transparencia del negocio.
En su empresa, Juan Pablo desarrolló un modelo de negocio que responde a las necesidades del mercado y de potenciales inversores. Con el objetivo de acercarles una opción de renta en dólares a los argentinos que buscan un poco de previsibilidad, generó una propuesta que tuvo un enorme crecimiento a pesar de la pandemia COVID-19. Se trata de la posibilidad de comprar propiedades para alquiler en zonas de gran expansión. La ciudad elegida es Detroit, cuna de la industria automotriz que, luego de un largo proceso de crisis, logró recuperarse y hoy se encuentra en pleno crecimiento.
Para quien quiere invertir, el proceso es fácil, transparente y requiere de bajo capital. Desde el primer contacto, el potencial inversor puede monitorear cada paso en la comodidad de su hogar. No se requiere visa alguna para invertir en EEUU y eso facilita los trámites a realizar que son todos virtuales. Por ejemplo, quien disponga de 65.000 dólares puede comprar una propiedad de alrededor de 100 m2 que se traduce en un alquiler (renta) mensual de 850 dólares. Los impuestos y gastos son también bajos, por lo que la ganancia neta alcanza los 550 o 600 dólares. “Por supuesto que el secreto está en saber qué casa comprar y dónde”, expresa Juan Pablo que conoce en detalle el área.
La empresa ofrece dos modelos de negocio. Por un lado, se puede adquirir una propiedad totalmente renovada y alquilada produciendo dinero, con lo cual de inmediato el inversor podrá percibir su renta. O bien se puede elegir una propiedad para refaccionar y ver, a través de la web, todo el proceso de refacciones que la constructora llevará a cabo para dejarla en condiciones.
Ahora bien, una vez adquirido el inmueble, instalado el inquilino y coordinado el cobro del alquiler, existe una opción que resulta clave a la hora de evaluar la tranquilidad del negocio. ¿Cómo resolver el mantenimiento que toda propiedad requiere? La empresa ofrece una garantía de 24 meses ya incluida en el contrato, pero el comprador tiene la posibilidad de extenderla por menos de 42 dólares mensuales, solo 500 dólares por año. De este modo, pintura, cambio de alfombra, o cualquier reparación que fuese necesaria está cubierta.
Los contratos de alquiler suelen ser anuales y, ante el no pago del mismo, la ley prevé -y se cumple- que en menos de 60 días el inquilino sea desalojado. Por lo que se reducen los riesgos de cualquier inconveniente futuro.
En Argentina es difícil -casi utópico- pensar en una inversión de poco capital, bajo riesgo y una renta mensual elevada. Pero, si se identifican profesionales que muestran el camino recorrido, quizás una casa en Detroit sea una gran idea para colocar 65.000 dólares hoy y contar casi de inmediato con esos dólares mensuales necesarios para vivir.
“Uno puede mudarse físicamente o puede mudar su economía”, afirma Juan Pablo, quien sabe que -detrás de cualquier inversión- siempre hay una persona cuyo sueño es lograr algo más de tranquilidad.