Historias sobre por qué en Pascua se come la famosa rosca hay muchas, tantas como los sabores que cada pastelero decide incorporarle. ¿Cuál será la verdadera? Eso es difícil de saberlo, pero nada mejor que conocer cada una de ellas con una abundante porción en una mano y una taza de chocolate caliente en la otra.
Si bien algunos adjudican la tradición como agradecimiento y homenaje a la tierra por su generosidad, otros creen que la historia comenzó por el año 476, en la ciudad italiana de Pavia, cuando un pastelero decidió preparar un postre de pascua como símbolo de paz y amor para ofrecer a un monarca bárbaro que visitó la ciudad.
Más allá de su procedencia, en estas pascuas Pani, un precursor en materia de innovación, propone una rosca diferente, llena de color y sabores únicos. La primera rosca de chocolate y dulce de leche, una opción distinta que viene de la mano de los mejores chocolates, los KitKat de Nestlé.
Es una nueva alternativa para los clásicos huevos y conejitos de pascua. Ahora la rosca está dedicada de lleno a los más golosos. El chocolate finalmente se impuso y logró abrirse paso entre la crema pastelera y la pasta de almendras. Es por eso que Pani se unió con KitKat para lanzar la mejor y más completa rosca de pascuas: RosKat.
En esta Semana Santa no puede faltar la opción chocolatosa de Pani y Kitkat. Una rosca de un kilo, rellena de un delicioso dulce de leche y bañada con chocolate y dulce de leche. Además, para deleite de los amantes de lo dulce, está decorada con los chocolates KitKat®, Dark; KitKat®, Milk; KitKat®, White y KitKat® y Bunny KitKat.
Una rica taza de café, un chocolate humeante y una porción de esta RosKat y grandes y chicos pueden disfrutar en familia de esta fiesta de sabores y sensaciones únicas. Una pascua diferente comienza con la mejor rosca.