Allá por 1813, la Asamblea General Constituyente sancionó una Ley de Fomento Minero con el objetivo de desarrollar explotaciones de recursos naturales tales como minerales, agua, petróleo y carbón. La fecha en la que ocurrió este hecho fue el 7 de mayo y desde ahí, que este día representa el Día de la Minería.
Este año, el contexto de pandemia y aislamiento social, preventivo y obligatorio hace que la actividad se vea modificada parcialmente a pesar de que la minería es una de las actividades que fui incluida por el Gobierno Nacional como actividad esencial para el desarrollo del país. Es así como los mineros, unidos al resto del país en estos tiempos excepcionales, están encontrando la forma para volver al trabajo con más cuidados y para emprender la tarea de recuperación que se tiene por delante.
De regreso de la mano de los protocolos
En la provincia de San Juan la mina Veladero, una operación de Barrick y Shandong Gold, que está entre los principales yacimientos de oro de Argentina, fue una de las primeras empresas en retomar las tareas de manera gradual. Para avanzar, implementó un Plan Preventivo de Control de COVID-19, teniendo como prioridad el cuidado de la salud de los trabajadores y la comunidad, alineando sus medidas con las dictadas por las autoridades de Salud, del Ministerio de Minería y de la Provincia de San Juan.
El trabajo en un sitio remoto a 4 mil metros sobre el nivel del mar y a 370 kilómetros de la ciudad de San Juan, implicó la adopción de medidas muy concretas.
La primera y más importante es el control de salud previo a viajar a la mina que incluye un registro de la temperatura de cada persona, un test de olfato y una declaración jurada de salud. El trabajador recibe un kit de higiene personal con alcohol en gel, barbijo y guantes de nitrilo. El tramo en bus, de unas 6 horas, se hace utilizando sólo el 50% de los asientos y de acuerdo con las normas provinciales con uso de cubrebocas. Al momento la mina funciona sólo con el personal que tiene residencia en la provincia de San Juan.
Al arribar al campamento minero se vuelve a controlar la temperatura con la tecnología de cámaras térmicas. Este control se repetirá en las jornadas de trabajo que son, más habitualmente, de 14 días de trabajo y 14 de descanso.
El lugar donde se hospedan los trabajadores se adaptó rápidamente para poder asignar una persona por habitación. Se abrieron nuevos comedores y se segmentó todo el campamento minero por áreas de trabajo, lo cual reduce notoriamente la interacción entre personas. Tanto en el alojamiento, como talleres, oficinas y vehículos se aplica una constante limpieza y desinfección.
Antes de regresar a casa, cada minero debe pasar por el hospital en el sitio y realizar un control de salud.
Justamente el equipo médico se reforzó y cuenta con los recursos para el manejo y aislamiento de cualquier caso sospechoso con 7 ambulancias, 6 respiradores, 30 camas, 6 desfibriladores, 5 monitores cardiológicos, sumados a 2 ó 3 médicos permanentes, 6 enfermeros y 1 médico radiólogo. En este punto todo se trabaja en permanente coordinación con las autoridades de Salud.
Minería solidaria durante la pandemia
Marcelo Álvarez, director Ejecutivo de Barrick en Argentina, aseguró: “La compañía cree que la pandemia del coronavirus requiere una respuesta conjunta de todos las partes de la industria minera argentina”. Por tal motivo, además de extremar los cuidados para el regreso al trabajo, la empresa desarrolló diferentes alianzas para acompañar a las autoridades nacionales y provinciales en su lucha contra el virus.
Barrick y su socio en la empresa conjunta de Veladero, Shandong Gold Mining, aportaron 157.000 test kits de RT-PCR y RNA, a la vez que CAEM aportó el resto para llegar a 214.000 pruebas a través de sus socios en San Juan, Santa Cruz, Catamarca, Jujuy y Salta. El valor de las pruebas es de 4,1 millones de dólares y serán utilizados en todo el país. Esto incluye una contribución de 2 millones de dólares de Veladero y adicionalmente, Barrick aportó un millón de dólares más a través de CAEM.
“Nuestra cultura es cuidar el bienestar de empleados y comunidades. Además de las amplias medidas preventivas que ya hemos introducido en Veladero, estamos haciendo este reciente aporte al Gobierno para manifestar que llevamos el bienestar de todo Argentina en el corazón”, agregó Álvarez.
Esta acción formó parte de una amplia iniciativa de la compañía para ayudar a combatir la pandemia, que hasta ahora incluyó la provisión de camas, carpas, edificios habitacionales, equipo de protección personal, alimentos, equipo de desinfección, así como el préstamo de su complejo de oficinas en Albardón al Gobierno de San Juan.
Las perspectivas para Veladero
“Estamos frente a un Veladero revitalizado y preparado para un nuevo futuro. Cómo detalló nuestro presidente Mark Bristow en marzo, después de una revisión exhaustiva de su estrategia y plan de negocios la vida de la mina se extenderá al menos a 10 años”, indicó Álvarez.
Desde 2005 Veladero ha aportado unos 9.500 millones de dólares a la economía argentina a través de impuestos, regalías, salarios y pagos a proveedores locales. Además, la empresa estableció un nuevo fondo fiduciario comunitario que, dependiendo de la producción, se espera que genere más de 88 millones de dólares para el desarrollo de la infraestructura local durante la próxima década. De acuerdo con la política de empleo local de la empresa, el 99% de la fuerza laboral es argentina (88,6% de la provincia de San Juan).
Para Marcelo Álvarez en estas circunstancias excepcionales que enfrentamos, la industria minera y Veladero están preparados para contribuir al proceso de unidad y recuperación que Argentina tiene por delante.