Desde el 20 de marzo, la Argentina inició un periodo de aislamiento obligatorio decretado por el presidente Alberto Fernández. La medida está vinculada a la protección y prevención del avance del COVID-19, comúnmente conocido como coronavirus. Sumado a esto, las personas tienen que protegerse a través de un barbijo o tapabocas a la hora de salir de sus hogares, dependiendo del distrito donde residan.
Asimismo, el personal de salud también debe seguir una serie de protocolos y medidas de sanitización en los establecimientos médicos. Con el propósito de garantizar un suministro local oportuno, seguro y de calidad que colabore en la tarea de minimizar los riesgos de contagio del virus, Softys –empresa de productos de higiene y cuidado personal- adquirió una línea de fabricación de barbijos tipo quirúrgico que será instalada en su planta de Zárate, Provincia de Buenos Aires.
La máquina comenzará a funcionar en mayo, ya que será transportada al país por vía aérea con el fin de acelerar el proceso. Dicho dispositivo alcanza una capacidad de producción anual de 18 millones de unidades. Es decir, puede confeccionar 1.5 millones de barbijos al mes. En el contexto de crisis sanitaria que vive el país, la compañía se comprometió a realizar distribución gratuita de los barbijos. La entrega se canalizará con las autoridades nacionales, provinciales y municipales, así como con organizaciones de la sociedad civil.
"Nuestra prioridad es el cuidado de las personas, y antes esta nueva realidad, decidimos innovar de manera urgente para fabricar y proveer gratuitamente durante la emergencia de un artículo que se transformó en primera necesidad, señaló Juan La Selva, Director General de Softys Argentina.
Además, La Selva destacó el rol de la empresa durante el periodo de aislamiento obligatorio. “Trabajar juntos para el cuidado e higiene de toda la sociedad es el propósito que nos guía en nuestro día a día. Por eso, en el actual contexto, queremos contribuir para minimizar la propagación de la pandemia en el país”, explicó.
No obstante, como medida de prevención para los empleados, la empresa reservará una cantidad de barbijos necesaria para el uso y cuidado de sus propios colaboradores y sus familias. Sumado a esto, la compañía tiene en consideración la entrega de este vital insumo de protección a las comunidades vecinas a sus plantas ubicadas en la Provincia de Buenos Aires y en Naschel, San Luis. Luego, la distribución continuará en base a las necesidades que se evalúen oportunamente.
“Los barbijos que se producirán cumplen con los estándares internacionales y el proceso que es altamente automatizado, garantiza cumplir con las máximas exigencias sanitarias”, afirmó Juan La Selva.
Esta nueva inversión por parte de la compañía, que lidera marcas como Elite, Higienol, Sussex, Babysec, Ladysoft y Cotidian, se suma a los esfuerzos que viene realizando de manera conjunta en varios países de Latinoamérica donde opera. Adicionalmente, Softys comenzó a instalar máquinas en Brasil, Perú, Chile y México, lo que sumará un nivel de producción total de 20 millones de barbijos mensuales en la región. La empresa mantendrá su compromiso de distribución gratuita en todos los países mientras dure la actual contingencia sanitaria.