Todo amante de la gastronomía y los buenos vinos sabe que en los puertos se come bien, ya que la clave de los productos de mar está en la frescura. Pietro Sorba viajó hasta La Banquina de Pescadores en el Puerto de Mar del Plata, ese rincón habitado por grúas, y surcado por infinidad de lanchas y barcos de pescadores, que día a día desafían el destino en busca de los premios que el Atlántico les pueda deparar.
Desde La Banquina parten las lanchas costeras, que se distinguen por su color amarillo, todas las madrugadas, regresando durante las primeras horas de la tarde con mariscos, besugos, corvinas, pejerreyes, trillas y anchoítas, entre otros. Los barcos de media altura -color amarillo y rojo-, se alejan más de la costa y permanecen entre cuatro y cinco días navegando, y suelen pescar besugo, salmón, merluza y bonito.
Por su parte, los barcos de altura poseen su casco de color rojo, permanecen navegando entre una y dos semanas, su millaje es limitado y su tripulación es de 10 a 12 personas. Estos se dedican a la pesca de atún, calamar, centolla y merluza.
Pietro logró una vez más adaptarse a las costumbres del lugar, pero con un toque personal gracias a su creatividad y habilidades culinarias. Es un nuevo viaje de sabores y placer de la mano de Álamos y sus vinos, con la intención de develar los secretos que hacen a la cultura gastronómica regional, y poder compartirlo con todos.
Sin dudas es un lugar único, en el cuál Pietro pudo encontrar el momento indicado para preparar una nueva receta federal, a la vista de numerosos lobos marinos y gaviotas.
Anticipando el tiempo lindo, y totalmente inspirado en la inmensidad del mar y en esa gran familia que son los pescadores, preparó todos los ingredientes para elaborar sus brochetas portuarias y una ensalada a base de pulpo, disfrutando un buen vino blanco.
El proceso
Con los langostinos y los chipirones bien lavados, procedió a insertarlos en los pinchos para luego apanarlos. Antes de cortar las papas y las berenjenas, preparó el fuego para grillarlos. Con un buen aceite de oliva, colocó las brochetas y el pulpo en una plancha de hierro bien caliente.
Para maridar las brochettes y la ensalada de mar y sierra, con
papas, berenjenas, olivas negras y alcaparras, Pietro eligió el Álamos Chardonnay 2018, un blanco refrescante y vivaz, elaborado con uvas del Valle de Uco.
De paladar expresivo y paso vibrante, con un carácter frutal austero que realza los sabores y texturas de los langostinos apanados. Un plato ideal para disfrutar al aire libre y anticipar el verano en casa
En este nuevo capítulo de Recetas Federales, Pietro se mueve como en su casa, logrando una vez más un buen maridaje, revelando historias, culturas, personajes, y paisajes argentinos.
Sin dudas, es una experiencia interactiva para que los amantes de la cocina y la buena comida se animen a viajar por el país a través de platos y copas; ya que propone vivir momentos únicos sin salir de casa. Solo hace falta admirar los paisajes de cada video, tener a mano los ingredientes de cada receta, una copa de vino, y animarse a la aventura.
Receta
Mise en place Brocheta:
Picar perejil y tomillo bien chiquito, mezclar con pan rallado.
En un palito de brochette -puede ser de romero-, intercalar langostinos y chipirones, un hilo de aceite de oliva y rebozar en el pan rallado. Reservar.
Mise en place Ensalada:
Hervir papas al dente, cortar la cocción con agua fría y hielo.
Partir las papas al medio.
Cortar berenjenas en rodajas iguales.
Hervir el pulpo, los tentáculos.
En una planca caliente con un hilo de aceite de oliva cocinar las brochetas y el pulpo.
En un grill o parrilla asar las papas y las berenjenas.
Para la ensalada mezclar las papas y el pulpo con aceitunas, alcaparras, jugo de limón y aceite.
Servir con las brochetas y las berenjenas, rociar con aceite y agregar perejil, sal y pimienta a gusto.
Ingredientes
Pulpo
Langostinos
Chipirones
Perejil
Ajo
Limón
Papas chicas
Berenjenas
Aceitunas
Alcaparras
Romero fresco
Aceite oliva
Sal