Los lugares de trabajo nunca han tenido tanta diversidad de edades como hoy. Por primera vez, los gerentes tienen la tarea de liderar hasta cinco generaciones (Generación Silenciosa, Baby Boomers, Generación X, Millennials y Generación Z) a la vez, y está resultando ser un desafío colectivo. Sólo el 6% de las organizaciones está totalmente de acuerdo en que sus líderes saben cómo gestionar eficazmente a los equipos intergeneracionales, según una encuesta reciente de Deloitte.
Esto tiene consecuencias, ya que las diferencias generacionales mal gestionadas pueden dar lugar a prejuicios de edad, repercusiones negativas en las actitudes laborales, dinámicas de equipo disfuncionales y niveles más bajos de rendimiento laboral general.
Por el contrario, una diversidad generacional bien gestionada tiene el potencial de aportar beneficios sustanciales, que van desde la transferencia de conocimientos y la mentoría hasta la innovación y la reducción de la rotación.
CÓMO FOMENTAR ESTAS AMISTADES EN SU EQUIPO
Los gerentes, específicamente, tienen una oportunidad única de fomentar la conexión intergeneracional en sus equipos. He aquí cinco maneras de hacerlo.
DESMANTELAR LOS ESTEREOTIPOS.
Iniciar debates que desmantelen los estereotipos generacionales y mitiguen los prejuicios basados en la edad es un primer paso crucial para identificar y revertir las percepciones generacionales erróneas. Como gerente, usted podría realizar una "auditoría de supuestos". Haga que su equipo dedique una semana a buscar los casos en los que detectan estereotipos generalizados relacionados con la edad en acción (de ellos mismos o de otros), y anímelos a generar conciencia sobre estos estereotipos cuando ocurran.
AYUDAR A SUSPENDER EL JUICIO.
Los compañeros de trabajo de diferentes generaciones pueden haber aprendido diferentes normas y formas de pensar sobre temas como la comunicación, la tecnología, las prioridades laborales y el éxito. La falta de comprensión sobre las raíces de estas diferencias puede impedir que se desarrollen amistades entre aquellos que, de otro modo, podrían encontrar conexiones naturales.
Los gerentes deben alentar a los miembros de su equipo a mostrar el mismo nivel de curiosidad entre sí. Entrene a las personas para que no asuman que algo está mal sólo porque es diferente.
DESTACAR LOS BENEFICIOS RECÍPROCOS.
Como gerente, puede fomentar los mismos tipos de colaboración llamando la atención sobre las contribuciones únicas que ofrecen los miembros de su equipo intergeneracional. Durante las reuniones de equipo, prepare el escenario de manera proactiva pidiendo a los colegas mayores y a los más jóvenes que compartan áreas en las que esperan mejorar sus habilidades y desarrollarse, así como preguntando quién (independientemente de su edad) estaría interesado en dar un paso al frente para proporcionar ese aprendizaje.
MEZCLAR.
Ya sea que sus empleados trabajen en la oficina o de forma remota, evalúe el potencial de una interacción amistosa e informal. A medida que muchos lugares de trabajo buscan reconfigurar sus oficinas para adaptarse al trabajo flexible y a las estrategias de regreso a la oficina, los gerentes deben aprovechar la oportunidad para alejarse de las configuraciones anticuadas en las que los empleados de diferentes niveles de antigüedad residen en lugares diferentes. En su lugar, cree espacios comunitarios y de trabajo cómodos que alienten a aquellos que no hayan tenido anteriormente la oportunidad de cruzarse para conectarse durante una pausa para el café o entablar una conversación sobre sus desafíos laborales (y de vida) actuales.
ENFATIZAR EL PROPÓSITO COMPARTIDO.
Recuerde a los empleados que contribuyen a algo más importante que cualquier edad o grupo generacional específico: la misión compartida de la empresa. Individualmente, los empleados de diferentes generaciones pueden parecer tener perspectivas inconexas, pero los gerentes deben desafiarlos a unirse y combinar sus experiencias e ideas para ayudar a la organización a enfrentar desafíos difíciles de nuevas maneras.
Los gerentes deben ayudar a sus empleados a ver la diversidad generacional como una oportunidad, y no como una frustración. Las amistades intergeneracionales en el lugar de trabajo pueden ser el eje que nos ayude a todos a realizar ese cambio vital de perspectiva.