Si había alguien indicado para contar literariamente en clave de hincha millonario el padecimiento y posterior éxtasis de la Final del Mundo, ese era Andrés Burgo. Las credenciales fueron presentadas en Ser de River, un libro de Sudamericana publicado en 2011, donde descarnadamente el periodista hincha (o viceversa) narró en primera persona el infierno vivido desde la tribuna los meses previos al descenso del club de Núñez.
Esta vez, la idea fue de Editorial Planeta: convocaron a dos periodistas identificados con los colores de los eternos rivales para la realización a toda prisa de un libro. El club ganador tendría su relato. Es así que la corrida final del Pity Martínez no solo garantizaría la obtención de la Copa Libertadores de América sino que confirmaría a Burgo como el autor del trabajo.
Aun no transcurrieron dos meses del dramático partido en el Santiago Bernabeu y La final de nuestras vidas ya está en las librerías. En más de 200 páginas el periodista recorre este hecho deportivo sin igual y lo atraviesa desde todos los ángulos posibles: el suceso futbolístico en sí, sus antecedentes históricos, la puja política que se disputó paralelamente a las finales y el inesperado e infartante desenlace en Madrid.
Más allá del sorteo de la Conmebol que configuró los cruces de octavos de final, ¿cual fue el momento en que los hinchas tomaron conciencia de la posibilidad real de una final Boca-River/River-Boca? Burgo reúne con mucho oficio periodístico tanto sus sensaciones personales como la de los hinchas que comparten con él la tribuna Centenario del Monumental. ¿Por qué Boca de nuevo? ¿Acaso las series ganadas al eterno rival desde 2014 eran solo una broma macabra del destino? ¿Por qué la revancha era en River con la posibilidad de que Boca dé la vuelta en el Monumental? Los interrogantes funcionan en el texto como los disparadores.
Previamente en los capítulos iniciales las páginas van atravesando la historia del superclásico. Una rivalidad que es tan original como su pasión: primero nació en la tribuna para descender luego al verde césped. River ya se había ido de la Boca y la enemistad persistía. Jugaron durante el amateurismo dos ligas distintas y estuvieron ocho años sin enfrentarse. Sin embargo en los partidos posteriores los trámites no terminaron bien. A la crónica histórica, Burgo le suma sus experiencias personales en los clásicos de los últimos años, un verdadero guiño al lector riverplatense.
Sin embargo hasta el hincha más seguidor no estaba preparado para lo que estaba por vivirse. Un enfrentamiento tan inédito y potente, que la obtención de la Copa sería solamente una yapa. Aquí el escritor se abre para decir lo que pocos lo hacen públicamente: los hinchas no querían jugar esta final. El miedo a la derrota fue una tortura para millonarios y xeneizes, gallinas y bosteros. El miedo a la humillación es mas grande que cualquier otra cosa. En este tramo del libro, el relato se asemeja a un diario personal del hincha donde busca identificarse con sus pares para soportar en grupo semejante calvario. Hasta hay una solidaridad con el simpatizante rival por el hecho de que también está pasando por lo mismo.
Esta parte es rica en anécdotas dramáticas y graciosas. Como por ejemplo, las recomendaciones médicas de los cardiólogos a los pacientes que empezaron a preocuparse por las consecuencias físicas y mentales de semejante evento. O las relaciones sociales de los fanáticos con la gente que considera el fútbol en general y la pasión de los hinchas, en particular, un símbolo de la estupidez humana. Como esa tuitera que adjudicó la muerte de su mascota al stress supuestamente provocado por los gritos y petardos de sus vecinos durante la primera final. Otro usuario de la red social, enfermo del fútbol, se lamentó porque el perro se perdía la revancha.
O esa novia al borde de un ataque de nervios porque la contienda coincidía con su fiesta de casamiento planeada con meses de antelación. No porque quería ver el partido sino porque la mayoría de los invitados había confirmado el faltazo. Es que, según los futboleros, había más posibilidades que ella se casara de nuevo a que se jugara una nueva final de Libertadores Superclásica.
En el plano deportivo, Burgo bucea en la guerra táctica que se libró desde las huestes de Marcelo Gallardo y Guillermo Barros Schellotto con su correlato dirigencial en D'Onofrio y Angelici. Cómo el Presidente Mauricio Macri jugó su partido al inicio de los 40 días de vía crucis tribunero pidiendo que vuelvan los hinchas visitantes. Cómo las policías Federal y de la Ciudad libraron su propia batalla que tendría como saldo bochornoso la agresión al micro de Boca con la posterior salida de Martín Ocampo del gobierno porteño. Y por qué la barra brava de River, conocida como los Borrachos del Tablón, fue allanada, un día antes del nunca iniciado partido revancha en el Estadio Mundialista.
Un libro imprescindible para los hinchas y lectores de River. El primer documento literario sobre el acontecimiento que paralizó a la Argentina, gran parte de América y Europa. Escrito con maestría de periodista y corazón de hincha. Porque Burgo, como él mismo se presenta, no cree en Dios pero cree en el Muñeco.
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