Una brillante novela sobre la música y el paso del tiempo

Luego de la antología de cuentos de escritores chinos “Después de Mao”, la editorial Adriana Hidalgo publica “El invisible”, de Ge Fei, una fábula de un hombre común en busca de una vida modesta pero feliz.

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En palabras de Enrique Vila-Matas,
En palabras de Enrique Vila-Matas, Ge Fei es el escritor más radicalmente literario de la China actual

¿Y si la corrupción no fuera necesariamente algo malo? A mediados del siglo XIX y durante más de treinta años, la emperatriz china Cixi robó el dinero destinado a solventar la Armada para cumplir con un capricho personal y levantar su Palacio de Verano. La maniobra tuvo el desenlace esperado: el ejército chino fue derrotado en la guerra contra el Japón de 1895. Sin embargo, hoy, a más de cien años de aquella caída, el palacio de Cixi se convirtió en una de las principales atracciones turísticas del país, genera grandes ingresos por el valor de la entrada y da trabajo a muchísimas personas. Entonces: ¿y si la corrupción no fuera necesariamente algo malo?

Este sofisma, que abre la bellísima nouvelle El invisible, de Ge Fei (Adriana Hidalgo Editora; traducción de Miguel Ángel Petrecca), encierra la clave de lectura pero también da la pista para entender la relación que Oriente mantiene con el paso del tiempo: no hay hechos definitivos, todo es transitorio.

Nacido en 1964, Ge Fei es uno de los escritores más radicalmente literarios —son palabras de Enrique Vila-Matas— de la China actual. Desde sus primeros trabajos —como Belleza de la flor de durazno, donde explora el concepto de utopía; aún inédito en español—, se planteó como un autor vanguardista en oposición al estilo "oficial" de la literatura china, basado en el realismo socialista. La literatura, parecería decir Fei, está para romper los relatos dominantes.

Ahora, en medio del desaforado crecimiento económico chino, Fei vuelve a tomar distancia. El invisible, que por su estructura recuerda a las fábulas antiguas, avanza sobre la música clásica —que, como el tiempo, es inasible— para recordar la importancia que los hechos culturales tenían en la vida cotidiana. Hablando del libro para la revista The Paris Review, Fei decía: "Cuando era estudiante en Shanghai sentía que la vida era extremadamente espiritual. A la gente no le importaba las posesiones materiales, no le importaba tu ropa, tus zapatos, qué tipo de reloj usabas. Todos los fines de semana mis amigos iban a conciertos de música clásica: Bach, Beethoven, Haydn. Veinte años más tarde, el cambio que se ha producido es increíble. De una vida espiritual increíblemente rica hasta una falta total de enriquecimiento espiritual. El materialismo es la palabra del día. Dinero. Progreso."

“El invisible” es la primera
“El invisible” es la primera novela de Ge Fei traducida al español

El protagonista de El invisible se llama Cui y es un especialista en sistemas de sonido. Está acostumbrado a trabajar para empresarios y snobs, generalmente "sordos musicales" que sólo quieren tener en casa el mejor equipo del mercado. Cui está en el borde inferior de la clase media. Vive de prestado en una casa que tiene una grieta por la que se cuela el aire gélido, depende de la ayuda económica de un amigo que lo desprecia, siempre está preocupado por la posibilidad de que un proveedor le robe o lo estafe y deba abandonar el negocio. Sin embargo, no se lamenta. Considera que tiene las privaciones de un artesano y que la "decadencia comenzó desde el momento en que se empezó a pisotear de manera deliberada a los artesanos".

Conforme uno avanza en la lectura, la trama se va abriendo en distintas líneas paralelas y por momentos da la impresión de que ninguna vaya a tomar una forma definida. Pero entonces aparece un cliente enigmático, alguien con oscuros vínculos en la mafia, y le ofrece un trabajo que puede sacarlo de sus apremios. O hundirlo aún más. Para conocer la respuesta tal vez haya que esperar cien años.

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