Ruggero Pasquarelli: "No voy a dejar la actuación, pero prefiero que la gente me recuerde como cantante"

"Me es más fácil cantar frente a mil personas que frente a dos", reconoce con inusual franqueza Ruggero Pasquarelli (26), el italiano que vive en Buenos Aires desde el 2012 y que gracias a su carrera actoral ha dado más de cuatrocientos shows junto a los elencos de Violetta y Soy Luna.

"Eso sí", advierte, "de chico yo era súper tímido. Tanto que mis papás, Bruno y Antonella, decidieron enviarme a una escuela de actuación de Pescara para que me desbloqueara". Luego, el joven criado a orillas del Mar Adriático y que este año interpretó dos personajes en Argentina, tierra de amor y venganza (Toro y Giancarlo; eltrece), se apoya en la mesa del restaurante en el que da esta entrevista y explica por qué esa decisión marcó el resto de su vida: "Las clases de actuación me ayudaron a desbloquearme y a entrar en contacto con mis principales pasiones. Y fue gracias a eso que a los catorce empecé a estudiar canto y a los dieciséis me presenté en el casting del programa italiano de talentos Factor X, buscando cumplir mi sueño de ser cantante. Pero surgió lo de la actuación, que es algo que siempre me había gustado, y todo se desvió, pero a la música siempre la llevé dentro".

–El 21 de junio, diez años después de ese casting, lanzaste tu primer tema, Probablemente, y ya tiene dos millones de visualizaciones. ¿Planeás dejar tu carrera de actor para ser cantante?

–No, la actuación no la voy a dejar, porque me encanta. Pero en este momento mi proyecto principal es la música y quisiera que en un futuro la gente me vea como cantante, y que lo de la actuación lo consideren un plus, como cuando piensan en Justin Timberlake.

–¿Vas a ser como él sobre el escenario, es decir, vas a bailar?

–(Ríe) Voy a hacer de todo. Me encanta bailar y tocar instrumentos, así que seguramente lo haga. Lo que sé es que voy a dar lo mejor de mí, porque mi corazón, mi alma y mis ganas de tocar me llevaron a encarar este nuevo camino que tantas veces postergué.

–Siendo italiano, ¿por qué tu primera canción es en español?

–Porque llevo siete años hablando todo el tiempo en español, porque me siguen muchas personas de Latinoamérica y porque es un idioma que se volvió universal en el mundo de la música. Hoy la música latina está muy fuerte.

–¿Te verías haciendo un reggaetón?

–Voy a estar enfocado principalmente en el pop, pero confieso que hace un año y medio compuse un reggaetón que tiene palabras y sensaciones fuertes. Quizás más adelante lo saque, pero por ahora quiero transmitir mi personalidad a través de mis canciones. Y probablemente, si bien no habla de una experiencia personal, es un puente entre lo que fui y lo que voy a ser.

–Tu novia, la actriz y conductora Cande Molfese (28), ¿ya tiene su propio tema?

–Claro que sí, ¡tiene miles!, porque ella es parte de mis inspiraciones y de muchísimas cosas de mi vida así que siempre tendrá un espacio en mi música. Pero el primer tema público lo voy sacar en el momento justo y cuando ambos podamos grabar el videoclip.

–Como Michael Bublé y Luisana Lopilato en Haven't Met You Yet.

–¡Exactamente! Y ya que lo mencionás, te cuento que yo solía cantar sus temas todo el día y que él es un referente para mí, porque tiene una gran carrera y prioriza mucho a su familia. Tanto, que dejó todo cuando su hijo Noah estuvo mal. Y eso me parece admirable, porque yo siempre quiero tener a mi familia delante de mi trabajo.

–Hablás del valor de la familia. ¿Te gustaría ser padre joven?

–Sí. En un imaginario me encantaría tener cuarenta y seis años y un hijo de veinte, ¡sería fabuloso! Pero ahora, si es que Cande llega a ser la mamá, no es el momento, por las carreras de los dos. Tiene que ser en el momento justo.

–¿Ahora en qué etapa están?

–En una de mucha felicidad. Y si bien este año voy a viajar a promocionar mi música por Latinoamérica y Europa, creo que el amor también es bancar al otro y a su pasión, y nosotros nos re bancamos. Igual, si ella llega a estar libre, ¡obvio que se viene conmigo!

Ruggero Junior, como le decía cariñosamente su abuelo, lleva desde hace años una manteca de cacao en el bolsillo derecho para tener suerte. En el izquierdo tiene su celular, en el que la aplicación de Instagram le muestra que sus seguidores ascienden a siete millones seiscientos mil. Pero él, lejos de desvivirse por eso, asegura que "trata de despegarse de las redes sociales para vivir la vida".

Eso sí, cuando su mamá desde Italia le mandó un audio de WhatsApp transmitiéndole toda la emoción que le provocaba ver su videoclip, él empezó a "llorar como un nene chiquito".

Hoy, en contacto con sus emociones, admite: "Quiero que las personas digan: 'Ruggero fue actor siendo Matteo y siendo Federico, pero Ruggero es cantante'".

–Mencionás a tus personajes de Violetta y Soy Luna, pero no a Toro ni a Giancarlo, los de Argentina, tierra de amor y venganza. ¿Por qué?

–¡Porque me olvido que los hice! Es que fue tan rápido… En Navidad me llamó el productor, hice el casting con Male Sánchez, al día siguiente me dijeron "ok" y arranqué a grabar el 2 de enero por tres semanas. Y después me llamaron para hacer a Giancarlo, el hermano mellizo de Toro, que vino a la Argentina a buscar a su hermano, y me divertí dándole otros matices y un acento siciliano.

–Tengo entendido que ya terminaste de grabar los capítulos de este personaje. ¿Te habían ofrecido quedarte más tiempo?

–Y… sí. Al mismo tiempo, a mí también me hubiese gustado, pero en otro momento. Tocó cuando yo ya había tomado mi decisión y tuve que renunciar a él. Pero ojalá tenga otras oportunidades en el futuro.

–Varios de tus colegas compartieron tu videoclip en las redes sociales.

–(Ríe) Sí, yo les mandé mensajes por Instagram a todos pidiéndoles que lo suban a sus redes (agarra el celu y scrollea la pantalla). La China (Súarez), por ejemplo, me felicitó y me dijo "¿Cómo hago? Soy muy abuela", así que le hice un videíto explicándole todo el proceso y ella, re buena onda, me lo subió.

–¿Con qué soñás?

–Uf, ¡con tantas cosas! Sueño con hacer shows en vivo y que la gente entone mis canciones. Y después, como algo muy loco, quisiera tocar en el Madison Square Garden, la arena más famosa del mundo. Pero voy a ir siempre paso a paso, porque yo vivo el momento y estoy dispuesto a vivir lo que venga.

Por Kari Araujo.
Fotos: Gentileza PR Press Ruggero Pasquarelli e Instagram.
Agradecimientos: @lamalbequeria.

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