Meadow, la hija del recordado actor Paul Walker llegó a un acuerdo económico con Porsche y cobrará más de 10 millones de dólares a cuatro años del accidente que le costó la vida a su padre.
La joven de 18 años demandó a la empresa por considerarla culpable de la muerte y luego de lograr el entendimiento retiró la demanda por "homicidio culposo" que le había iniciado a la automotriz, según informó el portal el portal The Blast.
El protagonista de Rápido y Furioso murió a los 40 años en un accidente en 2013, cuando el Porsche Carrera en el que iba se estrelló contra un árbol y se incendió. El choque también le costó la vida al conductor, su amigo Roger Rodas.
Fue en 2015 que Meadow demandó a Porsche, alegando que su padre habría sobrevivido al choque inicial, pero que no pudo escapar de las llamas que devoraron el interior del vehículo al ser incapaz de desabrochar el cinturón de seguridad para salir.
En la demanda presentada por la joven, se afirmaba que la compañía conocía el "historial de inestabilidad y problemas de control" del Carrera GT y de las graves consecuencias del diseño de los cinturones de seguridad en caso de accidente.
En abril de 2016, Meadow ya había recibido algo más de diez millones de dólares de la herencia de Roger Rodas después de que este fuera encontrado en parte responsable del accidente, a pesar de que según determinó el juzgado "no estaba conduciendo de manera irresponsable en el momento en que perdió el control".
La versión oficial sobre los motivos que causaron el trágico accidente es que el auto circulaba a más de 128 kilómetros por hora, es decir por encima del límite de velocidad permitido, lo que habría provocado que se desviara y chocara primero contra un poste y después contra dos árboles.
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