Fiorella “Tuli” Acosta tuvo en claro desde chica que quería dedicar su vida al baile. Es una pasión que nació en su infancia, y en la actualidad une el Hip hop y el stream para generar contenido diferente y que más jóvenes se animen a la danza. La rompe, no solo con sus bailes, sino también en Twitch, donde suma más de medio millón de seguidores. “Desde que tengo conciencia bailo. Simplemente la música me llevó siempre a expresarla con el cuerpo. Nació cuando yo tenía tres años. Yo miraba videoclips en la tele y lo que pasaba en los canales que pasan música todo el tiempo, y yo lo que hacía era copiar lo que veía. En ese tiempo miraba siempre a Shakira”, le contó a Infobae.
Es oriunda de Río Ceballos, Córdoba, a unos 30 km de la capital. Primero comenzó con Danza árabe y luego probó Jazz y contemporáneo, pero algo cambió cuando a sus 15 años se animó al Hip hop: “La primera vez que lo hice me sentí totalmente frustrada porque no me salía nada, porque venía con toda la memoria del cuerpo que era muy diferente a lo que tenía que hacer. Yo siempre tenía recta con cosas finas para hacer, y estos me decían ‘Tuli, descontracturate, no me podés hacer esto bien, necesito que te sueltes’. Entonces medio que me apasionó eso, el decir ‘okay, es un desafío totalmente nuevo’. Arranqué, me empezó a gustar, vi que era mucho más genuino con la comunidad del Hip hop y todo eso, entonces dije ‘este es el ambiente que quiero, el que me familiarizaba un poco más’, y arranqué con eso. Después tuve muchos viajes donde pude formarme afuera, porque me di cuenta que allá estaba todo. Acá se veía muy poco el hip hop”.
Viajó reiteradas veces a Estados Unidos para perfeccionar su talento, y participó en el Hip hop International en Las Vegas y Phoenix, Arizona: “Le saqué todo el jugo que pude. Yo entraba seis de los siete días de la semana y siete horas. Era o lo aprovechaba el tiempo y sacaba lo mejor o me volvía para acá. Entrené mucho y ahí pude crecer en poco tiempo. Yo vi mi crecimiento y estar más conforme gracias a eso: a estar horas y horas metiéndole, e incluso cuando el cuerpo me decía ‘Tuli pará', y yo estaba como ‘no, pará, me tenés que funcionar’. Y aprovechar que tenía el estado físico de chica y las ganas de aprender todo el tiempo”.
En 2020 quiso viajar a Buenos Aires para comenzar a dar clases pero la pandemia y la cuarentena le frustró los planes: “Ahí se cayó la idea de vivir de clases de baile. Se me cayó porque no cobraba nada, no podía mantener nada ni pagar el celular, nada. Pasé como mi proceso de frustración porque fue invertir tantos años... Cuando uno hace que su pasión sea el sustento económico pasan dos cosas: o te va bien y lo disfrutás, y si te empieza a ir mal te agarras con tu pasión y ya no querés saber más nada. Y eso es lo peor. Yo ahí pude crecer en la cuarentena y darme cuenta que el baile lo tenía que ver como mi pasión, no como mi sustento económico. Medio que ahí dije ‘okay, tengo que probar otras cosas que me hagan bien’. Yo hacía vivos por Instagram, pero durante la cuarentena en Rio Ceballlos, en el campo yo no podía hacer nada. Entonces cuando se empezó a abrir todo me junté con amigos y me mostraron lo que era el stream. No solo tenía mi gente sino que podía llegarle a un montón de gente más, y que vean que la Tuli estaba ahí, no solo para bailar sino también para conocernos, quiero charlar con ustedes, está todo re piola”.
- ¿Ahí nació tu pasión por el stream?
- El stream fue algo que me completó eso que yo necesitaba. Poder sentirme cerca de la gente que me seguía todo el tiempo. Sino estaba como apartada. La gente me miraba como “Mirá cómo bailas”, pero no pasaba más allá de eso. Entonces yo decía “les tengo que devolver en eso, en el lugar que ellos me ponen”. Así que esa fue mi manera de conectarme, decir “hola, acá estoy, ¿cómo están ustedes?” Era mucha más conexión la que tenías en un stream de Twitch que en un live de Instagram. Así fue como llegué al stream y como me gustó. Nunca vi que nadie bailara, entonces dije “puedo fusionar todo”. Como que ninguna de las dos cosas me restaba, sino que juntas estaban mucho mejor.
- Por suerte la escena ahora tiene un poco de todo, no se encasilla en un solo tipo de contenido.
- Es cuestión de modernizarse y saber que todo es válido si lo creas vos. Básicamente es eso. El stream es una plataforma donde no es solamente para gaming. Podés mostrar que sos bueno jugando, pero también cualquiera se puede meter y hacer el contenido que quiera. Si te hace feliz bailar lo podés mezclar si querés. Buscale la vuelta que lo vas a encontrar. Si te gusta pintar también podés hacer algo. Yo con el baile pude hacer una clase en stream y la gente no entendía nada. Imaginate, entraron a un stream donde de la nada la mina estaba bailando y enseñando una coreografía, con todas cámaras profesionales. Todos dijeron “me voló la matrix”. Era un poco fusionar eso del chiste, de entretener, para que la gente que por ahí no bailaba también se quedara viendo y pudiera absorber del otro lado. Capaz te ayuda a incentivarte a que algún día te animes.
- ¿Te ha pasado de recibir comentarios de gente que quiso empezar a bailar por vos?
- Un montón y eso me re alegra. Sobre todo lo veo a eso cuando hago challenges. Ahí veo la gente que realmente me escribe y me dice “Che Tuli, no me sale pero…”. Y me mandan ahí los videos practicándolos ¿entendés? Eso me incentiva a mi porque es “okay, se animan a”. O capaz “no me animo a tus coreografías que das en las clases pero sí me incentiva a que el challenge lo haga”, que son cortitos o pasos mas fáciles y más pegadizos también. Eso también fue mi punto para sentirse más conectada con la gente que no solo es bailarín o bailarina.
- ¿Sentís que ahora hay más pibas que se animan a prender stream?
- Cuando yo entré todos los clips que me pasaban en su tiempo, que uno se pone a reaccionar para conocer la comunidad, eran todos hombres, pero uno no se da cuenta de eso. Después empecé a ver que sí, que cuando me pongo a explorar veo más chicas y me parece genial porque no es cuestión de género la aplicación, es simplemente cuestión de quién tenga ganas de mostrarse y de generar contenido, y me parece hermoso. Antes era más de hombres pero creo que por el gaming. Pero cuando se empezó a hacer más conocido que uno puede hacer lo que quiera en stream o en IRL ahí fue cuando se empezaron a animar más mujeres creo yo. Porque por ahí yo antes no agarraba la compu ni en pepe, pero yo me metí porque sabia que podía hacer IRL y podía estar en la cámara charlando nomas. Y yo creo que eso está piola porque los pibes se animan y las mujeres dicen “okay, me puedo sumar a esta plataforma”, y si tenés ganas de mostrar tu contenido y ser vos está re piola, y es re lindo que se estén explayando más, no solo en género, sino en gente. Porque hay mucha más gente. Se hace más grande la comunidad, más público tenés también. Mientras más crece crecen todos. Por eso es que tenés que tener el mejor y apostar a esa gente que recién está arrancando.
Si bien comenzó a streamar en medio de la cuarentena, rápidamente logró consolidar su público, y junto al apoyo de la DNG Team y la Coscu Army su popularidad escaló exponencialmente, y pudo conseguir que el baile sea visto por otros ojos en la escena. Tal es así que fue la ganadora del Piquín del año en los Coscu Army Awards 2020, la entrega de premios más importante de la comunidad.
- ¿Cómo viviste ese momento?
- Fue una locura igual la experiencia de estar ahí, yo no me lo imaginé. Y me acuerdo que yo hasta ese día me estaba preparando y yo le decía a Oky (su pareja): “amor, ¿estás seguro que yo estoy? Mirá si llego y la puerta no está mi nombre”. Y me decía: “Tuli, dale. Ya está. Si hasta estás nominada”. Yo pensaba que capaz era solo un chisme y me estaba comiendo el viaje y nada que ver. Pero lo dudé porque era muy raro, yo recién había arrancado y no era posible creerlo en mi cabeza. Pero sucedió y yo estoy muy agradecida, porque incluso ese año agregaron el Piquín del año, no estaba antes. Entonces por eso no creí que iba a estar la terna. Pero agregaron ese año y dije “okay, que piola”, porque lo agregaron en cierto punto porque antes no había bailarines. Fue un orgullo personal posta que me marcó mucho y decir “okay, es la primera vez que entro con el baile a algún lado y no te ningunean, ¿entendés? Tipo realmente te reconocen. Porque en lo general el baile, en todos los ambientes de trabajo siempre queda atrás o de fondo. Y me chocó mucho que en esta comunidad de stream lo hayan reconocido tan rápido. No importó que haya entrado justo. Fue como “¿okay bailás? ¿streameas? sos bienvenida.” Entonces eso fue genial. Y también sé que incentivó a que mucha gente se animara a bailar o a tirar freestyle en stream.
Tuli es una persona muy enérgica, que siempre intenta transmitir vibras positivas y buenas energías a su público, y asegura que el estar de buen humor es un punto de inflexión para cada jornada: “Yo siento que el estado de animo influye en absolutamente todo lo que tengas que hacer en tu día. Incluso en cómo vas a encarar el día a día y cómo te vas a tomar las cosas que te pasan, porque simplemente tiene que pasar. Yo creo que mantener por dentro el estado de ánimo con lo que te hace feliz es lo más importante y lo que más uno le tiene que prestar atención. Para así cuando te viene la mala estás preparado, y no estás “okay, no, otra peor”, y no querés hacer nada y te tirás. Entonces siempre intento darme esos momentos de paz para decir “okay, ahora salgo”, salgo y que se venga lo que quiera porque ya estoy bien.
- ¿Y las veces que estás mal cómo lo manejás a la hora de prender stream?
- Si estoy mal y me fuerzo a prender lo único que te transmito es “uh esta re depre la mina”, y no pinta porque por ahí te fomento a que vos estés igual, y no es la idea. Igual hay muchas veces que estoy mal y prender me hace bien. Hay que saber diferenciar esas cosas. A veces prendo y digo “chicos, no tengo ganas de hablar de nada, solamente sáquenme temas ustedes y yo les contesto”. La gente lo entiende igual y sabe. Uno cuando ya tiene tiempo en stream va generando esa conexión con sus viewers. Uno cuando tiene mucha gente tiene que ser consiente de que no es un juego prender stream, que sabés que podes afectar mucha gente y con cualquier cosas que digas y como te muestres. Yo hace poquito entendí que a veces no es conveniente que uno prenda, y tenés que ser realista con lo que te pasa.
- ¿Ahora qué meta tenés como Tuli?
- Ser artista completa, no sólo bailarina. Yo antes decía “soy bailarina y hago ta cosa”. Y era como encajonarme a mi misma a solo una cosa. Entonces me di cuenta que en la cuarentena justamente, cuando se me frenó todo lo del baile, que puedo hacer más cosas que solo eso. Es como que cuando uno se va poniendo sueños. Tenés dos formas de hacerlo: o te ponés metas a corto plazo o te ponés una grande. Que vos decís “no, pero eso es imposible”, pero cuando te ponés el grande, y eso lo entendí y lo digo siempre con mis streams, cuando cambiás esa mentalidad y te ponés una ambición mucho más grande, no te das cuenta pero todas esas chiquititas las vas cumpliendo al momento que llegás. Y está piola porque todo tu 100% lo ponés en una cosa. No te dividís en 100. Eso es lo que yo estoy planteando ahora como mi meta personal: ponerme algo gigante que capaz es imposible pero sé que todo lo otro lo voy viendo que se va cumpliendo. Nunca había trabajado en un videoclip, y era uno de mis sueños. Pero dije “no me voy a preocupar por eso, si se va a dar se va a dar”. Voy a ir por algo más grande y solo se fue cumpliendo porque el camino es el mismo. Y si querés llegar ahí vas a querer pasar por todo lo otro, y eso me ayudó a focalizar mi 100% en una sola cosa y que mi rendimiento sea el 100%. Mi sueño es eso. No solo ser bailarina, sino que cualquier cosa que quiera hacer, poder hacerla al 100.
- ¿Qué consejo te gustaría dejarle a la gente que te sigue?
- Desde chica, incluso hace poco me habían subido un video mis seguidores cuando aparecí por primera vez en la tele. Yo ni me acordaba de ese video, y yo decía que sigan sus sueños, desde chiquita y no tenía ni idea lo quera hablar en frente de una cámara. Y yo creo que era algo que voy a repetir siempre. Porque mi papá en su tiempo cuando yo viajaba mucho y estaba sola le decía “papi a veces me siento sola”. Y era como sentirme mal, pero al mismo tiempo estoy haciendo las cosas que me gustan, y él me dijo “nunca vas a estar sola porque siempre te va a acompañar tu sueño”. Y es lo que te hace bien, lo que por dentro te mantiene bien. Sigan esoo, sigan alimentándolo, porque por más que te digan que es imposible porque no tenes plata, no vivís en el lugar indicado... Síganlo, aliméntenlo porque ese sueño es lo que siempre les va a mantener la chispita adentro y bien. Y gracias a los seguidores. A ustedes que me dan la posibilidad de llegar y hablarles a ellos. Decirles gracias por ponerme en el lugar donde estoy y por bancar todas las cosas que hago, porque en cierto punto también lo hago para que lo disfruten ellos. Siempre digo que mis logros me gusta compartirlos con ellos, así que quiero que se sientan parte. El logro no es solo para mí, porque eso me lo dan ellos. Así que gracias, ¡los amo!