Conocé todos los detalles de la PlayStation 5: una verdadera experiencia de nueva generación

La sucesora de la exitosa PlayStation 4 deja en claro que este es el futuro del gaming con apenas minutos de encendida

Sucede tan pronto la sacas de su caja. Desde el diseño industrial, PlayStation 5 se ve como una consola salida de una película de ciencia ficción: la forma en la que están dispuestas las rejillas de ventilación y sus placas plásticas que la recubren, el juego de los leds principales que indican su funcionamiento o incluso la forma en la que debemos preparar la base que viene incluida para dejarla puesta en el lugar designado. A diferencia de sus competidoras directas de la firma Microsoft, PlayStation 5 no busca ser sutil ni pasar desapercibida, ya que su aspecto pretende llamar la atención para convertirse en el protagonista de tu living, cuarto o donde sea que decidas ponerla.

Poner todo en marcha lleva sólo unos minutos porque el sistema operativo cuenta con un diseño nuevo que simplifica sobremanera la cantidad de menús a afrontar que tan molestos resultaban en PlayStation 4, pero también porque esta nueva consola ostenta una velocidad de procesamiento de datos prácticamente instantánea debido a su disco de estado sólido (SSD) de última generación. Esto impacta lógicamente en la experiencia de uso cuando estamos fuera de los juegos pero también cuando estamos en ellos: todo carga en segundos, algo que cambia drásticamente nuestra forma de jugar.

El sistema operativo de PlayStation 5 tiene muchos cambios que hablan de que fue diseñado por personas que pasaron mucho tiempo jugando y saben exactamente qué detalles tocar. Apoyado en la velocidad del disco, el sistema se siente ligero y expeditivo en sus funciones, con los juegos en su centro. El cambio más grande es el de la implementación de las tarjetas de actividades: a través de ellas podemos por ejemplo, saber cuánto nos falta para completar un desafío determinado, o ver qué amigos están jugando a qué juego. Incluso nos avisará si algún amigo nos pasa en un récord de Astro’s Playroom, y nos invitará a ir directo a ese desafío para jugarlo y superar a nuestros rivales.

El diseño de PlayStation 5 es imponente.

Todo esto ocurre en cuestión de segundos, al igual que si nos unimos a sesiones de juego online: gracias a las tarjetas podemos saltar de un juego al otro en cuestión de segundos. Y esto no es una metáfora, porque hay juegos que literalmente tardan no más de veinte segundos en cargar. Además de esto, existe un apartado de ayudas contextuales que podemos aprovechar gracias a la función de tener múltiples pantallas en una sola. Por otra parte, el sistema muestra sólo aquello que usamos con frecuencia y está dividido en dos grandes segmentos: por un lado, los juegos y por el otro, multimedia, con todos los servicios de streaming habidos y por haber.

Pero la clave diferencial de la experiencia de nueva generación que nos ofrece PlayStation 5 tiene que ver con el nexo entre nosotros y los juegos: el joystick. DualSense es el gran protagonista de este primer encuentro con la consola. Gracias a un sistema de respuesta háptica y gatillos resistivos, el nuevo control abre la puerta a una forma distinta de vivenciar los juegos. Esto es algo de lo que se ha hablado mucho previo al lanzamiento de la consola, pero es algo que hay que experimentar para entender su magnitud. Astro ‘s Playroom es el mejor caso de éxito de esta nueva tecnología.

Preinstalado en la consola, este título exclusivo no sólo es una oda a la cultura PlayStation y a sus jugadores, sino que también hace un uso magistral de las cualidades del control, al punto de lograr una interacción hasta el momento inédita con un pad en la mano. Esta experiencia se replica en todos los juegos desarrollados por la propia Sony, incluyendo también la versión de nueva generación de Spider-Man: Miles Morales y el excelentísimo Demon ‘s Souls. Las funciones de vibración avanzadas de DualSense están para marcar la diferencia y su uso extensivo tiene su brillo garantizado en los juegos exclusivos de PlayStation 5.

DualSense puede cambiar la forma en la que experimentamos los juegos.

¿Qué tanto van a impactar en el resto de los juegos? Dependerá de una cuota extra de esfuerzo por parte de los desarrolladores, desde luego. Durante el análisis de la consola, probamos NBA 2K21, Watch Dogs: Legion, Assassin ‘s Creed: Valhalla y Call of Duty Black Ops: Cold War, y los resultados son variados. Algunos funcionan mejor que otros, pero ninguno alcanza el nivel de refinamiento que tienen los juegos de Sony. Más allá de esto, lo que queda claro es que es un recurso más para generar un vínculo más íntimo con los jugadores si se lo utiliza correctamente: está para marcar la diferencia.

PlayStation 5 también ofrece desde luego un salto cualitativo en términos de calidad visual gracias a un nuevo procesador central y chip gráfico. A diferencia de generaciones anteriores, donde el salto visual era más sencillo de constatar, los cambios en PlayStation 5 (al igual que en Xbox Series X) son más sutiles. Esto tiene que ver con una etapa de transición donde los juegos están pensados no sólo para esta nueva generación sino también para los jugadores de consolas anteriores, que constituyen una importante cuota del mercado. Demon’s Souls es el único juego diseñado exclusivamente para PlayStation 5 y lo cierto es que se ve realmente imponente, evidenciando el poder de procesamiento de la consola.

Por fuera de este gran exclusivo de lanzamiento, los juegos multiplataforma lucen y corren fantástico y por lo general poseen un selector en el que podemos definir si queremos que la consola privilegie un movimiento fluido o bien ponga énfasis en la calidad visual. En esto, el sistema operativo también influye y posee funciones muy interesantes, como por ejemplo poder elegir de base el modo gráfico a utilizar o mismo la dificultad por defecto en la que queremos jugar. Volviendo al punto de vista técnico, la consola es capaz de mostrar juegos a 4K y hasta 120 cuadros por segundo, aplicando una batería enorme de nuevos efectos visuales, iluminación, reflejos y texturas ultra detalladas.

Marvel's Spider-Man: Miles Morales pone en manifiesto las capacidades técnicas de PlayStation 5.

Un caso que permite ver el salto se da en Spider-Man: Miles Morales, que se mueve muy cómodo con toda la pompa visual y unos rascacielos que proyectan reflejos de manera natural, algo nunca antes visto en una consola. En este aspecto encontramos un punto a tener en cuenta: si bien PlayStation 5 es compatible con paneles a una resolución de 1080p (Full HD, el estándar actual) lo cierto es que para aprovechar todo su potencial, necesitaremos un panel de resolución 4K y en lo posible con tecnología HDR, la cual realza los colores y sombras, luces y más. Los televisores con estas características hace bastante que están en el mercado, pero todavía no se han convertido en la norma; en este sentido, puede que PlayStation 5 sea una de las mejores excusas para la actualización.

Siguiendo con los juegos, PlayStation 5 también te permite jugar a tus títulos de PlayStation 4. La gran salvedad es que no todos presentan mejoras, ya que estas están reservadas para los juegos comprendidos en lo que Sony dio a conocer como la “PlayStation Plus Collection”: un servicio incluido con el abono para jugar online que te da acceso a los juegos más importantes del catálogo. Está claro que la forma de encarar la retrocompatibilidad es distinta a la política de Microsoft y su ecosistema, pero es muy positivo que exista la opción de que tus juegos sigan estando disponible, cosa que nunca pasó con PlayStation hasta ahora: saltar de generación era el equivalente a decirle adiós a tu catálogo anterior.

En términos generales, la experiencia que brinda PlayStation 5 genera sensaciones muy positivas y gracias a su diseño y apuesta a tecnología de vanguardia -como el sistema de sonido 3D llamado Tempest- nos deja con la impresión de que estamos efectivamente ante algo nuevo. Hay pocos puntos negativos para destacar: el primero de ellos, el almacenamiento. El SSD es muy rápido y funciona de maravillas, pero es poco generoso con el espacio: incluyendo el sistema operativo, nos deja sólo con 667 gigabytes para instalar nuestros juegos. Lo peor del caso es que no disponemos de herramientas para utilizar, por ejemplo, un disco rígido externo y mover el contenido a nuestro gusto. Otro tema tiene que ver con la falta de soporte a monitores de resolución intermedia 2K (1440p), algo poderosamente llamativo.

Demon's Souls es el gran título de lanzamiento de PlayStation 5.

Estas son cuestiones que se supone sean sencillas de resolver a través de actualizaciones de software, pero sorprende mucho que no hayan sido contempladas de antemano, puesto que resultan muy molestas, particularmente con el tema del almacenamiento. El punto más complicado de la experiencia, sin embargo, no tiene que ver tanto con la consola sino con cómo Sony decide abordar la distribución de los juegos en la región, especialmente en nuestro país. Siendo que PlayStation tiene presencia local oficial desde la salida misma de PlayStation 4, cuesta entender por qué no existe estrategia alguna que tenga que ver con la localización de los precios, un tema sumamente delicado para los jugadores ya no sólo locales, sino a nivel latinoamericano.

En promedio, los juegos de PlayStation 5 están en el orden de los 70 dólares americanos: una suma importante considerando la fluctuación de la divisa en la Argentina. Se trata del gran pendiente de PlayStation para la región, que esperamos tenga el tratamiento que merece durante esta generación que comienza.

Dicho esto, PlayStation 5 cumple con todas las expectativas generadas desde su anuncio por sus funciones, su apuesta tecnológica y lo más importante de todo, un sólido catálogo de lanzamiento con Demon’s Souls a la cabeza, acompañado de un buen soporte de retrocompatibilidad. Hay un enorme potencial a futuro, cosa que vamos a descubrir con el correr de los meses: lo próximo de Naughty Dog (The Last of Us, Uncharted), el nuevo God of War y todas las grandes exclusivas que sólo PlayStation sabe dar y que en definitiva constituyen al gran punto de venta de este nuevo sistema. Incluso con algunos bordes algo ásperos, la experiencia de jugar con esta nueva consola es ampliamente superadora a lo que veníamos acostumbrados, al punto de que no hay manera de volver atrás. Es por esto que resulta imposible no recomendarla.