La nueva generación de consolas llegó a varias partes del mundo intentando saciar la sed de juegos de los usuarios. Casi un año después de que Microsoft revelara en sociedad la Xbox Series X, la consola ya desembarcó en varios territorios, incluyendo Argentina, y en Infobae te mostramos todo lo que incluye la caja de esta plataforma que asegura ser la más potente de la generación que está comenzando.
La caja de la Xbox Series X no es mucho más grande que la de su antecesora, pero algo que notarán aquellos que tengan una Xbox One o incluso una PlayStation 4 es que el nuevo sistema sí es mucho más pesado. Como se aprecia en el video, el packaging invita un poco a jugar y exhibir la consola, que viene rodeada de material para mantenerla en el lugar y evitar que se golpee en los numerosos procesos de transporte.
Hay dos cables incluidos con la consola. Por un lado, el cable de corriente. A diferencia de la Xbox 360 u otros ejemplos de la historia del gaming, los usuarios no deberán preocuparse por conseguir un transformador incómodo, sino que podrán enchufarla directamente sin ningún otro accesorio. El segundo cable es el HDMI, pero en esta nueva generación se trata de un conector con la capacidad de transmitir imágenes en 4K Ultra HD.
Junto a los cables se encuentra el control de la Series X. A simple vista, es muy similar al de Xbox One, pero en una mirada más profunda, tiene varias novedades. El tamaño es ligeramente más chico que el de su antecesor, como se había anunciado anteriormente. Los gatillos traseros tienen una curva menos pronunciada, pero incorporaron texturas para un mejor agarre. La parte de atrás del mando, de la mitad hacia abajo, también tiene estas marcas que mejoran considerablemente la sensación al agarrar el control.
Otro de los cambios se ve en los botones direccionales, que se parecen mucho más a los del control Elite de Xbox, que permite reemplazar piezas. El mando de Series X parece ser un paso intermedio entre lo que fue el de Xbox One y el Elite, pero sin convertirse en un periférico premium. Por último, debajo de los botones de menús, el control sumó ahora un nuevo comando para compartir imágenes y videos de los distintos juegos, como ya hacían sus competidores.
La consola propiamente dicha es una gran caja negra con muy pocos detalles a la vista, a excepción de la rejilla de ventilación superior, que presenta detalles en verde. Sus dimensiones son 30 cm de alto, por 15 de ancho y otros 15 de profundidad. Aunque está exhibida y presentada de manera vertical, también se puede acostar sin problemas. Como se mencionaba más arriba, el peso es una de las cosas que más llama la atención de esta gran caja negra: 4.45 kilos.
En la cara frontal se encuentra la lectora de discos Blu-Ray UHD, el botón de encendido, que es a su vez el logo de Xbox, un puerto USB y el botón de sincronización para controles. La cara trasera presenta todos los conectores, con más puertos USB, la entrada de corriente, un puerto para el cable Ethernet y la ranura para insertar tarjetas de almacenamiento externo creadas exclusivamente para la consola. La Xbox Series X cuenta con 1 Tb de almacenamiento en una unidad de estado sólido que asegura una lectura de datos mucho más rápida. Sin embargo, Xbox comercializará pequeñas tarjetas, también de 1Tb, para expandir dicho almacenamiento.
Muy pronto publicaremos un análisis más a fondo del sistema para probar la potencia de los nuevos componentes, que prometen una revolución en el funcionamiento y los gráficos de los juegos que vendrán en los próximos años.
Por el momento, la caja de la Xbox Series X también incluye un instructivo para descargarse la app oficial en dispositivos con iOS o Android. Desde allí se puede configurar la nueva consola, suscribirse a Xbox Game Pass y manejar diferentes funciones sin necesidad de tenerla prendida. En aquellos países con conexiones a internet estables y veloces, también se permite jugar a todo el catálogo disponible desde el celular, por lo que la app es mucho más que una herramienta.
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