Después de ocho largos meses, el último juego del director japonés Hideo Kojima abandona la exclusividad con la consola de Sony y hace su desembarco en PC. El primer juego de Kojima Productions como estudio independiente, Death Stranding, llega el 14 de julio y -aunque ya no es una incógnita todo lo que en él sucede- te contamos algunos detalles a tener en cuenta antes de adentrarte en semejante viaje.
1. Sale de los cánones de Kojima
Este primer punto es una suerte de advertencia. Es que Death Stranding no es un videojuego que -de alguna manera- venga a reemplazar la ausencia que dejó el “cierre” de la saga Metal Gear Solid con su quinta edición, ni siquiera de manera “espiritual”. Si bien hay mucha acción, la infiltración y el sigilo no son mecánicas que predominan en la experiencia en general. Y aunque hay varios usuarios armando teorías que conectan ambos universos, de entrada no hay nada con mucho valor.
Aunque los títulos de Hideo Kojima siempre tuvieron ese “algo” extra que los diferenció del resto de la industria tanto narrativa como lúdicamente, este es el que más sacudió el tablero de la industria en general. Es que hace muy fácilmente lo que muchos juegos de mundo abierto no pueden hacer hace décadas: lograr que ir de un punto A a un punto B sea la experiencia per se. ¿Cómo? El siguiente punto lo explica.
2. Caminar es la mecánica principal del juego
Tranquilos. Hay tiros, jefes, granadas, motos y hasta grandes vehículos. Pero cuando más se disfruta Death Stranding, es cuando toca hacer una entrega a pie. Básicamente el videojuego se trata de reconectar los Estados Unidos a través de una red bastante particular. Para ello tendremos que ir haciendo recogidas y entregas de paquetes a través de distintas terminales a lo ancho del país. Como si fuera un servicio de delivery. Literal.
A pesar de que con el tiempo el título facilita un poco las cosas para que las entregas sean mucho más “placenteras”, las primeras horas serán casi al cien por ciento de caminata. Y lo que podría parecer un bodrio, realmente no lo es. Es que la mecánica principal del juego es caminar y esto ocurre gracias a un sistema de físicas y balance super pulido, al igual que sus controles.
Cargarse una decena de kilos sobre las espaldas y emprender una caminata de unos 15 minutos no es para nada algo aburrido, aunque suene como tal cosa. De hecho es un una secuencia super inmersiva, ya que el diseño del terreno es muy variado y siempre hay distintos desafíos y obstáculos que atravesar. Un simple río puede ser el motivo por el cual se pierda una partida y una piedra en el camino puede significar volver a empezar. Al principio puede resultar frustrante, pero con el tiempo se vuelve adictivo.
3. Es una experiencia social
Lejos de lo que puede parecer una experiencia solitaria –hilando muy fino, sí lo es–, Death Stranding tiene un componente de juego online muy interesante. Aunque se trate de la historia de Sam Porter Birdges reconectando un Estados Unidos devastado, solo contra el mundo; es posible dar y recibir ayuda de otros jugadores
Por ejemplo, si alguien instala una escalera para escalar un terreno muy empinado y no la desarma luego de usarla, esa herramienta quedará ahí para cualquier otro jugador que pase por esa zona del mapa. Incluso hay un sistema de likes que permite darle “me gusta” a las construcciones de otros jugadores y, en consecuencia, recibir la aprobación por parte de otros.
La escalera en este caso es sólo un ejemplo, ya que lo mismo sucede con puentes, tirolinas, vehículos, sogas y muchos ítems más. Siempre es un alivio encontrar una soga que permita bajar de una meseta con mucha altura; y lo mejor es que el juego te da la oportunidad de darle un valor real a ese hallazgo.
4. Matar muchas veces no es una opción
Death Stranding tiene acción, por más de que parezca que todo es hacer las veces de delivery boy. De hecho hay momentos muy intensos que se convierten en verdaderas escenas cinematográficas frenéticas de ciencia ficción. Pero si hay algo que los videojuegos de Hideo Kojima intentan transmitir es que matar siempre tiene sus consecuencias y que evitarlo dará mejores recompensas.
En Death Stranding sucede lo mismo. Pero para que se entienda es necesario exponer mínimamente algunos conceptos, pero desde ya que no hay spoilers de ningún tipo.
A lo largo y ancho del terreno hay entes que se llaman BTs, los cuales básicamente se podrían definir como fantasmas, es decir, entidades que todavía están conectadas con el mundo real. A su vez, estos BTs son de los enemigos más duros que tiene el videojuego y cada enfrentamiento ante ellos –si no se toma con precaución– se puede descontrolar a niveles catastróficos.
¿Qué tiene que ver esto con que matar no sea la mejor opción? Es que cuando un enemigo humano muere y su cadáver es abandonado en el terreno y no es tratado como corresponde. Éste se desintegrará al punto tal de generar uno de estos entes en esa zona del mapa; y cada vez que esto pase, la experiencia se volverá siempre un poco más desafiante. Como en la vida, Death Stranding nos hace pensar muchas veces antes de tomar cualquier decisión.
5. Los requisitos
Este último detalle no tiene mucho que ver con el juego en sí y con la experiencia. Pero para quienes juegan en PC, es una información casi fundamental y valiosa a la hora de pensar en comprar o no un juego. Si bien ya se habían dado a conocer hace bastante, nunca está de más refrescar cuáles son los requisitos mínimos que pide Death Stranding para correr de la mejor manera en una computadora.