Isurus Gaming fue el equipo argentino más exitoso del 2019. Consiguió varios campeonatos a nivel regional y también logró disputar certámenes internacionales. La cabeza detrás de todo es Facundo “Kala” Calabró, quien fundó la organización en 2011 y desde entonces ha sido el que movió los ejes que llevaron al Tiburón a lo más alto del continente. Sin embargo, a finales del 2018 se sumó Juan Cyterszpiler como director deportivo. El hijo de Jorge Cyterszpiler, el primer representante de Diego Armando Maradona, se convirtió en un una pieza fundamental del gran año que tuvo la multigaming.
Juan estudió abogacía e hizo un Master en gestión de esports en la Universidad Internacional de Valencia. Previamente su vida profesional y familiar había tenido poco que ver con los videojuegos y mucho con el fútbol.
-¿En qué momento nació tu amor por los videojuegos?
-Es difícil decirte en qué momento empezó puntualmente. A los cinco o seis años ya jugaba a la gameboy. Me compraban esas maquinitas en la feria que tenían el juego de la serpiente, los autitos y el Tetris. Cuando te crías solo te das cuenta que necesitás afecto, y en un momento complicado de mi vida me refugié en los videojuegos. Prácticamente no tenía a nadie y estaba solo en el mundo, y encontré esa contención.
- ¿Qué rol cumplió el fútbol en tu vida?
- El futbol fue todo. Yo quería ser jugador de fútbol, quería ser como mi papá más que anda. En su momento mi mamá me insistió para que siguiera estudiando, pero obviamente yo quería ser como mi viejo. Jugué al futbol en todos los roles: defensor, arquero, delantero. Siempre al lado de mi viejo, constantemente, viendo y admirándolo. Era un tipo que imponía en todo lo que hacía, y el futbol fue todo fue todo para mí. No sé cómo decírtelo. Era como un ente que vivía constantemente alrededor mío, y más por lo que representaba mi viejo. Fue algo muy importante en mi vida, como lo fue el cine, los comics y los videojuegos.
Jorge Cyterszpiler fue uno de los mejores amigos de Diego Armando Maradona durante su infancia. Luego de que el Diez debutara en Primera, Jorge se convirtió en su representante, y su ascenso astronómico fue trabajo compartido: la llegada a Boca, el Mundial de 1982, la venta al Barcelona y su traspaso al Napoli. Una temporada después de su arribo al club italiano la relación comercial se rompió.
Cyterszpiler dejó de lado la representación de jugadores por varios años, hasta que la retomó cuando Miguel Ángel Brindisi se convirtió en entrenador. La compañía que fundó manejó la carrera de varios de los jugadores más importantes de los últimos años en el fútbol argentino. Llegó a ser manager de más de 200 futbolistas.
Jorge se quitó la vida a sus 58 años en 2017.
- ¿Te hubiese gustado laburar con tu viejo?
- Estuve en conjunto con mi viejo desde que tengo uso de conciencia y siempre aprendí de él, aunque me pegué cuando fui más grande, porque de chico viajaba mucho y lo tenía muy ausente. Me decía que me amaba mucho, pero era un tipo de pocas palabras. Era muy pragmático. Era muy solitario, era él solo, pero me enseñaba. Fue ir a la par suya. Trabajar con él era muy difícil. Era una pelea muy reñida que tuvimos durante mucho tiempo. Cuando iba a incorporarme completamente se mató… El sueño se terminó ahí. Cada charla que tenía con él hacía que me brillen los ojos. Tomo lo bueno, fue un grande y marcó una diferencia en lo que hizo. Quise implementar lo que aprendí con él en lo mío. Fui una de las pocas personas que estuvo a su lado toda la vida. Lo acompañé desde que no tenía un mango. Así que sí llegué a laburar en conjunto con él: mis 28 años de vida.
- ¿Qué implementás de todo lo que aprendiste con tu viejo en Isurus?
- La idea de que uno con teoría no llega a ningún lado, sino con la práctica. Para el afuera la teoría es muy linda y color de rosa, pero lo que importan son los hechos. Hay que ponerle toda la pasión a lo que uno trabaje. A veces los resultados no llegan cuando uno quiere, pero si ponés huevos y garra, por más que tengas que invertir, llega. Que nada es gratis, que el camino al éxito es solitario, que hay que tener en claro que en la vida quedan pocas personas a tu lado, pero que valen más que mil. Que tienen que trabajar con honestidad, transparencia y códigos. Que es muy difícil en un mundo lleno de mediocridad, pero que a la larga es lo que te hace triunfar y llegar lejos. Nadie es perfecto. Creo que cuando uno le pone predisposición, ganas y pasión la gente se da cuenta, por más que lo quieras dibujar e inventar. Como yo digo: “Que la cuentan como quieran pero verdad hay una sola”. Si uno sigue sus valores y demuestra con hechos, el resto es pura gilada. No le doy cabida. Yo me guío por los hechos, no por las palabras. Es lo que planeo hacer. Seguiré mi camino. Puede ser que me quede solo, pero estoy tranquilo que es por ahí.
-¿Te gustaría convertirte en lo que fue tu viejo para el fútbol argentino pero en los esports?
- Me gustaría convertirme en una persona que pueda dejar una marca, un grano de arena y que eso sirva para muchos chicos que desean llegar a convertirse en algo y que la sociedad tira para atrás. Yo me siento identificado. Sé lo que se siente estar solo contra el mundo, así que cuando uno está dentro de una computadora es comodicen en la película Ready Player One: sos algo más que un avatar. Uno cuando ale de ahí vuelve a la realidad y a veces es dura. Es dura. Pero bueno, yo creo en esto, quizás estoy loco. Me encantaría convertirme en una persona que haya podido contribuir a un ecosistema que me encanta. Quiero implementar lo que hizo mi viejo y demostrar que él no murió, que siempre va a estar y que Cyterszpiler siempre va a ser un apellido que va a simbolizar más que muchas letras complejas que cuestan pronunciarlas y escribirlas. Dios dirá en qué me quiero convertir. Es el único juez en el que creo. Ellos, mis perros, mi abuela, y hoy el amor de mi vida. A veces la vida no pasa por tener el mayor conocimiento, sino por tener huevo, garra y corazón, nada más. Me encantaría convertirme en algo más. Admiro las personas que luchan por algo distinto. A mí lo fácil no me gusta, me aburre. Me gusta lo diferente, lo complicado.
- ¿Qué pensás que te diría tu viejo sobre todo lo que estás logrando?
- Era una persona complicada, de pocas palabras. En el fondo estaría muy orgulloso, sin dudas. Siempre fui para él la luz de sus ojos. Como también mi hermano. Para mí estaría orgulloso. Cagándome a pedos, no entendiendo nada. En 2017 cuando íbamos a arrancar me decía: “Arrancá hijo, yo confío.” En 2011 me hubiese se hubiese cagado de risa, pero igual me hubiese bancado. Pero estará muy orgulloso, siempre me lo decía. Es un tipo complicado pero que te lo terminaba diciendo. Él me transmitió el barrio, la esencia de tener potrero y tener garra. Me diría que labure y no me queje y queme rompa el culo. Me diría: “Si querés llegar donde querés llegar rómpete el culo. Es la única manera”.
La camiseta de Isurus Gaming que utilizará Juan Cyterszpiler será un homenaje a su padre. Debajo del escudo tendrá la leyenda “Por el Ruso”, debido al apodo que tenía Jorge.
Para concluir, Juan agregó: “Quiero dejar en claro que aunque nos den por vencidos vamos a salir adelante, y por mi viejo vamos a resurgir. Le quiero agaredecer a Kala, a Isurus, a varios clubes que me han abierto las puertas, a cada jugador y a cada persona que quizás no creyó. Es muy duro la verdad. Creo que recién caigo que no está mi viejo conmigo y es muy duro. Este año va por él, que está en el cielo, por mi abuela y mis perros. Por eso me hice la camiseta".