Infinity Esports es una de las organizaciones más importantes de deportes electrónicos en la región. Compite en la Liga Latinoamérica de League of Legends y preparó un equipo con grandes figuras para comenzar la temporada 2020. Incorporó a los argentinos Matías “Whitelotus” Musso y a Mariano “Genthix” Polonsky, como tirador y soporte respectivamente. Luego de haber formado un dúo de temer durante el 2017 y el 2018 en Rainbow7 (ex Lyon Gaming), volverán a juntarse en la escuadra del Infinito. Pese a que llegan como estrellas, ninguno de los dos tuvo un gran año a nivel competitivo, por lo que seguramente tendrá como objetivo volver a su nivel para conseguir más títulos.
Whitelotus emigró a INTZ, de la liga de Brasil, en enero del 2019. “Me fui porque quería probar otra cosa. No me convenció la idea de que la Liga Latinoamérica tenga su base de operaciones en Chile”, reveló en un stream de Infinity. Allí, pese a que se coronó campeón, finalizó el split como suplente. Luego pasó a Redemption POA, en donde tampoco pudo encontrar su mejor rendimiento. El cordobés de 23 años contó que tuvo bastantes problemas durante el último año, tanto adentro como afuera del juego: “Me fui solo sin hablar portugués, no entendía nada y es muy difícil jugar y vivir así. Se me complicó un montón. La pasé medio mal. Después, en Redemption, solo las primeras tres semanas tuvimos internet. Después no podíamos entrenar ni jugar SoloQ (el entrenamiento en solitario de los jugadores)”.
Sus peores meses fueron los primeros, porque no logró adaptarse rápidamente y por una insólita medida que tomó el dueño de INTZ con él: “Yo pensaba que si me iba a Brasil iba a ser con alguien, para hablar español, no sentirme tan fuera de lugar y aprender juntos, pero me fui solo y me arrepentí. Salió peor de lo que pensé. Sobre todo porque yo hablo inglés y después de firmar el contrato les prohibieron a mis compañeros comunicarse conmigo en ese idioma. Solo podían hablarme en portugués, para forzarme a aprender. Me sentía en Corea, no entendía nada. Hablaban entre ellos. Yo les decía algo en inglés y me respondían en portugués. Fue un proceso re difícil. Hubo muchos factores que ayudaron a que sea un año complicado”.
Por si fuera poco, intentó regresar a Latinoamérica a mediados del año y se lo prohibieron: “Estuve cerca de volver antes de arrancar el segundo split, pero el dueño de INTZ me lo impidió. Me dijo que me iba a Redemption o me quedaba. No soy muy fan de ese tipo…”.
Por otro lado, Genthix disputó parte del Clausura de la Liga Latinoamérica con Rainbow7, pero decidieron sacarlo del equipo. “No quiero hablar mucho de ese R7. No quiero hablar mal de la gente, no tiene sentido. Yo había rechazado una oferta para irme a Brasil con Mati, pero me quedé porque ya había arreglado de palabra. Desde el día que firmé hubiera preferido la otra opción”, aclaró el soporte de 29 años.
Además, destacó el hecho de volver a jugar con su compatriota: “Jugar con Mati suma mucho. Prefiero jugar con él que con cualquier otro. Afuera del juego tenemos cosas parecidas. El día a día más rápido. En el último equipo el día no pasaba rápido, ni me entendía con el ADC. Aparte el proyecto de Infinity me llamó la atención y por eso agarré”. Lo mismo piensa el cordobés, quien no dudó en elogiarlo: “Creo que es con el que más cómodo me sentí. Es el plus de llevarse bien. Antes jugaba con un support que no hablaba mi idioma y el carril inferior es la única línea que jugás de a dos. No tenemos mucho tiempo para comunicarte y tomar decisiones”.
Whitelotus será uno de los jugadores mejor pago de toda la región y en cuanto a esto, aclaró que no es el dinero lo que lo motivó a regresar a su región: “Tuve ofertas para quedarme en Brasil por mucha más plata de lo que me ofreció Infinity, pero quería volver a Latam a ganar. No niego que el sueldo afecte, no voy a ganar 5000 dólares como lo hacía hace cinco años. Pero el último año hice más plata que cuando ganaba todo en Lyon y me sentí vacío, no me sentía feliz. Prefiero perder plata y salir campeón en todos los torneos, que ganar mucho y perder contra los peores equipos. Quiero volver a jugar un Mundial”.
Por último, ambos hicieron referencia a su nivel y a las chances de volver a estar entre los jugadores top. “Me puse a jugar porque creo que puedo llegar a buen rendimiento de vuelta, no juego para robar. Me tengo confianza. Posiblemente al principio cueste por temas de continuidad, pero no creo que me vaya a ser muy difícil”, soltó Genthix. Whitelotus, por otro lado, aclaró que se siente superior a sus competidores: “Cuando en Brasil entrenábamos con equipos de Latam teníamos 90% de winrate. No perdíamos casi ningún juego. No es por menospreciarlos, pero siento que soy mejor que el resto de los ADC mecánicamente. Ahora no puedo practicar tanto por mi internet, pero si me das un mes en una gaming house voy a retomar”.