29 fotos de la renovación del frente marítimo de Pinamar: las últimas moles de cemento antes de su demolición

Son Cabo Blanco y Pinamar Golf, que fueron recuperados por el municipio tras un conflicto judicial de 11 años. Por dentro y por fuera, lo que quedó de esta arquitectura vetusta

En septiembre pasado, el municipio de Pinamar tomó posesión de los últimos dos balnearios de hormigón, tras un conflicto judicial de 11 años
Se trata de Cabo Blanco y Pinamar Golf, que serán demolidos en marzo que viene
El Programa de Renovación del Frente Marítimo había sido ordenado por el municipio en 2009, pero recién fue ejecutado a partir de 2016
La normativa dice que las concesiones no pueden superar los 300 metros cuadrados. Con esta importante transformación se apuntó a ganar más de 100 mil metros de cuadrados de playa pública y a reducir más de 20 mil metros cuadrados de concreto
Desde el municipio se destaca que "Pinamar es pionera en la implementación de políticas ambientales e iniciativas para el manejo sostenible de sus recursos naturales. A través del reordenamiento del Frente Marítimo, con la demolición y renovación de los balnearios, la ciudad recuperó el médano costero, las playas se extendieron y ganaron calidad"
Los primeros paradores se construyeron a finales de los años 50. En los 90, con el boom de Pinamar, surgieron los balnearios repletos de servicios. Tenían canchas de fútbol, de paddle y hasta salas de masajes
La foto de hoy muestra los viejos edificios fuera de contexto. El Municipio obligó a los paradores a construir sobre pilotes, a un metro y medio de altura sobre la arena, para permitir que los movimientos naturales de la playa no sean obstruidos
Cabo Blanco, una construcción demodé, de estilo mediterráneo, tiene más de 600 metros subterráneos que eran destinados al depósito de vehículos náuticos y vivienda para trabajadores de verano, y más de 400 metros de superficie en la planta visible
Muchos balnearios ahora están sobre lo que eran sus estacionamientos, y eso pasará con los que últimos en pie
Su demolición se demoró a raíz de que presentaron medidas cautelares y trabaron jurídicamente el intento de terminar con las estructuras de hormigón
Cabo Blanco y Pinamar Golf están casi pegados, en la zona norte del partido, abandonados sobre un médano
Ambos edificios están en desuso y cerrados desde hace cinco temporadas. El paso del tiempo y la falta de mantenimiento e inversión quedan reflejadas en las fachadas
"Fueron 6 años de litigio hasta llegar a Suprema Corte, fue un laburo que valió la pena. Se cierra una etapa y comienza otra", dijo el intendente de Pinamar, Martín Yeza, al anunciar la recuperación de la posesión
La concesión de Cabo Blanco se anuló por una deuda de $3 millones de pesos. Demolerlo, se estima desde el municipio, le costará a los dueños que se queden con la concesión la mitad del valor de esa deuda
Con una visión eco friendly el partido transformó sus 46 paradores con un diseño ecológico y natural. Además, continúa la prohibición del uso de pajitas y se armaron espacios delimitados para fumadores
Desmontables, en madera, acero y chapa, son características de los paradores que se reconvirtieron
El intendente pinamerense acompañó a Infobae en la recorrida al balneario Cabo Blanco
Postal de Pinamar Golf, una estructura más pequeña que Cabo Blanco
En este caso, una vez demolida la estructura, el espacio muy probablemente será aprovechado como playa pública
Las moles obstruye la recomposición del médano, que dificulta el cuidado acuífero del agua dulce, explicaron desde el municipio
"Esta gestión de equipo tiene una visión: vale la pena cada día de trabajo para cuidar lo que es de todos los pinamarenses. Ahora comenzamos el proceso de demolición de ambos edificios y cerramos una etapa que empezamos juntos", destacaron de Pinamar
Hasta hoy, los últimos que modificaron sus ángulos noventosos habían sido La Posta del Mar, Paradise y Terrazas al Mar
Reposeras, carteles, restos de sillas rotas, botellas de cerveza, colchones destrozados y boletas, entre otras, perduran dentro de las estructuras
La cocina de Pinamar Golf, cuyas ventanas están obstaculizadas por lonas verdes y azules
“Esta la parte final de un proceso judicial que se inició en febrero de 2010. En 2015, cuando asumimos como gestión, fue uno de los objetivos principales el saneamiento del frente marítimo y la continuidad del proceso licitatorio”, dijo Martín Rapallino, asesor letrado municipal sobre la restitución de los paradores a la órbita municipal
"Si bien son dos balnearios, este fue uno de los más complejos en cuanto al proceso judicial porque estaban otras UTF’s que se fueron resolviendo en el trascurso del tiempo. Pero este fue el más largo", agregó el abogado
El Pájaro, Salvador Gaviota, Barbados, Marbella y Hemingway Cariló, entre otros balnearios clásicos se reconvirtieron
Una postal del piso superior en Pinamar Golf
Yeza, sobre el techo de Cabo Blanco

Fotos: Gustavo Gavotti.

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